Quintana: ‘Bolivia está preparada para resistir shock de la caída de precios’
La Paz, Erbol
El ministro de la Presidencia Juan Ramón Quintana aseveró que la caída de los precios internacionales de las materias primas no afectará de manera significativa al país porque el Estado Plurinacional está preparado para aguantar ese “shock” y tomó sus previsiones.
“Es muy difícil decir que no va a afectar, claro que va a afectar, pero no va a afectar de manera significativa. Bolivia está preparada para resistir el shock de la caída de precios. Tenemos reservas internacionales fuertísimas, una tasa de crecimiento importarte, además que nuestra economía no está globalizada, no dependemos exclusivamente de los precios internacionales de materia prima y tenemos un mercado interno que es capaz de asimilar estas variaciones”, dijo el Ministro.
La Gobernación de Santa Cruz advirtió que Bolivia perdería hasta 700 millones de dólares por la caída del petróleo en 2015. El gobernador de Cochabamba, Edmundo Novillo, anunció una reunión de autoridades nacionales y departamentales para analizar el tema y buscar alternativas paliativas, mientras que su par de Potosí, Félix Gonzales, informó que su departamento estima recibir más de 100 millones de bolivianos menos que el año pasado por regalías mineras debido a la baja de los precios.
En cuanto al petróleo, Quintana aseveró que el Gobierno tomó las previsiones desde el diseño del Presupuesto General del Estado (PGE) el cual fue calculado en función de un precio del barril de petróleo bajo como anticipación de la incertidumbre que se generaría.
Ayer el analista de la Fundación Jubileo, René Martínez, señalo que el PGE fue calculado con 74,6 dólares por barril de petróleo y que mientras el precio internacional no baje de esa cifra no se afectará el presupuesto de entidades territoriales, aunque su ingreso efectivo se vería mermado.
El Ministro de la Presidencia agregó que el precio de este recurso subió por razones geopolíticas: la invasión de Estados Unidos a países productores, pero espera que en el futuro estas naciones se reconstruyan y reclamen sus derechos propietarios y en esa situación habría un ascenso del valor.
El ministro de la Presidencia Juan Ramón Quintana aseveró que la caída de los precios internacionales de las materias primas no afectará de manera significativa al país porque el Estado Plurinacional está preparado para aguantar ese “shock” y tomó sus previsiones.
“Es muy difícil decir que no va a afectar, claro que va a afectar, pero no va a afectar de manera significativa. Bolivia está preparada para resistir el shock de la caída de precios. Tenemos reservas internacionales fuertísimas, una tasa de crecimiento importarte, además que nuestra economía no está globalizada, no dependemos exclusivamente de los precios internacionales de materia prima y tenemos un mercado interno que es capaz de asimilar estas variaciones”, dijo el Ministro.
La Gobernación de Santa Cruz advirtió que Bolivia perdería hasta 700 millones de dólares por la caída del petróleo en 2015. El gobernador de Cochabamba, Edmundo Novillo, anunció una reunión de autoridades nacionales y departamentales para analizar el tema y buscar alternativas paliativas, mientras que su par de Potosí, Félix Gonzales, informó que su departamento estima recibir más de 100 millones de bolivianos menos que el año pasado por regalías mineras debido a la baja de los precios.
En cuanto al petróleo, Quintana aseveró que el Gobierno tomó las previsiones desde el diseño del Presupuesto General del Estado (PGE) el cual fue calculado en función de un precio del barril de petróleo bajo como anticipación de la incertidumbre que se generaría.
Ayer el analista de la Fundación Jubileo, René Martínez, señalo que el PGE fue calculado con 74,6 dólares por barril de petróleo y que mientras el precio internacional no baje de esa cifra no se afectará el presupuesto de entidades territoriales, aunque su ingreso efectivo se vería mermado.
El Ministro de la Presidencia agregó que el precio de este recurso subió por razones geopolíticas: la invasión de Estados Unidos a países productores, pero espera que en el futuro estas naciones se reconstruyan y reclamen sus derechos propietarios y en esa situación habría un ascenso del valor.