La tragedia de las 200 niñas que llevan seis meses secuestradas en Nigeria
Nigeria, BBC
Exactamente hace seis meses secuestraron a 200 niñas y adolescentes en Nigeria. Todavía no aparecieron.
El
14 de abril, militantes armados del grupo islamista Boko Haram
irrumpieron en la aldea de Chibok, en el noreste de Nigeria, y se las
llevaron por la fuerza mientras dormían en un internado escolar. A
pesar de la campaña internacional que se inició para exigir su
liberación y el clamor de sus familiares, las jóvenes siguen
secuestradas. "Estamos en una situación desesperada", le explicó a la BBC Hanatu Dauda, madre de una de las escolares. "Lo más doloroso es que no sabemos dónde las tienen", dijo. La
creencia generalizada es que las niñas se encuentran en el bosque de
Sambisa, una enorme reserva verde en la frontera entre Nigeria y
Camerún. Algunos padres las buscaron allí, pero tuvieron que
retirarse sin éxito debido al peligro de entrar en lo que es considerado
un bastión del grupo extremista.
Se cree que las niñas están en un bosque cerca de la frontera con Camerún.
Las familias están muy preocupadas por el destino de las jóvenes, la mayoría de los cuales tiene entre 16 y 18 años. "A
veces, cuando vamos a la granja y recordamos lo que ha pasado, rompemos
a llorar", explica Dauda, ataviada con un vestido colorido y sentada
sobre una tela en el suelo. Los padres dicen que no saben nada sobre dónde o en qué estado se encuentran las adolescentes. Una cincuentena de ellas lograron escapar de sus captores en las primeras semanas del secuestro.
Gobierno
"No hay información sobre nuestras hijas", se queja la mujer. "Escuchamos que pronto serán liberadas, pero al final nos damos cuenta de que no hay información", dice. Las
familias critican la actitud del gobierno de Nigeria que, en su
opinión, no hace lo suficiente por lograr la liberación de las jóvenes. "El gobierno tardó tres semanas en reconocer el secuestro", afirma Naziru Mikailu, periodista del servicio hausa de la BBC.
Algunas de las adolescentes secuestradas lograron escapar.
Algunos padres viajaron en julio hasta la capital de Nigeria, Abuja, para reunirse con el presidente, Goodluck Jonathan. "Nos
prometió que pronto nos podríamos reunir con nuestras hijas, a finales
de agosto. Pero han pasado agosto y septiembre y no hemos oído nada
sobre ellas", relata Yahaya Mohammed, padre de una de las adolescentes
secuestradas. Según él, la situación de los familiares es tan grave que "seis mujeres se volvieron locas porque no pueden superar el trauma". Mohammed pide que la comunidad internacional "presione al gobierno" para que éste consiga que Boko Haram las libere. En el idioma local hausa, Boko Haram significa literalmente "la educación occidental está prohibida".
Indignación
El secuestro de las escolares generó indignación en todo el mundo. La
campaña #BringBackOurGirls (#DevuelvanANuestrasNiñas) movilizó a
millones de personas en las redes sociales, incluidos famosos y
personalidades como Michelle Obama y Malala, la joven paquistaní
galardonada recientemente con el premio Nobel de la Paz.
Lea también: #BringBackGoodluck2015: el hashtag que pone en aprietos al presidente nigeriano En una carta que publicó el lunes el diario británico The Independent, expertos en política exterior piden que se actúe contra Boko Haram, un grupo que mantiene similitudes con Estado Islámico. "Boko
Haram y Estado Islámico forman parte de una red de terror internacional
creciente y bien organizada que supone una amenaza directa para la
seguridad nacional de Reino Unido. Hay que pararlos", dice la carta.
Promesas
Pero Will Ross, corresponsal de la BBC en Nigeria, asegura que no hay pruebas de que se hayan producido avances.
La campaña #BringBackOurGirls movilizó a millones de personas en las redes sociales
"En los últimos meses hemos oído promesas de que el rescate era inminente, pero no hechos", afirma Ross. El
corresponsal dice que el drama de las niñas está envuelto en rumores no
confirmados, como que "han dividido a las niñas en dos grupos y las han
llevado fuera de Nigeria". La situación se ha "deteriorado dramáticamente en el noreste de Nigeria desde el secuestro", afirma. "Boko Haram obligó a comunidades enteras a dejar sus casas". Y
añade que, aunque la situación de estas 200 jóvenes ha despertado más
interés internacional, los secuestros de niñas en esa zona de Nigeria
"no se han detenido".