Islamistas y curdos luchan cerca de ciudad siria
Beirut, AP
Extremistas del Estado Islámico atacaron el viernes con intenso fuego de obuses una ciudad curda en Siria, en la frontera con Turquía, en tanto que se preparaban para lanzar una ofensiva frontal contra esa localidad estratégica, cuya captura les permitirá unir directamente las zonas que controlan en Alepo y su baluarte en Raqqa, en el este.
La lucha transcurría mientras el primer ministro turco Ahmet Davutoglu anunciaba que su nación hará lo que pueda para impedir la caída de Kobani, aunque no precisó el tipo de asistencia que facilitaría su país.
El parlamento turco otorgó el jueves al gobierno nuevos poderes a fin de que emprenda incursiones militares en Siria e Irak, y para que permita a fuerzas extranjeras el uso del territorio para posibles operaciones contra el grupo Estado Islámico.
Autoridades y activistas curdos dijeron que los combatientes del grupo Estado Islámico no han logrado penetrar en esta ciudad fronteriza en tanto que continuaba la lucha en la víspera de una importante celebración musulmana.
"Parece que van a atacar durante la noche e intentarán ingresar (en Kobani) en el día de la celebración", dijo Nasser Haj Mansurg, funcionario de defensa en la región curda en Siria, en referencia a la jornada sagrada musulmana del Eid al-Adha, que comienza el sábado en la mayoría de los países islámicos.
"Los combatientes curdos están listos y preparados para repeler cualquier ataque, apuntó.
Kobani y zonas circunvecinas están bajo fuego desde mediados de septiembre; los extremistas han capturado decenas de aldeas curdas cercanas. Debido a la ofensiva, han emprendido la huida unos 160.000 sirios, en tanto que los combatientes curdos maniobran a toda prisa para repeler el avance de los extremistas hacia las afueras de la ciudad, también conocida como Ayn Arab.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, un grupo que monitorea la guerra civil en Siria desde Gran Bretaña, dijo que unos 3.000 desplazados curdos estaban varados en la frontera entre Siria y Turquía, ya que las autoridades turcas les impiden el paso hacia lugar seguro.
El observatorio informó de la intensa lucha del viernes al este y sureste de Kobani, donde, dijo, murieron siete extremistas del Estado Islámico y 13 combatientes curdos.
El grupo Estado Islámico atacó Kobani a pesar de la reanudación de los ataques aéreos que encabeza Estados Unidos contra esa organización en la zona. Aviones de Estados Unidos bombardean desde la semana pasada al Estado Islámico en suelo Sirio y desde principios de agosto en el vecino Irak.
Un reportero de The Associated Press que daba seguimiento a la lucha desde la localidad fronteriza turca de Suruc informó de intenso fuego de obuses contra Kobani disparados desde el sur y el oeste.
Un tanque avanzó hasta la orilla de la localidad en tanto que los obuses caían a casi 450 metros (casi 500 yardas) de la frontera turca. Las ambulancias iban y venía en la zona limítrofe para el traslado de los heridos a Turquía.
Extremistas del Estado Islámico atacaron el viernes con intenso fuego de obuses una ciudad curda en Siria, en la frontera con Turquía, en tanto que se preparaban para lanzar una ofensiva frontal contra esa localidad estratégica, cuya captura les permitirá unir directamente las zonas que controlan en Alepo y su baluarte en Raqqa, en el este.
La lucha transcurría mientras el primer ministro turco Ahmet Davutoglu anunciaba que su nación hará lo que pueda para impedir la caída de Kobani, aunque no precisó el tipo de asistencia que facilitaría su país.
El parlamento turco otorgó el jueves al gobierno nuevos poderes a fin de que emprenda incursiones militares en Siria e Irak, y para que permita a fuerzas extranjeras el uso del territorio para posibles operaciones contra el grupo Estado Islámico.
Autoridades y activistas curdos dijeron que los combatientes del grupo Estado Islámico no han logrado penetrar en esta ciudad fronteriza en tanto que continuaba la lucha en la víspera de una importante celebración musulmana.
"Parece que van a atacar durante la noche e intentarán ingresar (en Kobani) en el día de la celebración", dijo Nasser Haj Mansurg, funcionario de defensa en la región curda en Siria, en referencia a la jornada sagrada musulmana del Eid al-Adha, que comienza el sábado en la mayoría de los países islámicos.
"Los combatientes curdos están listos y preparados para repeler cualquier ataque, apuntó.
Kobani y zonas circunvecinas están bajo fuego desde mediados de septiembre; los extremistas han capturado decenas de aldeas curdas cercanas. Debido a la ofensiva, han emprendido la huida unos 160.000 sirios, en tanto que los combatientes curdos maniobran a toda prisa para repeler el avance de los extremistas hacia las afueras de la ciudad, también conocida como Ayn Arab.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, un grupo que monitorea la guerra civil en Siria desde Gran Bretaña, dijo que unos 3.000 desplazados curdos estaban varados en la frontera entre Siria y Turquía, ya que las autoridades turcas les impiden el paso hacia lugar seguro.
El observatorio informó de la intensa lucha del viernes al este y sureste de Kobani, donde, dijo, murieron siete extremistas del Estado Islámico y 13 combatientes curdos.
El grupo Estado Islámico atacó Kobani a pesar de la reanudación de los ataques aéreos que encabeza Estados Unidos contra esa organización en la zona. Aviones de Estados Unidos bombardean desde la semana pasada al Estado Islámico en suelo Sirio y desde principios de agosto en el vecino Irak.
Un reportero de The Associated Press que daba seguimiento a la lucha desde la localidad fronteriza turca de Suruc informó de intenso fuego de obuses contra Kobani disparados desde el sur y el oeste.
Un tanque avanzó hasta la orilla de la localidad en tanto que los obuses caían a casi 450 metros (casi 500 yardas) de la frontera turca. Las ambulancias iban y venía en la zona limítrofe para el traslado de los heridos a Turquía.