El Kremlin tiembla por debajo de los 80 dólares

Moscú cree que la bajada de precios puede reducir las inversiones en el sector energético y la producción de crudo

Elena Vicéns
Madrid, El País
El presupuesto ruso tradicionalmente está basado en el precio del petróleo y los ingresos de la venta del crudo, por lo que la dinámica de los precios influye esencialmente en la economía. Según algunas estimaciones, cada 10 dólares que baja el barril de petróleo, el déficit público aumenta en un 1% del PIB. El presupuesto de 2014 se diseñó con un precio de 93 dólares por barril, y el de 2015, de 95 dólares. Algunos especialistas creen que el precio límite que puede aguantar la economía rusa es de 80 dólares.


“Se considera que el precio crítico del petróleo, que puede devorar el Fondo de Reserva y reproducir la situación de la URSS de la década de los ochenta, es inferior a 80 dólares por barril, aunque ahora no existen condiciones previas para esto, y por lo tanto para una macrocrisis. La reducción de las importaciones en 50.000 millones de dólares por las sanciones nos permite frenar la caída del precio de los actuales 110-120 dólares hasta 90-100. Y el dólar durante 2015 flotará en torno a 35-40 rublos”, calcula Natalia Orlova, economista jefe del Alfa-Bank.

El viceprimer ministro ruso, Arkadiy Dvorkovich, estima que los bajos precios del petróleo pueden reducir las inversiones en el sector energético. “Los precios se comportan a menudo imprevisiblemente. Pero nosotros siempre hemos tenido en cuenta, al cuadrar los presupuestos, una posible bajada de los precios. Si siguen bajando, se reducirán las inversiones en el sector. En el futuro puede pasar lo contrario, cuando los precios crezcan hasta llegar a un nivel insostenible”, comentó Dvorkovich ayer durante la inauguración del Foro Nacional de Gas y Petróleo en Moscú.

El ministro de Energía, Alexander Novak, está convencido de que los precios subirán en el futuro a 90-110 dólares. Según Novak, la actual caída de precios está en el límite de los parámetros presupuestarios. Además la caída de precios puede provocar una bajada en la producción. El vicepresidente del gigante petrolero Lukoil, Leonid Fedún, estima que el aumento de la extracción se estabilizó en los últimos años. “No habrá más crecimiento. Antes pensábamos que el descenso de la extracción llegaría a Rusia en 2016. (...) A finales de este año podemos esperar un crecimiento cero”, constató.

Entradas populares