La Supercopa deja señalado a Ancelotti
Madrid, EFE
La derrota en la Supercopa de España del Real Madrid ante el Atlético de Madrid, deja en el olvido el éxito de la décima Copa de Europa con la que concluyó la pasada campaña y la conquista de la Supercopa de Europa con la que arrancó la actual, y deja señalado a Carlo Ancelotti.
La pérdida de la sonrisa de Ancelotti es patente en el inicio de temporada. No la recuperará a corto plazo ya que las críticas tras la derrota en el Vicente Calderón se centrarán en él. El técnico italiano fue incapaz de encontrar el camino para superar los planteamientos del 'Cholo' Simeone, con errores graves de concentración y en acciones a balón parado, cambios discutibles y un mensaje incomprendido.
"No necesitaba hoy a Di María, fue una decisión técnica", argumentó tras la derrota Ancelotti ante la sorpresa de todos. El argentino es pieza básica siempre, por sus cualidades futbolísticas que son únicas en la plantilla blanca, pero aún lo es más si cabe si el portugués Cristiano Ronaldo no estaba en condiciones de comenzar el partido.
Sin el líder madridista en el terreno de juego, aún renqueante de la sobrecarga muscular que sufrió en la ida el martes, el Real Madrid acusó la falta de un referente. Sobre el césped estaban jugadores como el galés Gareth Bale o el francés Karim Benzema, pero ninguno dio un paso al frente. El que más se acercó a su verdadero nivel fue el colombiano James Rodríguez, y fue sustituido.
El día que jugó ubicado en la línea de tres de ataque, alejado de un puesto incómodo para James en el centro del campo, cada balón que tocó el colombiano provocó peligro en el Calderón. Era el futbolista del Real Madrid que más peligro generaba entre líneas pero Ancelotti lo eligió para ser sustituido.
Antes había quitado en el tiempo de descanso a Toni Kroos, una decisión difícil de explicar viendo a Xabi Alonso a un ritmo menor de juego, incrustado prácticamente entre los centrales, y cómo el alemán ha bajado su rendimiento desde que le movieron de posición y le pusieron cerca a un jugador de similares características.
Detalles técnicos como las acciones a balón parado señalan a Ancelotti. El Atlético de Madrid lo remató todo en el Bernabéu y repitió en el Calderón. Pese a que se había ensayado, como demostró el segundo técnico Paul Clement saliendo del banquillo en cada córner o falta lateral, el marcaje al jugador más eficaz del rival en esas acciones, Raúl García, lo ejercía el más bajo de la zaga, el lateral Dani Carvajal en clara desventaja.
El título se le escapó al Real Madrid entre faltas de concentración. Si en la ida fue a falta de dos minutos del final cuando en un saque de esquina llegó el fallo en cadena de la defensa, en la vuelta no se habían cumplido los dos minutos cuando un exceso de confianza de los centrales lo pagó carísimo con el gol del croata Mario Mandzukic.
Sumado a una extraña falta de gol (seis goles en siete partidos), con un nueve desaparecido que aún no ha marcado un solo tanto, el 'sexteto' al que aspiraba el conjunto madridista se vino abajo a las primeras de cambio, sin iniciarse aún Liga, Liga de Campeones y Copa del Rey.
El inicio de la segunda temporada de Ancelotti en el Real Madrid está marcado por asuntos en los que la opinión del entrenador no está contando para la directiva. Empujaron a irse a su portero de confianza, Diego López, el que más partidos jugaba al ser el elegido para la Liga, y ahora van a traspasar a un jugador que quiere retener como Di María. La Supercopa le ha dejado señalado.
