Familias de soldados rusos exigen respuestas
Moscú, AP
La última vez que Valeria Sokolova vio a su esposo, el soldado de tropas especiales de 25 años, le dijo que él y sus compañeros de armas se dirigían a un ejercicio militar en el sur de Rusia, cerca de la frontera con Ucrania.
"Se mostró vago, de una manera inusual, y fue difícil para todos despedirse", declaró Sokolova a The Associated Press, recordando la conversación de principios de este mes.
El lunes, 10 hombres de su división fueron capturados en el occidente de Ucrania en medio de los combates entre separatistas pro rusos y tropas ucranianas. Por lo menos otros dos elementos de esa división perdieron la vida y una cantidad no especificada resultaron lesionados.
Sokolova, madre de un niño de 6 años, no sabe qué ha pasado con su esposo y dijo que las autoridades militares rusas no han entregado información sobre ellos. Y Sokolova teme por su seguridad.
Y otras familias están planteando interrogantes similares sobre soldados rusos capturados o fallecidos, sin explicación alguna, que se dice están en ejercicios militares. Las respuestas pudieran socavar el apoyo público al presidente Vladimir Putin y su estrategia sobre Ucrania.
El gobierno ruso ha dado a conocer poca información sobre los soldados muertos en combate en apoyo a los rebeldes, algo que algunos han comparado con lo ocurrido durante la intervención soviética en Afganistán en la década de 1980. Pero este secreto puede ser difícil de mantener si el saldo de muertos aumenta.
Sokolova, quien declinó identificar a su esposo por temores de represalias, dijo que ella y otras esposas de militares fueron al cuartel local para exigir información.
"Fue entre nosotras mismas como nos enteramos de la cantidad de muertos y heridos", declaró a la AP por teléfono desde Kostroma, una ciudad 350 kilómetros (210 millas) al norte de Moscú.
Funcionarios rusos, Putin entre ellos, han dicho que los paracaidistas capturados se perdieron y cruzaron sin darse cuenta la frontera.
La noticia se agrega a una cantidad cada vez mayor de pruebas de que Rusia, a pesar de sus negativas, está enviando soldados y armas para combatir junto a los separatistas en Ucrania.
El jueves, Ucrania acusó a Rusia de enviar tanques, vehículos blindados y soldados a su territorio. Por su parte, la OTAN dijo que por lo menos un millar de soldados rusos están en Ucrania y dio a conocer lo que dijo son imágenes de satélite de la entrada de unidades de artillería rusas la semana pasada.
El líder rebelde Alexander Zajarchenko dijo que unos 4.000 efectivos rusos han combatido del lado de los separatistas desde que el conflicto comenzó en abril, incluidos soldados, pero afirmó que estaban de permiso y fueron a combatir voluntariamente.
Los casos de otros dos soldados rusos muertos en combate han salido recientemente a la luz.
Esta semana, la comisión presidencial sobre derechos humanos publicó una carta abierta en internet que exige una investigación de la muerte este mes de nueve efectivos de una brigada de infantería mecanizada enviada a la sureña región de Rostov para ejercicios militares.
La solicitud de investigación provino del Comité de Madres de Soldados, una muy respetada organización no gubernamental con un largo historial de defensa de los derechos de los soldados. Pero a los pocos días la carta ya no estaba en el portal de internet.
En la región norteña de Pskov, donde tiene su sede una importante división aerotransportada, la muerte de los paracaidistas parece haber sido suprimida. Alguien retiró los nombres de los fallecidos de tumbas recientes en un cementerio visitado por periodistas locales, a quienes unos truhanes amenazaron. Se ha dicho que han advertido a los familiares de paracaidistas muertos que no hablen con la prensa.
"Es el mismo comportamiento soviético", dijo Valentina Melnikova, directora del Comité de Madres de Soldados, con sede en Moscú.
"Me hace recordar los entierros secretos de soldados durante la primera mitad de la guerra en Afganistán", dijo, refiriéndose a la ocupación soviética de ese país entre 1979 y 1989. "Cuando traían los muertos no daban ninguna información de dónde habían caído y no permitían a la gente escribir en las lápidas que eran soldados".
La última vez que Valeria Sokolova vio a su esposo, el soldado de tropas especiales de 25 años, le dijo que él y sus compañeros de armas se dirigían a un ejercicio militar en el sur de Rusia, cerca de la frontera con Ucrania.
"Se mostró vago, de una manera inusual, y fue difícil para todos despedirse", declaró Sokolova a The Associated Press, recordando la conversación de principios de este mes.
El lunes, 10 hombres de su división fueron capturados en el occidente de Ucrania en medio de los combates entre separatistas pro rusos y tropas ucranianas. Por lo menos otros dos elementos de esa división perdieron la vida y una cantidad no especificada resultaron lesionados.
Sokolova, madre de un niño de 6 años, no sabe qué ha pasado con su esposo y dijo que las autoridades militares rusas no han entregado información sobre ellos. Y Sokolova teme por su seguridad.
Y otras familias están planteando interrogantes similares sobre soldados rusos capturados o fallecidos, sin explicación alguna, que se dice están en ejercicios militares. Las respuestas pudieran socavar el apoyo público al presidente Vladimir Putin y su estrategia sobre Ucrania.
El gobierno ruso ha dado a conocer poca información sobre los soldados muertos en combate en apoyo a los rebeldes, algo que algunos han comparado con lo ocurrido durante la intervención soviética en Afganistán en la década de 1980. Pero este secreto puede ser difícil de mantener si el saldo de muertos aumenta.
Sokolova, quien declinó identificar a su esposo por temores de represalias, dijo que ella y otras esposas de militares fueron al cuartel local para exigir información.
"Fue entre nosotras mismas como nos enteramos de la cantidad de muertos y heridos", declaró a la AP por teléfono desde Kostroma, una ciudad 350 kilómetros (210 millas) al norte de Moscú.
Funcionarios rusos, Putin entre ellos, han dicho que los paracaidistas capturados se perdieron y cruzaron sin darse cuenta la frontera.
La noticia se agrega a una cantidad cada vez mayor de pruebas de que Rusia, a pesar de sus negativas, está enviando soldados y armas para combatir junto a los separatistas en Ucrania.
El jueves, Ucrania acusó a Rusia de enviar tanques, vehículos blindados y soldados a su territorio. Por su parte, la OTAN dijo que por lo menos un millar de soldados rusos están en Ucrania y dio a conocer lo que dijo son imágenes de satélite de la entrada de unidades de artillería rusas la semana pasada.
El líder rebelde Alexander Zajarchenko dijo que unos 4.000 efectivos rusos han combatido del lado de los separatistas desde que el conflicto comenzó en abril, incluidos soldados, pero afirmó que estaban de permiso y fueron a combatir voluntariamente.
Los casos de otros dos soldados rusos muertos en combate han salido recientemente a la luz.
Esta semana, la comisión presidencial sobre derechos humanos publicó una carta abierta en internet que exige una investigación de la muerte este mes de nueve efectivos de una brigada de infantería mecanizada enviada a la sureña región de Rostov para ejercicios militares.
La solicitud de investigación provino del Comité de Madres de Soldados, una muy respetada organización no gubernamental con un largo historial de defensa de los derechos de los soldados. Pero a los pocos días la carta ya no estaba en el portal de internet.
En la región norteña de Pskov, donde tiene su sede una importante división aerotransportada, la muerte de los paracaidistas parece haber sido suprimida. Alguien retiró los nombres de los fallecidos de tumbas recientes en un cementerio visitado por periodistas locales, a quienes unos truhanes amenazaron. Se ha dicho que han advertido a los familiares de paracaidistas muertos que no hablen con la prensa.
"Es el mismo comportamiento soviético", dijo Valentina Melnikova, directora del Comité de Madres de Soldados, con sede en Moscú.
"Me hace recordar los entierros secretos de soldados durante la primera mitad de la guerra en Afganistán", dijo, refiriéndose a la ocupación soviética de ese país entre 1979 y 1989. "Cuando traían los muertos no daban ninguna información de dónde habían caído y no permitían a la gente escribir en las lápidas que eran soldados".