Empresa boliviana denuncia millonario fraude en Uruguay
Montevideo, Erbol
La jueza de crimen organizado Adriana de los Santos y el fiscal Juan Gómez tramitan dos denuncias por un presunto fraude financiero internacional que implica a una sociedad de bolsa con sede en Montevideo, que semanas atrás fue clausurada por el Banco Central.
La Asociación Pro Crédito, institución dedicada al apoyo financiero a sectores de pequeñas y medianas empresas en Bolivia, denunció por apropiación indebida, estafa y lavado de activos a los responsables de Open World Sociedad de Bolsa S.A., cuya principal sede se encuentra en Uruguay pero que posee oficinas en Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia y Panamá, al tiempo que cuenta con representaciones en Chile, Paraguay y Perú.
En su denuncia, la Asociación Pro Crédito alegó que perdió más de US$ 1.400.000 luego de firmar un contrato con Open World Sociedad de Bolsa S.A. para que administrara ese dinero en diferentes inversiones a nivel internacional. La entidad boliviana había decidido traspasar la gestión de sus fondos de inversión a esa compañía en 2009, luego de abandonar los servicios de la institución financiera Merrill Lynch.
Según la entidad boliviana el ciudadano argentino que controlaba la totalidad del paquete accionario de Open World Sociedad de Bolsa S.A. diseñó una "compleja ingeniería financiera y societaria" para "evadir sus responsabilidades ante los inversores apropiándose de los fondos invertidos sin rendir cuentas jamás por su accionar". La denuncia también implica a otras tres personas argentinas y a una mujer uruguaya.
"La maniobra incluyó la captación de fondos en un banco suizo, a nombre de Swiss Group Corporation, la entidad receptora de la inversión pero que luego -según se pudo constatar- dicha sociedad es controlada por la misma persona que captó la inversión", dice la denuncia -que fue presentada a fines de junio y ampliada un mes más tarde- al referirse al principal de Open World Sociedad de Bolsa S.A.
De hecho, según la denuncia, Swiss Group -empresa a través de la que se canalizaría el fondo de inversión de la Asociación Pro Crédito- no tiene su sede en Suiza sino en Delaware, el segundo Estado más pequeño de Estados Unidos y que por su legislación se lo considera un paraíso fiscal.
La denuncia vincula a Rampla Juniors con la maniobra, ya que una mujer relacionada al entramado societario de Open World Sociedad de Bolsa S.A. integra la Directiva del club. "Es claro que el Grupo Open World participa en la gestión de dicho club integrante de la Asociación Uruguaya de Fútbol", dice la denuncia.
Consultado por El País, el abogado Alfredo Taullard, socio del estudio Hughes & Hughes que representa a la Asociación Pro Crédito de Bolivia, se negó a hacer comentarios sobre el tema ya que la investigación está en una etapa reservada.
Conglomerado
Por otra parte, el abogado penalista Javier Simonetti, en representación de un grupo de casi 30 inversores uruguayos, presentó el jueves pasado una denuncia por estafa y lavado de activos contra los responsables de Open World Sociedad de Bolsa S.A.
"Mis clientes son agentes y/o inversores que invirtieron sus ahorros en los servicios financieros que ofrecían las empresas Open World Financial & Economic Expertes, Swiss Group Corporation y Lubeck Group, entre otras a través de Open World Sociedad de Bolsa S.A., que lejos de ser empresas independientes resultaron ser parte de un mismo conglomerado económico que compartieron el objetivo de apoderarse indebidamente y mediante engaño de las sumas aportadas por mis clientes", expresó Simonetti a El País.
El abogado indicó que sus clientes, que invirtieron en fondos de pensión y en fondos de renta en Estados Unidos, perdieron cerca de US$ 1 millón producto de la maniobra.
Según aseguró Simonetti, el esquema fraudulento se repitió "en varios" países de América Latina como Colombia, Chile, Perú, Brasil y Bolivia y el monto total "supera largamente" los US$ 50 millones.
En su denuncia, Simonetti también señaló las aparentes vinculaciones de Rampla Juniors con la maniobra de Open World Sociedad de Bolsa S.A. ya que varias personas vinculadas a ese club estuvieron, a su vez, relacionadas con empresas que figuran en el complejo entramado societario.
Simonetti aportó información referida a que la empresa tuvo participación en la compra de futbolistas que llegaron a ese club, y plantea la posibilidad de que esas transferencias deportivas se hayan financiado con los fondos de inversión de sus clientes, lo que podría configurar los delitos de estafa y lavado de activos.
Incluso, según la denuncia que presentó el abogado ante la jueza de los Santos, hay testigos que confirmarán que hubo casos de futbolistas de Rampla Juniors que cobraron sus salarios en las oficinas de Open World Sociedad de Bolsa S.A.
La jueza de crimen organizado Adriana de los Santos y el fiscal Juan Gómez tramitan dos denuncias por un presunto fraude financiero internacional que implica a una sociedad de bolsa con sede en Montevideo, que semanas atrás fue clausurada por el Banco Central.
La Asociación Pro Crédito, institución dedicada al apoyo financiero a sectores de pequeñas y medianas empresas en Bolivia, denunció por apropiación indebida, estafa y lavado de activos a los responsables de Open World Sociedad de Bolsa S.A., cuya principal sede se encuentra en Uruguay pero que posee oficinas en Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia y Panamá, al tiempo que cuenta con representaciones en Chile, Paraguay y Perú.
En su denuncia, la Asociación Pro Crédito alegó que perdió más de US$ 1.400.000 luego de firmar un contrato con Open World Sociedad de Bolsa S.A. para que administrara ese dinero en diferentes inversiones a nivel internacional. La entidad boliviana había decidido traspasar la gestión de sus fondos de inversión a esa compañía en 2009, luego de abandonar los servicios de la institución financiera Merrill Lynch.
Según la entidad boliviana el ciudadano argentino que controlaba la totalidad del paquete accionario de Open World Sociedad de Bolsa S.A. diseñó una "compleja ingeniería financiera y societaria" para "evadir sus responsabilidades ante los inversores apropiándose de los fondos invertidos sin rendir cuentas jamás por su accionar". La denuncia también implica a otras tres personas argentinas y a una mujer uruguaya.
"La maniobra incluyó la captación de fondos en un banco suizo, a nombre de Swiss Group Corporation, la entidad receptora de la inversión pero que luego -según se pudo constatar- dicha sociedad es controlada por la misma persona que captó la inversión", dice la denuncia -que fue presentada a fines de junio y ampliada un mes más tarde- al referirse al principal de Open World Sociedad de Bolsa S.A.
De hecho, según la denuncia, Swiss Group -empresa a través de la que se canalizaría el fondo de inversión de la Asociación Pro Crédito- no tiene su sede en Suiza sino en Delaware, el segundo Estado más pequeño de Estados Unidos y que por su legislación se lo considera un paraíso fiscal.
La denuncia vincula a Rampla Juniors con la maniobra, ya que una mujer relacionada al entramado societario de Open World Sociedad de Bolsa S.A. integra la Directiva del club. "Es claro que el Grupo Open World participa en la gestión de dicho club integrante de la Asociación Uruguaya de Fútbol", dice la denuncia.
Consultado por El País, el abogado Alfredo Taullard, socio del estudio Hughes & Hughes que representa a la Asociación Pro Crédito de Bolivia, se negó a hacer comentarios sobre el tema ya que la investigación está en una etapa reservada.
Conglomerado
Por otra parte, el abogado penalista Javier Simonetti, en representación de un grupo de casi 30 inversores uruguayos, presentó el jueves pasado una denuncia por estafa y lavado de activos contra los responsables de Open World Sociedad de Bolsa S.A.
"Mis clientes son agentes y/o inversores que invirtieron sus ahorros en los servicios financieros que ofrecían las empresas Open World Financial & Economic Expertes, Swiss Group Corporation y Lubeck Group, entre otras a través de Open World Sociedad de Bolsa S.A., que lejos de ser empresas independientes resultaron ser parte de un mismo conglomerado económico que compartieron el objetivo de apoderarse indebidamente y mediante engaño de las sumas aportadas por mis clientes", expresó Simonetti a El País.
El abogado indicó que sus clientes, que invirtieron en fondos de pensión y en fondos de renta en Estados Unidos, perdieron cerca de US$ 1 millón producto de la maniobra.
Según aseguró Simonetti, el esquema fraudulento se repitió "en varios" países de América Latina como Colombia, Chile, Perú, Brasil y Bolivia y el monto total "supera largamente" los US$ 50 millones.
En su denuncia, Simonetti también señaló las aparentes vinculaciones de Rampla Juniors con la maniobra de Open World Sociedad de Bolsa S.A. ya que varias personas vinculadas a ese club estuvieron, a su vez, relacionadas con empresas que figuran en el complejo entramado societario.
Simonetti aportó información referida a que la empresa tuvo participación en la compra de futbolistas que llegaron a ese club, y plantea la posibilidad de que esas transferencias deportivas se hayan financiado con los fondos de inversión de sus clientes, lo que podría configurar los delitos de estafa y lavado de activos.
Incluso, según la denuncia que presentó el abogado ante la jueza de los Santos, hay testigos que confirmarán que hubo casos de futbolistas de Rampla Juniors que cobraron sus salarios en las oficinas de Open World Sociedad de Bolsa S.A.