Argentina con “expectativa nula” ante nueva audiencia por la deuda en default
Buenos Aires, AFP
Argentina sostiene que la suspensión de la sentencia en su contra es la única vía de solución para resolver la batalla legal que mantiene con los fondos especulativos por la deuda y tiene nula expectativa de que el juez la conceda en la audiencia de este viernes en Nueva York.
“Las sucesivas audiencias son absolutamente negativas porque el juez (de la causa Thomas) Griesa no entiende este proceso y la condición de un país soberano“, dijo el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, en rueda de prensa en el aeropuerto de la capital argentina.
Griesa citó a las partes este viernes en Nueva York a las 18H00 GMT.
El juez sentenció al país a pagar 1.330 millones de dólares a fondos especulativos por bonos de la deuda y le ordenó cancelarlo en simultáneo al pago de servicios por bonos reestructurados en canjes de 2005 y 2010, pero Argentina se niega al aducir que desataría demandas millonarias.
El magistrado bloqueó dinero en cuentas de bancos fiduciarios, entre ellos el Bank of New York (BoNY), para impedir que los acreedores de los canjes cobren hasta tanto Argentina acepte cumplir la sentencia, lo que ha empujado al país sudamericano a un default parcial.
“Hay un juez que quiere atropellar la soberanía de un país y que dejó 539 millones de dólares (de un pago de la deuda) en un limbo jurídico. No existe (no es legal) retener esos fondos. El fallo no tiene pies ni cabeza”, dijo la presidenta Cristina Kirchner el jueves en un mensaje transmitido en cadena nacional.
El gobierno de Kirchner ha responsabilizado a su par de Estados Unidos por lo que considera un avasallamiento de la soberanía y presentó el jueves una demanda ante la Corte Internacional de La Haya (CIJ).
“Se trata de una violación a la soberanía y a las inmunidades del país y en el marco de esa invocación se ha promovido la acción ante el tribunal de La Haya”, dijo Capitanich.
Argentina entiende que “existe una responsabilidad del Estado de Estados Unidos por el funcionamiento de uno de los poderes, y en este caso de lo que estipula el juez Griesa” en su fallo.
Estados Unidos se retiró de la jurisdicción de la Corte en 1986 y debe aceptarla para que el tribunal proceda.
Si no lo acepta “el país demandado por la acción u omisión de uno de sus poderes debe indicar los caminos para ejecutar la solución de la controversia por medios pacíficos”, sostuvo Capitanich.
Argentina sostiene que la suspensión de la sentencia en su contra es la única vía de solución para resolver la batalla legal que mantiene con los fondos especulativos por la deuda y tiene nula expectativa de que el juez la conceda en la audiencia de este viernes en Nueva York.
“Las sucesivas audiencias son absolutamente negativas porque el juez (de la causa Thomas) Griesa no entiende este proceso y la condición de un país soberano“, dijo el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, en rueda de prensa en el aeropuerto de la capital argentina.
Griesa citó a las partes este viernes en Nueva York a las 18H00 GMT.
El juez sentenció al país a pagar 1.330 millones de dólares a fondos especulativos por bonos de la deuda y le ordenó cancelarlo en simultáneo al pago de servicios por bonos reestructurados en canjes de 2005 y 2010, pero Argentina se niega al aducir que desataría demandas millonarias.
El magistrado bloqueó dinero en cuentas de bancos fiduciarios, entre ellos el Bank of New York (BoNY), para impedir que los acreedores de los canjes cobren hasta tanto Argentina acepte cumplir la sentencia, lo que ha empujado al país sudamericano a un default parcial.
“Hay un juez que quiere atropellar la soberanía de un país y que dejó 539 millones de dólares (de un pago de la deuda) en un limbo jurídico. No existe (no es legal) retener esos fondos. El fallo no tiene pies ni cabeza”, dijo la presidenta Cristina Kirchner el jueves en un mensaje transmitido en cadena nacional.
El gobierno de Kirchner ha responsabilizado a su par de Estados Unidos por lo que considera un avasallamiento de la soberanía y presentó el jueves una demanda ante la Corte Internacional de La Haya (CIJ).
“Se trata de una violación a la soberanía y a las inmunidades del país y en el marco de esa invocación se ha promovido la acción ante el tribunal de La Haya”, dijo Capitanich.
Argentina entiende que “existe una responsabilidad del Estado de Estados Unidos por el funcionamiento de uno de los poderes, y en este caso de lo que estipula el juez Griesa” en su fallo.
Estados Unidos se retiró de la jurisdicción de la Corte en 1986 y debe aceptarla para que el tribunal proceda.
Si no lo acepta “el país demandado por la acción u omisión de uno de sus poderes debe indicar los caminos para ejecutar la solución de la controversia por medios pacíficos”, sostuvo Capitanich.