Crisis de inmigrantes abruma a Italia
Roma, AP
La crisis de inmigración en Italia ha saturado tanto los centros del gobierno que iglesias están ahora abriendo las puertas a migrantes recién llegados, muchos de ellos que huyen de conflictos en Siria y África.
La guardia costera italiana rescató a otros 293 migrantes en alta mar y los llevó a Sicilia el martes. El grupo se suma a casi 60.000 que han llegado a Italia en la primera mitad del 2014, muchos más que los 42.000 que llegaron en todo el 2013.
Iglesias en Palermo han sacado bancos para crear espacios para catres y miembros de las comunidades están ofreciéndose como voluntarios para cocinar y donar suministros. Voluntarios de la organización caritativa católica Caritas reciben embarcaciones de migrantes en el puerto con alimentos, ropa, médicos e incluso sicólogos.
"Hemos substituido altares por camas", dijo el reverendo Rosario Francolino, que ha estado coordinando la recepción de 700 africanos en una iglesia en Palermo desde el domingo. "Pienso que es la misa más hermosa que puede celebrar la comunidad".
Muchos de los que se están quedando en las iglesias han sobrevivido horrores durante su travesía a Sicilia. Kollycoulibal, un joven de 20 años de Malí, dijo que su embarcación ocupada por 49 hombres hizo agua el domingo por la mañana y él tuvo que nadar dos horas hasta que la guardia costera italiana le rescató. Diez hombres se ahogaron, incluyendo su primo de 16 años.
"Él no sabía nadar y yo traté de salvarle", dijo Kollycoulibal, que no dio su apellido. "Pero después de media hora en el agua, él se murió".
En toda Italia, centros del gobierno están atestados de inmigrantes, por el número récord de refugiados recogidos en el mar gracias a la operación Mare Nostrum. El programa fue lanzado por el gobierno luego que centenares de refugiados se ahogasen frente a las costas de Sicilia en octubre.
La crisis ha motivado que los críticos del gobierno demanden el fin de la operación, argumentando que el fortalecimiento de las patrullas está alentando a más migrantes a arriesgar sus vidas.
La crisis de inmigración en Italia ha saturado tanto los centros del gobierno que iglesias están ahora abriendo las puertas a migrantes recién llegados, muchos de ellos que huyen de conflictos en Siria y África.
La guardia costera italiana rescató a otros 293 migrantes en alta mar y los llevó a Sicilia el martes. El grupo se suma a casi 60.000 que han llegado a Italia en la primera mitad del 2014, muchos más que los 42.000 que llegaron en todo el 2013.
Iglesias en Palermo han sacado bancos para crear espacios para catres y miembros de las comunidades están ofreciéndose como voluntarios para cocinar y donar suministros. Voluntarios de la organización caritativa católica Caritas reciben embarcaciones de migrantes en el puerto con alimentos, ropa, médicos e incluso sicólogos.
"Hemos substituido altares por camas", dijo el reverendo Rosario Francolino, que ha estado coordinando la recepción de 700 africanos en una iglesia en Palermo desde el domingo. "Pienso que es la misa más hermosa que puede celebrar la comunidad".
Muchos de los que se están quedando en las iglesias han sobrevivido horrores durante su travesía a Sicilia. Kollycoulibal, un joven de 20 años de Malí, dijo que su embarcación ocupada por 49 hombres hizo agua el domingo por la mañana y él tuvo que nadar dos horas hasta que la guardia costera italiana le rescató. Diez hombres se ahogaron, incluyendo su primo de 16 años.
"Él no sabía nadar y yo traté de salvarle", dijo Kollycoulibal, que no dio su apellido. "Pero después de media hora en el agua, él se murió".
En toda Italia, centros del gobierno están atestados de inmigrantes, por el número récord de refugiados recogidos en el mar gracias a la operación Mare Nostrum. El programa fue lanzado por el gobierno luego que centenares de refugiados se ahogasen frente a las costas de Sicilia en octubre.
La crisis ha motivado que los críticos del gobierno demanden el fin de la operación, argumentando que el fortalecimiento de las patrullas está alentando a más migrantes a arriesgar sus vidas.