Klopp enseña el camino al Madrid y golea al Bayern 0-3
Pep salió con casi todo. Sólo dejó a Kross y Müller en el banquillo. Lección táctica del Borussia en el Allianz Arena. Marcaron Mkhitaryan, Marco Reus y Hofmann.
Munich, As
El león no parece tan fiero como lo pintaban. Al menos esa es la impresión que puede sacar Ancelotti después de ver el Bayern-Borussia. Klopp mostró el camino táctico en el Allianz Arena ante un Bayern que salió prácticamente con todo. Guardiola sólo dejó en el banquillo a Kross, Müller y Boateng. Sorprendió más el técnico del Borussia sentando a Lewandowski ante su futuro equipo. El Borussia presionó la salida de balón a la altura de los centrales, Javi Martínez y Alaba, y el Bayern lo pasó mal. Muy mal. Guardiola ganó en la posesión (72%), pero salió goleado en el Allianz Arena, con Uli Hoeness y Jupp Heynckes en el palco. Un 0-3 sonrojante para el todopoderoso campeón alemán. El técnico español jamás perdió un partido como local por más de dos goles de diferencia hasta que apareció su particular bestia negra, Jurgen Klopp, que con sus dos últimos partidos puede sacar una colección de dvd sobre nociones tácticas. Por otra parte, el Bayern encadena dos partidos consecutivos sin marcar en la Bundesliga pese a la pólvora que tiene arriba.
Pese a que los bávaros se proclamaron campeones de la Bundesliga a falta de siete jornadas del final, la imagen de los pupilos fue cuanto menos pobre. Al Bayern le costó sacar el balón jugado, como le gusta a Guardiola, con la pareja de mediocentros Lahm y Schweinsteiger. El 4-2-3-1 no funcionó ante un equipo que puso en apuros al Real Madrid el pasado martes en el Signal Iduna Park. Cierto es que el Borussia se juega la segunda plaza con su máximo rival, el Schalke 04, pero esta alineación del Bayern puede ser lo más parecido a lo que se vea el miércoles 23 de abril en el Santiago Bernabéu. El equipo de Guardiola afronta las semifinales de Copa este miércoles ante el Kaiserlautern, un equipo que milita en Segunda División, y el sábado 19 jugará contra el Eintracht Braunschweig.
Mkhitaryan acertó en el minuto 19 lo que falló en Dortmund ante el Real Madrid. Un saque de banda que Aubameyang controló de espaldas en el área, cedió atrás para Reus que en velocidad asiste para el futbolista armenio, que batió a Neuer con la izquierda. Poco peligro generó el Bayern con Ribéry y Robben en las bandas. El primer remate del croata Mandzukic llegó en el minuto 42. Un fallo en defensa del Borussia, pero un disparo inocente para las manos seguras de Weindefeller.
En la segunda mitad, con el joven Raeder bajo palos, el Borussia se vino más arriba todavía. En el minuto 48, Aubameyang asistió a Reus en una contra iniciada una vez más por Mkhitaryan. Los borusser eran los dueños y señores del Allianz Arena. Y en el 55’ la estocada final. Hofmann le ganó la espalda a Dante y marcó fácilmente ante el debutante Raeder. Fue entonces cuando intentó reaccionar Guardiola. Se cargó las bandas. Entró Müller por Ribéry en el 59’ y Kross por Robben en el 69’. Pero el daño ya estaba hecho. La imagen del Bayern quedó tocada, pese a las últimas ocasiones de los bávaros en los minutos finales, en donde, incluso, anularon un gol a Mandzukic.
El león no parece tan fiero como lo pintaban. Al menos esa es la impresión que puede sacar Ancelotti después de ver el Bayern-Borussia. Klopp mostró el camino táctico en el Allianz Arena ante un Bayern que salió prácticamente con todo. Guardiola sólo dejó en el banquillo a Kross, Müller y Boateng. Sorprendió más el técnico del Borussia sentando a Lewandowski ante su futuro equipo. El Borussia presionó la salida de balón a la altura de los centrales, Javi Martínez y Alaba, y el Bayern lo pasó mal. Muy mal. Guardiola ganó en la posesión (72%), pero salió goleado en el Allianz Arena, con Uli Hoeness y Jupp Heynckes en el palco. Un 0-3 sonrojante para el todopoderoso campeón alemán. El técnico español jamás perdió un partido como local por más de dos goles de diferencia hasta que apareció su particular bestia negra, Jurgen Klopp, que con sus dos últimos partidos puede sacar una colección de dvd sobre nociones tácticas. Por otra parte, el Bayern encadena dos partidos consecutivos sin marcar en la Bundesliga pese a la pólvora que tiene arriba.
Pese a que los bávaros se proclamaron campeones de la Bundesliga a falta de siete jornadas del final, la imagen de los pupilos fue cuanto menos pobre. Al Bayern le costó sacar el balón jugado, como le gusta a Guardiola, con la pareja de mediocentros Lahm y Schweinsteiger. El 4-2-3-1 no funcionó ante un equipo que puso en apuros al Real Madrid el pasado martes en el Signal Iduna Park. Cierto es que el Borussia se juega la segunda plaza con su máximo rival, el Schalke 04, pero esta alineación del Bayern puede ser lo más parecido a lo que se vea el miércoles 23 de abril en el Santiago Bernabéu. El equipo de Guardiola afronta las semifinales de Copa este miércoles ante el Kaiserlautern, un equipo que milita en Segunda División, y el sábado 19 jugará contra el Eintracht Braunschweig.
Mkhitaryan acertó en el minuto 19 lo que falló en Dortmund ante el Real Madrid. Un saque de banda que Aubameyang controló de espaldas en el área, cedió atrás para Reus que en velocidad asiste para el futbolista armenio, que batió a Neuer con la izquierda. Poco peligro generó el Bayern con Ribéry y Robben en las bandas. El primer remate del croata Mandzukic llegó en el minuto 42. Un fallo en defensa del Borussia, pero un disparo inocente para las manos seguras de Weindefeller.
En la segunda mitad, con el joven Raeder bajo palos, el Borussia se vino más arriba todavía. En el minuto 48, Aubameyang asistió a Reus en una contra iniciada una vez más por Mkhitaryan. Los borusser eran los dueños y señores del Allianz Arena. Y en el 55’ la estocada final. Hofmann le ganó la espalda a Dante y marcó fácilmente ante el debutante Raeder. Fue entonces cuando intentó reaccionar Guardiola. Se cargó las bandas. Entró Müller por Ribéry en el 59’ y Kross por Robben en el 69’. Pero el daño ya estaba hecho. La imagen del Bayern quedó tocada, pese a las últimas ocasiones de los bávaros en los minutos finales, en donde, incluso, anularon un gol a Mandzukic.
