La deportista brasileña Keila Costa, apuesta a superar su hazaña inexistente en el triple salto
La brasileña Keila Costa, es la única atleta sudamericana que ha logrado una marca por encima de 15 metros en triple salto, pero habla poco de eso porque para los libros del atletismo esa proeza no sucedió.
“Fue en el 2007, el viento era más de dos metros por segundo a mi favor y no me reconocieron el salto; ahora trabajo para volver a saltar sobre 15 con el aire adecuado y ojalá se me de en la final de los Juegos Olímpicos de Río”, aseguró a Efe.
Costa ganó el triple salto y el de longitud en los Juegos Sudamericanos de Santiago de Chile que concluirán mañana, lo cual considera un buen comienzo de una temporada que reanudará el próximo 18 de mayo en Shanghái la segunda parada de la Liga de Diamantes.
“En Santiago he registrado menos de lo esperado, pero le di dos medallas a mi país; ahora trabajaré en Brasil para llegar en mi mejor forma a la Liga de Diamantes y pronto poder aspirar a mejorar mi mejor registro en triple, la prueba en la que estoy enfocada”.
“La idea es mantenerme entre las cinco mejores y superar ese 14.58, en el próximo año espero ser protagonista en los Campeonatos Mundiales de China y en el 2016 buscare una medalla, Río será una experiencia hermosa porque el público saltará conmigo“, señala.
Aunque es de risa fácil, en su equipo, Keila tiene fama de ser disciplinada y su exnovio, el campeón olímpico de salto de longitud Irving Saladino, una de las personas que mejor la conoce, asegura que la chica tiene condiciones para saltar 15 metros. “Es tremenda saltadora, ya saltó una vez por encima de 15, y tiene con qué para volver a hacerlo”, asegura el panameño.
Por lo pronto la deportista ha empezado el año con el viento a favor al ganar dos oros en Santiago. “Nunca miro la marca de mis rivales, me gusta observar la mía y concentrarme en mejorarla, si lo hago le ganaré a ellas”, dice al resumir su filosofía de vida.
Saltaba por diversión y nació una gran deportista
Oriunda de Recife, nordeste de Brasil, Keila comenzó a saltar por diversión a los nueve años y a los 14 pensó en convertirse en profesional y un día competir en los Juegos Olímpicos. “He logrado el deseo tres veces, en Atenas, Pekín y Londres, y confío que la cuarta sea la mejor con una medalla”, observa.
A los 31 años, Keila cree que ganar medalla olímpica es posible y para demostrarlo está el ránking mundial del año pasado en el que terminó quinta con 14.58 metros, su mejor marca.
