Nueva York se ve afectada pero no paralizada por la tormenta de nieve
Nueva York, EFE
La ciudad de Nueva York amaneció hoy afectada pero no paralizada por la tormenta de nieve que afecta a la región noreste de Estados Unidos y que ha causado considerables complicaciones.
La ciudad de Nueva York amaneció hoy afectada pero no paralizada por la tormenta de nieve que afecta a la región noreste de Estados Unidos y que ha causado considerables complicaciones.
En una ciudad de tanta extensión, las acumulaciones de nieve han sido muy desiguales, y oscilan entre los 7,5 centímetros en el aeropuerto Kennedy hasta los 30 en algunas zonas de Queens, Brooklyn o El Bronx, mientras que en Central Park (Manhattan) se midieron 16 centímetros.
Las escuelas públicas y privadas están cerradas, igual que la sede de las Naciones Unidas y los tribunales federales.
La red de transporte público funciona con algunos retrasos, pero sin graves trastornos, mientras que la circulación de vehículos se hace con lentitud y hay mucho menos tráfico en las calles.
Sin embargo, buena parte de la actividad privada se mantiene y la mayoría de establecimientos privados de Manhattan están abiertos, igual que los mercados financieros y las sedes de los grandes bancos y corporaciones.
El nuevo alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, ha sido visto apaleando la nieve acumulada a la puerta de su vivienda de Park Slope (Brooklyn), antes de dirigirse al Ayuntamiento para supervisar las operaciones de los trabajadores municipales.
“Los neoyorquinos deben ser extremadamente cuidadosos al salir“, dijo De Blasio en una declaración, en la que añadió que “lo mejor que se puede hacer es estar fuera de las carreteras para que podamos limpiarlas lo antes posible y atender a los vecinos más ancianos o vulnerables”.
Las acumulaciones de nieve han sido mayores en las afueras de la ciudad, y han superado los 30 centímetros en Long Island o zonas de la vecina Nueva Jersey, por ejemplo.
El aeropuerto Kennedy está cerrado de momento para retirar la nieve, aunque se espera reabrirlo pronto, mientras que los de Laguardia y Newark siguen abiertos, si bien los vuelos sufren retrasos y algunas cancelaciones.
El próximo problema es la ola de frío muy intenso que, procedente del Polo Norte, afectará a la región entre hoy y mañana, con temperaturas de mínimas -13 grados centígrados que, debido al viento, causan una sensación de -26 grados.
Las escuelas públicas y privadas están cerradas, igual que la sede de las Naciones Unidas y los tribunales federales.
La red de transporte público funciona con algunos retrasos, pero sin graves trastornos, mientras que la circulación de vehículos se hace con lentitud y hay mucho menos tráfico en las calles.
Sin embargo, buena parte de la actividad privada se mantiene y la mayoría de establecimientos privados de Manhattan están abiertos, igual que los mercados financieros y las sedes de los grandes bancos y corporaciones.
El nuevo alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, ha sido visto apaleando la nieve acumulada a la puerta de su vivienda de Park Slope (Brooklyn), antes de dirigirse al Ayuntamiento para supervisar las operaciones de los trabajadores municipales.
“Los neoyorquinos deben ser extremadamente cuidadosos al salir“, dijo De Blasio en una declaración, en la que añadió que “lo mejor que se puede hacer es estar fuera de las carreteras para que podamos limpiarlas lo antes posible y atender a los vecinos más ancianos o vulnerables”.
Las acumulaciones de nieve han sido mayores en las afueras de la ciudad, y han superado los 30 centímetros en Long Island o zonas de la vecina Nueva Jersey, por ejemplo.
El aeropuerto Kennedy está cerrado de momento para retirar la nieve, aunque se espera reabrirlo pronto, mientras que los de Laguardia y Newark siguen abiertos, si bien los vuelos sufren retrasos y algunas cancelaciones.
El próximo problema es la ola de frío muy intenso que, procedente del Polo Norte, afectará a la región entre hoy y mañana, con temperaturas de mínimas -13 grados centígrados que, debido al viento, causan una sensación de -26 grados.