BCB: noviembre y diciembre ‘históricamente’ no son los meses más inflacionarios del año
La Paz, Abi‘Históricamente’ los niveles de inflación registrados entre noviembre y diciembre ‘no son los más altos del año’, como afirman algunos analistas económicos, en alusión a los efectos que puede causar el pago del segundo aguinaldo para trabajadores públicos y privados, instruido a partir de 2013, informaron el lunes en el Banco Central de Bolivia (BCB).
Según datos difundidos por el BCB, el promedio de la tasa de inflación registrado entre noviembre y diciembre de los últimos 20 años, fue de 0,49% y 0,43%, respectivamente.
‘Esto se debe a que a fines de cada gestión se presenta una mayor producción y oferta de bienes y servicios que, generalmente, responde al incremento de la demanda de fin de año. En este sentido, el factor estacional no será determinante para la inflación’, remarcó el BCB.
Asimismo, el ente emisor ratificó que se preparó con anticipación a la economía boliviana, para instruir el pago de un doble aguinaldo y recibir un excedente adicional de liquidez, sin tener fuertes impactos inflacionarios ya que se realizaron importantes retiros de liquidez durante todo el año.
En junio, el BCB recordó que se creó un nuevo instrumento mediante el que se colocaron certificados de depósito y se logró retirar del mercado abierto, alrededor de 1.780 millones de bolivianos.
Además, se incrementó progresivamente la oferta de títulos durante este año y actualmente alcanza 900 millones de bolivianos en cada subasta pública semanal.
En relación a la presunción de que el segundo aguinaldo irá al consumo, el BCB aclaró que el segundo aguinaldo es un ingreso extraordinario y ‘es de esperar que gran parte de éste se destine al ahorro y, en este caso, no tendrá ningún impacto inflacionario’.
El BCB ratificó el compromiso de ejecutar todas las acciones adicionales necesarias, en coordinación con el Órgano Ejecutivo, para prevenir incrementos inflacionarios.
El 22 de noviembre, el presidente del BCB, Marcelo Zabalaga, anunció la oferta de nuevos certificados de depósito por 2.000 millones de bolivianos y la colocación de ‘bonos navideños’ a una tasa de interés anual del 6%, con el propósito de retirar el exceso de liquidez del mercado abierto y prevenir la presión inflacionaria de fin de año.
