Washington se toma en serio las "preocupaciones" por el supuesto espionaje
Washington, EP
La Casa Blanca ha dicho que se toma "muy en serio" las "preocupaciones" surgidas en algunos países aliados por las revelaciones sobre el supuesto espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) y, sin entrar a valorar casos concretos, ha subrayado que el Gobierno resolverá todas las dudas por la "vía diplomática".
El portavoz de la Presidencia norteamericana, Jay Carney, ha vuelto a defender este lunes en rueda de prensa los programas de vigilancia de las agencias norteamericanas porque, según ha dicho, "salvan vidas" y permite "proteger a Estados Unidos y sus aliados". Asimismo, ha insistido en que son "legales".
Pese a las insistentes preguntas de los periodistas sobre el alcance, la conveniencia y las repercusiones de los programas de vigilancia de la NSA, en particular en relación al supuesto espionaje a líderes extranjeros, Carney se ha limitado a apuntar que no comentaría "casos específicos".
Sin embargo, ha admitido que Washington debe encontrar un "equilibrio" entre la seguridad y el derecho a la privacidad. El presidente estadounidense, Barack Obama, ha ordenado una "revisión" de estos programas que estará concluida a finales de año, según Carney, que ha adelantado que se hará pública "tanta información como sea posible" en aras de la "transparencia".
El portavoz presidencial ha asegurado que Washington se toma "muy en serio" las "preocupaciones" de otros países en relación a las informaciones aparecidas en prensa en los últimos días y ha abogado por mantener abierto el diálogo para aclarar cualquier duda.
En este sentido, ha recordado que Obama ya habló la semana pasada con la canciller alemana, Angela Merkel, tras la publicación sobre el supuesto pinchazo de su teléfono. Carney ha subrayado la necesidad de resolver todas las controversias por la "vía diplomática".
La Casa Blanca ha dicho que se toma "muy en serio" las "preocupaciones" surgidas en algunos países aliados por las revelaciones sobre el supuesto espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) y, sin entrar a valorar casos concretos, ha subrayado que el Gobierno resolverá todas las dudas por la "vía diplomática".
El portavoz de la Presidencia norteamericana, Jay Carney, ha vuelto a defender este lunes en rueda de prensa los programas de vigilancia de las agencias norteamericanas porque, según ha dicho, "salvan vidas" y permite "proteger a Estados Unidos y sus aliados". Asimismo, ha insistido en que son "legales".
Pese a las insistentes preguntas de los periodistas sobre el alcance, la conveniencia y las repercusiones de los programas de vigilancia de la NSA, en particular en relación al supuesto espionaje a líderes extranjeros, Carney se ha limitado a apuntar que no comentaría "casos específicos".
Sin embargo, ha admitido que Washington debe encontrar un "equilibrio" entre la seguridad y el derecho a la privacidad. El presidente estadounidense, Barack Obama, ha ordenado una "revisión" de estos programas que estará concluida a finales de año, según Carney, que ha adelantado que se hará pública "tanta información como sea posible" en aras de la "transparencia".
El portavoz presidencial ha asegurado que Washington se toma "muy en serio" las "preocupaciones" de otros países en relación a las informaciones aparecidas en prensa en los últimos días y ha abogado por mantener abierto el diálogo para aclarar cualquier duda.
En este sentido, ha recordado que Obama ya habló la semana pasada con la canciller alemana, Angela Merkel, tras la publicación sobre el supuesto pinchazo de su teléfono. Carney ha subrayado la necesidad de resolver todas las controversias por la "vía diplomática".