Un tsunami golpea las costas de Fukushima sin causar daños
El origen es un seísmo de magnitud 7,1 frente a la prefectura de Fukushima, donde otro terremoto, de magnitud 9, provocó una fuga radiactiva en 2011. Evacuada la central nuclear
Madrid, Agencias
Un tsunami de baja intensidad ha llegado a las costas del noreste de Japón a las 2.51 de la mañana (19.51 hora peninsular española), según ha informado la agencia meteorológica nipona. Las primeras previsiones, que estimaban que la ola alcanzaría un metro de altura, no se han cumplido. El máximo registrado han sido 55 centímetros, pero la Agencia Meteorológica Japonesa (AMJ) ha alertado que los tsunamis llegan a su máximo horas después del seísmo, informa José Reinoso. A pesar de eso, la alerta amarilla se ha levantado.
El origen de la alerta fue el terremoto de magnitud 7,1 registrado a las 2.10 de la mañana del sábado hora local (19.10 del viernes hora peninsular española), según datos de la Agencia Meteorológica Japonesa. El seísmo se produjo a 320 kilómetros al sudoeste de la costa de la prefectura de Miyagi, frente a la costa este de la isla japonesa de Honshu.
El seísmo hizo saltar la alerta al haberse producido en la misma zona que el de magnitud 9 que, el 11 de marzo de 2011, provocó destrozos en la mayor parte de la región de Tohoku, al norte de Honshu, y que dio origen a ola gigante que, en ciertos puntos, llegó a los 21 metros de altura. Más de 15.000 personas perdieron la vida.
La eléctrica Tepco, propietaria de la central nuclear de Fukushima 1, situada junto a la costa, ha afirmado que el seísmo no ha causado daños, aunque ha pedido que los trabajadores se retiren del recinto como medida de protección. En 2011, el tsunami llegó a los 15 metros de altura en la zona de la central y sobrepasó todos los diques de protección. La inundación provocó daños en el recinto. Las subsiguientes fugas radiactivas persisten hasta hoy. Tepco afirma que el seísmo no ha provocado cambios en las mediciones de radioactividad.
En tierra, la Agencia Meteorológica japonesa afirma que el seísmo ha causado "notables sacudidas" en la superficie, que pueden causar daños a los edificios no preparados para los terremotos, en especial a los aún dañados por el de 2011. Según la agencia, las prefecturas afectadas son Fukushima, Miyagi y Tochigi.
Madrid, Agencias
Un tsunami de baja intensidad ha llegado a las costas del noreste de Japón a las 2.51 de la mañana (19.51 hora peninsular española), según ha informado la agencia meteorológica nipona. Las primeras previsiones, que estimaban que la ola alcanzaría un metro de altura, no se han cumplido. El máximo registrado han sido 55 centímetros, pero la Agencia Meteorológica Japonesa (AMJ) ha alertado que los tsunamis llegan a su máximo horas después del seísmo, informa José Reinoso. A pesar de eso, la alerta amarilla se ha levantado.
El origen de la alerta fue el terremoto de magnitud 7,1 registrado a las 2.10 de la mañana del sábado hora local (19.10 del viernes hora peninsular española), según datos de la Agencia Meteorológica Japonesa. El seísmo se produjo a 320 kilómetros al sudoeste de la costa de la prefectura de Miyagi, frente a la costa este de la isla japonesa de Honshu.
El seísmo hizo saltar la alerta al haberse producido en la misma zona que el de magnitud 9 que, el 11 de marzo de 2011, provocó destrozos en la mayor parte de la región de Tohoku, al norte de Honshu, y que dio origen a ola gigante que, en ciertos puntos, llegó a los 21 metros de altura. Más de 15.000 personas perdieron la vida.
La eléctrica Tepco, propietaria de la central nuclear de Fukushima 1, situada junto a la costa, ha afirmado que el seísmo no ha causado daños, aunque ha pedido que los trabajadores se retiren del recinto como medida de protección. En 2011, el tsunami llegó a los 15 metros de altura en la zona de la central y sobrepasó todos los diques de protección. La inundación provocó daños en el recinto. Las subsiguientes fugas radiactivas persisten hasta hoy. Tepco afirma que el seísmo no ha provocado cambios en las mediciones de radioactividad.
En tierra, la Agencia Meteorológica japonesa afirma que el seísmo ha causado "notables sacudidas" en la superficie, que pueden causar daños a los edificios no preparados para los terremotos, en especial a los aún dañados por el de 2011. Según la agencia, las prefecturas afectadas son Fukushima, Miyagi y Tochigi.