Los republicanos quieren aplazar la entrada en vigor de las sanciones para quienes no contraten seguros médicos
Washington, EP
Los líderes del Partido Republicano en el Congreso de Estados Unidos se han comprometido a intentar retrasar la entrada en vigor de las sanciones para todos aquellos que el 1 de enero de 2014 año no hayan contratado un seguro médico, una de las principales directrices de la reforma sanitaria impulsada por el presidente, Barack Obama.
El conocido como 'mandato individual' establece para los ciudadanos la obligatoriedad de contratar un seguro médico o, de lo contrario, enfrentarse a una multa que aumentará cada año. La sanción pasará del 1 por ciento de los ingresos en 2014 al 2,5 por ciento en 2016.
El líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, Eric Cantor, ha abogado por aplazar la entrada en vigor de esta medida hasta que se resuelvan los problemas con la página web creada para los registros y se aclaren los efectos negativos de la ley.
"El lanzamiento del 'Obamacare' es casi una debacle y los estadounidenses temen ahora por su asistencia sanitaria", ha advertido Cantor, tras una reunión con sus compañeros de partido. "Con tantas preguntas sin resolver y con los problemas surgiendo por todas partes, no tiene sentido imponer ese uno por ciento a la población", ha añadido.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, el también republicano John Boehner, ha dicho que supervisará todos los problemas derivados de la aplicación de la ley, incluido el mal funcionamiento del portal 'Healthcare.gov'.
Boehner ha dicho que lo haría "tanto con el Obamacare como con cuestiones del Departamento de Defensa" y ha apuntado que, en el caso de la reforma sanitaria, el Gobierno federal "tiene mucho por lo que rendir cuentas".
Sin embargo, la líder del Partido Demócrata en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, ha afirmado que no hace falta variar el calendario de entrada en vigor de la reforma sanitaria y, en este sentido, se ha mostrado "optimista" y confía en que todo "seguirá según lo previsto".
El Departamento de Sanidad norteamericano se ha comprometido a comparecer ante los medios diariamente a partir de este jueves para informar de la evolución de todas estas complicaciones. Los esfuerzos del Gobierno para calmar las dudas se extienden también a las compañías aseguradoras, con cuyos directivos tienen previsto reunirse este miércoles varios representantes de la Administración Obama.
Los líderes del Partido Republicano en el Congreso de Estados Unidos se han comprometido a intentar retrasar la entrada en vigor de las sanciones para todos aquellos que el 1 de enero de 2014 año no hayan contratado un seguro médico, una de las principales directrices de la reforma sanitaria impulsada por el presidente, Barack Obama.
El conocido como 'mandato individual' establece para los ciudadanos la obligatoriedad de contratar un seguro médico o, de lo contrario, enfrentarse a una multa que aumentará cada año. La sanción pasará del 1 por ciento de los ingresos en 2014 al 2,5 por ciento en 2016.
El líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, Eric Cantor, ha abogado por aplazar la entrada en vigor de esta medida hasta que se resuelvan los problemas con la página web creada para los registros y se aclaren los efectos negativos de la ley.
"El lanzamiento del 'Obamacare' es casi una debacle y los estadounidenses temen ahora por su asistencia sanitaria", ha advertido Cantor, tras una reunión con sus compañeros de partido. "Con tantas preguntas sin resolver y con los problemas surgiendo por todas partes, no tiene sentido imponer ese uno por ciento a la población", ha añadido.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, el también republicano John Boehner, ha dicho que supervisará todos los problemas derivados de la aplicación de la ley, incluido el mal funcionamiento del portal 'Healthcare.gov'.
Boehner ha dicho que lo haría "tanto con el Obamacare como con cuestiones del Departamento de Defensa" y ha apuntado que, en el caso de la reforma sanitaria, el Gobierno federal "tiene mucho por lo que rendir cuentas".
Sin embargo, la líder del Partido Demócrata en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, ha afirmado que no hace falta variar el calendario de entrada en vigor de la reforma sanitaria y, en este sentido, se ha mostrado "optimista" y confía en que todo "seguirá según lo previsto".
El Departamento de Sanidad norteamericano se ha comprometido a comparecer ante los medios diariamente a partir de este jueves para informar de la evolución de todas estas complicaciones. Los esfuerzos del Gobierno para calmar las dudas se extienden también a las compañías aseguradoras, con cuyos directivos tienen previsto reunirse este miércoles varios representantes de la Administración Obama.