Los niños sirios comienzan las clases
Miles de escolares sirios han comenzado este domingo las clases del nuevo curso escolar con relativa normalidad después que el acuerdo alcanzado el sábado entre Estados Unidos y Rusia aleje, al menos momentáneamente la posibilidad de un ataque estadounidense que parecía inminente.
En Damasco muchos colegios estaban siendo utilizados para alojar a los militares ante el temor a los bombardeos estadounidenses sobre objetivos militares, pero a primera hora del domingo los soldados se habían marchado. En general en toda la capital se ha intensificado la actividad este domingo ante la sensación de que el ataque anunciado por Washington no se producirá por el momento.
En la Escuela Femenina de Secundaria Satea al Hosari, en el oeste de Damasco, miles de niñas han salido de clase a las 13.00 horas (12.00 hora peninsular española) con sus libros nuevos en bolsas de plástico buscando a sus padres o los autobuses escolares. "Ha sido un verano largo y los niños han pasado mucho tiempo encerrados en casa. Estoy contenta de que salgan de casa y vuelvan a su rutina", ha explicado una madre, Mayse, en declaraciones a un corresponsal de Reuters.
Mayse estaba esperando a su hija a la salida del colegio y cuando llegó, ésta le contó que hay compañeros que se han marchado y otros cuyas familias están barajando esta opción. La posibilidad de un ataque estadounidense ha hecho que se intensifique el tráfico de refugiados sirios hacia Líbano o Irak.
Entre las consecuencias más tangibles de la guerra, el precio de los uniformes escolares, que se ha quintuplicado desde que comenzó la crisis, en marzo de 2011, o la evidente presencia de militares en las zonas más pobladas de Damasco.
