Los euroescépticos ganan fuerza y se convierten en una amenaza para Merkel
Berlín, EP
El apoyo a un nuevo partido euroescéptico alemán ha aumentado sus respaldos hasta alcanzar su récord del cuatro por ciento a pocas semanas de las próximas elecciones en el país, elevando sus posibilidades de obtener escaños en el Parlamento y dificultando cada vez más la formación de otra coalición de centro-derecha liderada por la actual canciller, Angela Merkel.
Según las últimas encuestas de Forsa publicadas por la revista Stern, el nuevo partido, Alternative fuer Deutschland (AFD) --Alternativa para Alemania-- se encontraría a sólo un punto del umbral necesario para entrar en el Parlamento. Algunos expertos aseguran que los resultados de esta encuesta podrían "subestimar" el apoyo a la AFD ya que muchos seguidores podrían no querer admitir su respaldo al partido después de que los medios lo vincularan con la extrema derecha.
Si la AFD alcanza el Parlamento, Merkel podría tener más dificultades para que se obtenga una mayoría de centro-derecha que le permitiera formar una coalición junto al Partido Democrático Liberal (FDP), y aumentaría las probabilidades de formar una "gran coalición" entre los conservadores de la canciller y el Partido Social Demócrata (SPD).
Los partidos euroescépticos han florecido en varios de los países vecinos como en Francia, Austria o Países Bajos, con un discurso de desdén hacia la moneda única y en ocasiones, mezclado con un mensaje contrario a la inmigración. Sin embargo en Alemania, donde el apoyo a los partidos con tendencias xenófobas es bastante bajo debido al legado del nazismo, no ha habido ningún movimiento político convencional que persiguiera la salida del euro hasta la aparición de la AFD a comienzos de este año.
Durante los últimos meses, las encuestas han mostrado un apoyo a este partido de entre el 2 y el 3 por ciento, ya que un periodo de relajación de la crisis en la eurozona consiguió minar el mensaje de la AFD. No obstante, el pasado mes, el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble, dio pasos atrás en este sentido tras asegurar que Grecia, que ya había recibido dos rescates por valor de 240.000 millones de euros, necesitaría un tercer rescate.
Una de las encuestas publicadas esta semana muestra un apoyo generalizado a algunas de las políticas de la AFD, como el rechazo a los rescates y la propuesta de limitar la moneda única a un pequeño grupo de "países más similares" entre sí.
PEQUEÑA VENTAJA
Merkel se mantiene en su popularidad con un amplio espectro de votos a sólo tres semanas de las elecciones. Sin embargo la coalición conservadora-liberal sólo tiene una pequeña ventaja sobre la de la oposición, un 45 por ciento de los votos frente al 43 que obtendrían los socialdemócratas, los 'verdes' y la extrema izquierda. Esa mayoría desaparecería si la AFD alcanzara el 5 por ciento de los votos, y por tanto, el umbral de acceso al Bundestag.
La encuesta de Forsa también muestra que los socialdemócratas tienen un mayor apoyo después de la aparición de su candidato, Peer Steinbrueck, en el único debate televisado de toda la campaña el pasado domingo, quien siguió con su ataque contra Merkel en el Parlamento el lunes.
Steinbrueck, quien entró al Parlamento el martes "confiado y decidido", ha acusado a la canciller de estar "quemando puentes" (de unión) después de que Merkel asegurara que el SPD "no tiene confianza" en Europa. Tanto el PSD como su aliado, Los Verdes, han apoyado a Merkel en el Parlamento en todas las votaciones sobre la crisis del euro desde las medidas del primer rescate a Grecia en mayo de 2010.
La AFD, dirigida por académicos y periodistas euroescépticos, se ha presentado a sí misma como la única alternativa para los electores que no estén de acuerdo con los rescates. Como mayor economía de Europa, Alemania ha suministrado la mayor parte de los préstamos en los rescates de Grecia, Portugal, Irlanda y Chipre.
El apoyo a un nuevo partido euroescéptico alemán ha aumentado sus respaldos hasta alcanzar su récord del cuatro por ciento a pocas semanas de las próximas elecciones en el país, elevando sus posibilidades de obtener escaños en el Parlamento y dificultando cada vez más la formación de otra coalición de centro-derecha liderada por la actual canciller, Angela Merkel.
Según las últimas encuestas de Forsa publicadas por la revista Stern, el nuevo partido, Alternative fuer Deutschland (AFD) --Alternativa para Alemania-- se encontraría a sólo un punto del umbral necesario para entrar en el Parlamento. Algunos expertos aseguran que los resultados de esta encuesta podrían "subestimar" el apoyo a la AFD ya que muchos seguidores podrían no querer admitir su respaldo al partido después de que los medios lo vincularan con la extrema derecha.
Si la AFD alcanza el Parlamento, Merkel podría tener más dificultades para que se obtenga una mayoría de centro-derecha que le permitiera formar una coalición junto al Partido Democrático Liberal (FDP), y aumentaría las probabilidades de formar una "gran coalición" entre los conservadores de la canciller y el Partido Social Demócrata (SPD).
Los partidos euroescépticos han florecido en varios de los países vecinos como en Francia, Austria o Países Bajos, con un discurso de desdén hacia la moneda única y en ocasiones, mezclado con un mensaje contrario a la inmigración. Sin embargo en Alemania, donde el apoyo a los partidos con tendencias xenófobas es bastante bajo debido al legado del nazismo, no ha habido ningún movimiento político convencional que persiguiera la salida del euro hasta la aparición de la AFD a comienzos de este año.
Durante los últimos meses, las encuestas han mostrado un apoyo a este partido de entre el 2 y el 3 por ciento, ya que un periodo de relajación de la crisis en la eurozona consiguió minar el mensaje de la AFD. No obstante, el pasado mes, el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble, dio pasos atrás en este sentido tras asegurar que Grecia, que ya había recibido dos rescates por valor de 240.000 millones de euros, necesitaría un tercer rescate.
Una de las encuestas publicadas esta semana muestra un apoyo generalizado a algunas de las políticas de la AFD, como el rechazo a los rescates y la propuesta de limitar la moneda única a un pequeño grupo de "países más similares" entre sí.
PEQUEÑA VENTAJA
Merkel se mantiene en su popularidad con un amplio espectro de votos a sólo tres semanas de las elecciones. Sin embargo la coalición conservadora-liberal sólo tiene una pequeña ventaja sobre la de la oposición, un 45 por ciento de los votos frente al 43 que obtendrían los socialdemócratas, los 'verdes' y la extrema izquierda. Esa mayoría desaparecería si la AFD alcanzara el 5 por ciento de los votos, y por tanto, el umbral de acceso al Bundestag.
La encuesta de Forsa también muestra que los socialdemócratas tienen un mayor apoyo después de la aparición de su candidato, Peer Steinbrueck, en el único debate televisado de toda la campaña el pasado domingo, quien siguió con su ataque contra Merkel en el Parlamento el lunes.
Steinbrueck, quien entró al Parlamento el martes "confiado y decidido", ha acusado a la canciller de estar "quemando puentes" (de unión) después de que Merkel asegurara que el SPD "no tiene confianza" en Europa. Tanto el PSD como su aliado, Los Verdes, han apoyado a Merkel en el Parlamento en todas las votaciones sobre la crisis del euro desde las medidas del primer rescate a Grecia en mayo de 2010.
La AFD, dirigida por académicos y periodistas euroescépticos, se ha presentado a sí misma como la única alternativa para los electores que no estén de acuerdo con los rescates. Como mayor economía de Europa, Alemania ha suministrado la mayor parte de los préstamos en los rescates de Grecia, Portugal, Irlanda y Chipre.