España, a un paso de estar en Brasil tras ganar en Finlandia con Casillas de titular
Finlandia, EFE
España acaricia el Mundial. Suma 14 puntos, frente a los 11 de Francia tras empatar sin goles en Georgia. A la 'Roja' le quedan 2 partidos -Bielorrusia y Georgia- en casa para sellar su billete al Mundial 2014. Los tres puntos de Finlandia colocan a los campeones del mundo con pie y medio en Brasil.
Por tanto, misión cumplida para España. Y eso que Finlandia salió con mucha casta en el inicio del partido. La banda derecha del desubicado Koke daba los primeros quebraderos a una España que tocaba y tocaba buscando un resquicio en la férrea defensa local. Iniesta lo intentaba con Villa pero los ataque morían sin que los de Del Bosque fueran incisivos e hicieran pupa al rival.
Solo Jordi Alba ofrecía profundidad por los carriles a una España que vio como Casillas sacaba un pie salvador. De nuevo la banda de Koke puso a prueba por primera vez al esta noche portero de la selección. Valdés tenía que esperar su turno desde el banquillo e Íker demostraba que seguía con los reflejos de antaño.
El partido moría en el área finlandesa hasta que Cesc, sublime en este inicio de campaña, se inventó un pase al incansable Jordi Alba que no desaprovechó. Controló con la izquierda y definió por bajo con la derecha para darle a España no solo ventaja, también tranquilidad. La historia no cambiaba pese al gol. Los locales no se volvían locos. Seguían esperando y confiando su suerte al contraataque.
España controlaba el partido sin mayores sobresaltos. Sergio Ramos y Albiol tenían poco trabajo. Villa se mostraba muy activo y de un recorte suyo en banda nació una ocasión clara de ampliar la ventaja de la 'Roja'. Su disparo con la izquierda no vio portería por muy poco. La primera parte culminaba con total dominio de España y la sensación de que Finlandia no tenía argumentos para hacer temer a los nuestros.
Finlandia se crece ante el bajón de España
Los segundos cuarenta y cinco minutos comenzaban con el mismo guión. Toque, toque y más toque ante una Finlandia que se animaba un poco más pero sin la valentía necesaria. Las únicas noticias negativas para España eran el resultado, corto, y la dinámica del choque que invitaba a la relajación. Iniesta y Xavi bajaban un poquito el rendimiento y la 'Roja' bajaba la intensidad.
Del Bosque buscaba más balón y profundidad quitando a Villa para meter a Navas. Cesc pasaba a ser 'falso nueve' y, de repente, España sufría un bajón que dio alas a Finlandia. Un remate de cabeza al lateral de la red y una volea de Ring metían el miedo en el cuerpo al cuadro español. Solo con tener el balón no bastaba ante un rival que, con sus limitaciones, hacía daño con balones largos.
Entraba Negredo por Cesc volviendo Del Bosque a meter un '9' en el campo intentando mandar un mensaje ambicioso a sus jugadores. Con Navas en el campo, el salmantino buscaba un rematador para cerrar el partido. Y la tuvo el 'tiburón de Vallecas'. Xavi se inventó un gran pase para dejar solo al '9' del City que, desequilibrado, no acertó a rematar con claridad. Mäenpää le sacó a España el 0-2 y la sentencia.
Los cambios le funcionan a Del Bosque
Finlandia veía a España 'tocada' e intentaba hacer daño a los nuestros saliendo rápido a la contra. En una de ellas, Pukki tuvo el empate pero su remate murió en las manos de Casillas. Un nuevo aviso finés ante la falta de actividad española. Volvió a recuperar el balón España y ayudó la entrada de Cazorla por Pedro.
En ese dominio, la 'Roja' se reencontró. Otro gran pase de Xavi al desmarque de Navas, que levanta la cabeza y se la pone a su compañero Negredo para que la empuje. La calidad se imponía y el partido quedaba visto para sentencia en el 85. Acertaba Del Bosque con los cambios. Cazorla daba más balón, Navas llegaba por banda y Negredo remataba a los finlandeses.
Victoria incontestable de España, que solo se relajó en un corto tramo de la segunda parte y volvió a recuperar el oficio de siempre. En una gran primera parte de Cesc, fue Xavi en la segunda quien cogió la batuta para dejar a la 'Roja' a un suspiro del Mundial.
