La muerte de un estudiante saca a cientos de griegos a la calle contra la austeridad
Atenas, EP
La muerte de un estudiante griego de 19 años que perdió la vida tras saltar o caerse de un autobús en marcha se ha convertido en un nuevo símbolo de la lucha contra la austeridad en Grecia, donde hay quienes ven en este fallecimiento un ejemplo trágico de la situación económica en la que se encuentran miles de ciudadanos.
El suceso se produjo el martes, cuando el joven, Thanassis Kanaoutis, viajaba en un autobús que circulaba por Atenas. Varios testigos aseguran que Kanaoutis comenzó a discutir con un revisor que supuestamente le pidió el billete.
Según la versión de la compañía de transporte, el joven accionó el freno de mano para saltar del autobús, mientras que el abogado de la familia sostiene que Kanaoutis pudo haber sido empujado durante el altercado. En cualquier caso, el resultado de la trifulca fue que Thanassis Kanaoutis se golpeó la cabeza al caer o saltar del autobús y terminó falleciendo.
El suceso ha vuelto a prender la mecha en un país hastiado por el alto nivel de desempleo y los constantes recortes aprobados por el Gobierno a cambio de la ayuda internacional.
Unas 300 personas, entre ellas representantes de grupos contrarios al rescate económico, han marchado este viernes hasta el cementerio donde se celebraba el funeral. Al término del sepelio, decenas de jóvenes se han enfrentado con los agentes antidisturbios. Los manifestantes han llegado a romper las ventanas de un autobús y han escrito la palabra "asesinos" en el parabrisas.
En la ciudad de Salónica, 13 personas han sido detenidas por realizar pintadas en homenaje al estudiante fallecido.
El principal partido de la oposición, la Coalición de Izquierda Radical (SYRIZA), ha lamentado que Kanaoutis muriese "por no tener un billete de 1,20 euros", lo que en su opinión demuestra "de la forma más trágica" la "situación desesperada" en la que se encuentra gran parte de la sociedad por las políticas de austeridad. SYRIZA ha reclamado la gratuidad del transporte público para desempleados, estudiantes y pensionistas con bajos ingresos.
El viceministro de Transporte, Michalis Papadopoulos, ha anunciado que el Gobierno revisará la forma en que se realizan las comprobaciones de billetes, toda vez que las empresas han incrementado dichos controles este año precisamente con afán recaudatorio.
La muerte de un estudiante griego de 19 años que perdió la vida tras saltar o caerse de un autobús en marcha se ha convertido en un nuevo símbolo de la lucha contra la austeridad en Grecia, donde hay quienes ven en este fallecimiento un ejemplo trágico de la situación económica en la que se encuentran miles de ciudadanos.
El suceso se produjo el martes, cuando el joven, Thanassis Kanaoutis, viajaba en un autobús que circulaba por Atenas. Varios testigos aseguran que Kanaoutis comenzó a discutir con un revisor que supuestamente le pidió el billete.
Según la versión de la compañía de transporte, el joven accionó el freno de mano para saltar del autobús, mientras que el abogado de la familia sostiene que Kanaoutis pudo haber sido empujado durante el altercado. En cualquier caso, el resultado de la trifulca fue que Thanassis Kanaoutis se golpeó la cabeza al caer o saltar del autobús y terminó falleciendo.
El suceso ha vuelto a prender la mecha en un país hastiado por el alto nivel de desempleo y los constantes recortes aprobados por el Gobierno a cambio de la ayuda internacional.
Unas 300 personas, entre ellas representantes de grupos contrarios al rescate económico, han marchado este viernes hasta el cementerio donde se celebraba el funeral. Al término del sepelio, decenas de jóvenes se han enfrentado con los agentes antidisturbios. Los manifestantes han llegado a romper las ventanas de un autobús y han escrito la palabra "asesinos" en el parabrisas.
En la ciudad de Salónica, 13 personas han sido detenidas por realizar pintadas en homenaje al estudiante fallecido.
El principal partido de la oposición, la Coalición de Izquierda Radical (SYRIZA), ha lamentado que Kanaoutis muriese "por no tener un billete de 1,20 euros", lo que en su opinión demuestra "de la forma más trágica" la "situación desesperada" en la que se encuentra gran parte de la sociedad por las políticas de austeridad. SYRIZA ha reclamado la gratuidad del transporte público para desempleados, estudiantes y pensionistas con bajos ingresos.
El viceministro de Transporte, Michalis Papadopoulos, ha anunciado que el Gobierno revisará la forma en que se realizan las comprobaciones de billetes, toda vez que las empresas han incrementado dichos controles este año precisamente con afán recaudatorio.
