Nigeria pide apoyo a Níger en su ofensiva contra los insurgentes islamistas
Niamey, EP
El Gobierno de Nigeria ha pedido apoyo al Ejecutivo de Níger en la ofensiva militar que desarrolla contra los insurgentes islamistas asentados en la zona semidesértica del norte del país que marca la frontera con el territorio nigerino.
El Gobierno nigeriano declaró la semana pasada el estado de emergencia en los estados de Borno, Yobe y Adamawa, situados en el norte del país, antes de iniciar su ofensiva contra los milicianos de la secta islamista Boko Haram.
El secretario de Estado de Asuntos Exteriores nigeriano, Nurudeen Muhammed, entregó el lunes a última hora de la tarde una petición al presidente del país, Goodluck Jonathan, para que solicite el apoyo de su homólogo nigerino, Mahamadu Issoufou, en la ofensiva contra los milicianos islamistas situados en la frontera.
"Actualmente tenemos operaciones militares en tres estados federales nigerianos para combatir el terrorismo y nos gustaría tener el apoyo de Níger en nuestra lucha común contra estos terroristas", ha explicado Muhammed, en declaraciones a la cadena de televisión estatal.
Fuentes militares han indicado que las Fuerzas Armadas nigerianas están encontrando una fuerte resistencia por parte de los islamistas emplazados en la zona fronteriza del norte del país, donde se aprovechan de rutas transfronterizas.
Nigeria y Níger firmaron un acuerdo bilateral de Defensa en octubre de 2012, un pacto que incluye el intercambio de información de Inteligencia sobre grupos islamistas y el desarrollo de maniobras militares conjuntas. Este acuerdo establece que un país no puede negarse a prestar ayuda militar al otro cuando se lo solicite.
Estos dos países africanos comparten una frontera de más de 1.500 kilómetros de extensión. Los combates en Nigeria han llevado a más de un millar de nigerianos a cruzar la frontera con destino a Níger, según las estimaciones de Naciones Unidas.
Militares de Níger y de Chad participaron el pasado mes de abril con el Ejército nigeriano en una operación conjunta contra milicianos de Boko Haram en Baga, una región pesquera a orillas del lago Chad, situada en el noreste de Nigeria.
Un portavoz de las Fuerzas Armadas nigerianas ha negado que la ofensiva contra Boko Haram haya supuesto el regreso de 1.200 militares nigerianos del contingente desplegado en Mali para luchar contra los milicianos islamistas en el norte de ese país.
"Los recursos humanos y materiales de las Fuerzas Armadas están siendo meticulosamente desplegados y son muy capaces de cumplir sus misiones internas y externas", ha afirmado en un comunicado el portavoz del Ministerio de Defensa nigeriano, el general de Brigada Chris Olukolade. "La rotación programada de las tropas en sus diferentes misiones continuará", ha añadido.
El Gobierno de Nigeria ha pedido apoyo al Ejecutivo de Níger en la ofensiva militar que desarrolla contra los insurgentes islamistas asentados en la zona semidesértica del norte del país que marca la frontera con el territorio nigerino.
El Gobierno nigeriano declaró la semana pasada el estado de emergencia en los estados de Borno, Yobe y Adamawa, situados en el norte del país, antes de iniciar su ofensiva contra los milicianos de la secta islamista Boko Haram.
El secretario de Estado de Asuntos Exteriores nigeriano, Nurudeen Muhammed, entregó el lunes a última hora de la tarde una petición al presidente del país, Goodluck Jonathan, para que solicite el apoyo de su homólogo nigerino, Mahamadu Issoufou, en la ofensiva contra los milicianos islamistas situados en la frontera.
"Actualmente tenemos operaciones militares en tres estados federales nigerianos para combatir el terrorismo y nos gustaría tener el apoyo de Níger en nuestra lucha común contra estos terroristas", ha explicado Muhammed, en declaraciones a la cadena de televisión estatal.
Fuentes militares han indicado que las Fuerzas Armadas nigerianas están encontrando una fuerte resistencia por parte de los islamistas emplazados en la zona fronteriza del norte del país, donde se aprovechan de rutas transfronterizas.
Nigeria y Níger firmaron un acuerdo bilateral de Defensa en octubre de 2012, un pacto que incluye el intercambio de información de Inteligencia sobre grupos islamistas y el desarrollo de maniobras militares conjuntas. Este acuerdo establece que un país no puede negarse a prestar ayuda militar al otro cuando se lo solicite.
Estos dos países africanos comparten una frontera de más de 1.500 kilómetros de extensión. Los combates en Nigeria han llevado a más de un millar de nigerianos a cruzar la frontera con destino a Níger, según las estimaciones de Naciones Unidas.
Militares de Níger y de Chad participaron el pasado mes de abril con el Ejército nigeriano en una operación conjunta contra milicianos de Boko Haram en Baga, una región pesquera a orillas del lago Chad, situada en el noreste de Nigeria.
Un portavoz de las Fuerzas Armadas nigerianas ha negado que la ofensiva contra Boko Haram haya supuesto el regreso de 1.200 militares nigerianos del contingente desplegado en Mali para luchar contra los milicianos islamistas en el norte de ese país.
"Los recursos humanos y materiales de las Fuerzas Armadas están siendo meticulosamente desplegados y son muy capaces de cumplir sus misiones internas y externas", ha afirmado en un comunicado el portavoz del Ministerio de Defensa nigeriano, el general de Brigada Chris Olukolade. "La rotación programada de las tropas en sus diferentes misiones continuará", ha añadido.