Avión Solar impone nuevo récord en travesía por EE UU: recorrió 1.541 kilómetros
Los Angeles, AFP
El primer avión tripulado que puede volar de día y de noche exclusivamente con energía solar impuso este jueves un nuevo récord cuando completó la segunda etapa de su travesía por Estados Unidos.
El Solar Impulse, ideado y comandado por dos pilotos suizos, busca sentar un ejemplo de lo que puede alcanzarse sin combustibles fósiles, para lo cual se ha impuesto un objetivo de realizar un vuelo alrededor del mundo en 2015.
El revolucionario aparato aterrizó en el aeropuerto Dallas-Fort Worth en Texas a las 01H08 locales (06H08 GMT), luego de un vuelo de 18 horas y 21 minutos desde Phoenix, Arizona, una distancia de 1.541 kilómetros, anunciaron los organizadores en un comunicado.
“Esta etapa fue particularmente complicada a causa de los fuertes vientos durante el aterrizaje. También fue el vuelo más largo, en términos de distancia, jamás realizado por un avión solar”, indicó el piloto André Borschberg.
“Hay que saber que el piloto necesita estar despierto por más de 20 horas, sin recurrir a ningún tipo de piloto automático”, dijo Borschberg, quien detenta la marca del vuelo más prolongado con energía solar: 26 horas.
El anterior récord de distancia había sido alcanzado por el Solar Impulse hace un año, cuando completó el recorrido de 1.116 kilómetros entre Suiza y España.
La primera etapa de la travesía norteamericana de la aeronave tuvo lugar el 3 de mayo, cuando el piloto Bertrand Piccard condujo al Solar Impulse desde San Francisco, California, hasta Phoenix.
En esa primera parte, el avión, de cuerpo delgado y enormes alas donde reposan los cuatro motores eléctricos, voló silenciosamente a una velocidad promedio de 49 kilómetros por hora.
La energía provista por 12.000 células solares da vida a los propulsores del aparato.
El monoplaza de 1,6 toneladas de fibra de carbono puede volar de noche, elevándose a una altura de 8.230 metros, para luego planear suavemente en dirección descendente, casi sin usar energía, hasta que el sol sale y recarga las células.
Después de Dallas, Texas, el avión solar viajará a Saint Louis (Misuri). Luego se dirigirá al aeropuerto Dulles, cerca de la capital, Washington, a mediados de junio, y finalmente, llegará al aeropuerto Kennedy de Nueva York en julio.
El dispositivo podría técnicamente hacer el vuelo directo, pero las autoridades lo prohíben porque sólo hay lugar para un piloto, limitado a volar hasta un máximo de 24 horas.
El avión solar estará permanecerá varios días en cada escala para permitir que los curiosos lo vean y hablen con los pilotos.
El primer avión tripulado que puede volar de día y de noche exclusivamente con energía solar impuso este jueves un nuevo récord cuando completó la segunda etapa de su travesía por Estados Unidos.
El Solar Impulse, ideado y comandado por dos pilotos suizos, busca sentar un ejemplo de lo que puede alcanzarse sin combustibles fósiles, para lo cual se ha impuesto un objetivo de realizar un vuelo alrededor del mundo en 2015.
El revolucionario aparato aterrizó en el aeropuerto Dallas-Fort Worth en Texas a las 01H08 locales (06H08 GMT), luego de un vuelo de 18 horas y 21 minutos desde Phoenix, Arizona, una distancia de 1.541 kilómetros, anunciaron los organizadores en un comunicado.
“Esta etapa fue particularmente complicada a causa de los fuertes vientos durante el aterrizaje. También fue el vuelo más largo, en términos de distancia, jamás realizado por un avión solar”, indicó el piloto André Borschberg.
“Hay que saber que el piloto necesita estar despierto por más de 20 horas, sin recurrir a ningún tipo de piloto automático”, dijo Borschberg, quien detenta la marca del vuelo más prolongado con energía solar: 26 horas.
El anterior récord de distancia había sido alcanzado por el Solar Impulse hace un año, cuando completó el recorrido de 1.116 kilómetros entre Suiza y España.
La primera etapa de la travesía norteamericana de la aeronave tuvo lugar el 3 de mayo, cuando el piloto Bertrand Piccard condujo al Solar Impulse desde San Francisco, California, hasta Phoenix.
En esa primera parte, el avión, de cuerpo delgado y enormes alas donde reposan los cuatro motores eléctricos, voló silenciosamente a una velocidad promedio de 49 kilómetros por hora.
La energía provista por 12.000 células solares da vida a los propulsores del aparato.
El monoplaza de 1,6 toneladas de fibra de carbono puede volar de noche, elevándose a una altura de 8.230 metros, para luego planear suavemente en dirección descendente, casi sin usar energía, hasta que el sol sale y recarga las células.
Después de Dallas, Texas, el avión solar viajará a Saint Louis (Misuri). Luego se dirigirá al aeropuerto Dulles, cerca de la capital, Washington, a mediados de junio, y finalmente, llegará al aeropuerto Kennedy de Nueva York en julio.
El dispositivo podría técnicamente hacer el vuelo directo, pero las autoridades lo prohíben porque sólo hay lugar para un piloto, limitado a volar hasta un máximo de 24 horas.
El avión solar estará permanecerá varios días en cada escala para permitir que los curiosos lo vean y hablen con los pilotos.