Seis dirigentes definen la suerte del fútbol boliviano
En el fútbol boliviano hay 12 equipos en la Liga Profesional, millones de hinchas y seis dirigentes que gobiernan o definen el destino del balompié nacional. ¿Quiénes? Carlos Chávez, presidente de la Federación Boliviana de Fútbol; Mauricio Méndez, titular de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano; Guido Loayza, presidente de Bolívar; KurtReintsch, mandamás de The Strongest; y Miguel Antelo, presidente de Oriente Petrolero son los más influyentes. A esta lista se debe agregar a Marcelo Claure, que no es reconocido como dirigente del fútbol nacional, pero cuyas decisiones aparecen en el tapete de las discusiones vía Bolívar.
Según consultas realizadas por Erbol Deportes a jugadores y dirigentes, también está Alberto Lozada, el hasta hace poco gerente de la Federación Boliviana de Fútbol y ahora designado como Secretario Ejecutivo.
Carlos Chávez es economista de profesión, empresario y su primer cargo importante fue presidente de Oriente Petrolero, club que lo llevó a ser titular de la Federación Boliviana de Fútbol.
“No creo que sea un hombre de poder, influyente sí”, le dijo a Erbol Digital al ser consultado acerca del tema.
Mauricio Méndez es economista de profesión y ejerce también el periodismo, principalmente en radio y televisión; actualmente es presentador del programa “Que no me Pierda” de la Red Uno, en la ciudad de Cochabamba.
Méndez fue presidente de Wilstermann y de esa forma llegó a ser presidente liguero.
Guido Loayza es ingeniero de profesión y también fue un activo político de la desaparecida Acción Democrática Nacionalista, llegando a ser senador en una oportunidad. Prefirió no referirse al tema.
KurtReintsch es empresario y está en el fútbol como dirigente desde hace tres años y la mayor parte del tiempo radica en la ciudad de Santa Cruz. En uno de sus viajes a la ciudad de La Paz, en ocasión del partido The Strongest- Atlético Mineiro, por la Copa Libertadores, sostuvo que se considera "un hombre influyente" en el fútbol.
Miguel Antelo es empresario y ex jugador de Oriente Petrolero y las selecciones nacionales, se destacó como marcador central en la década del setenta del siglo pasado. Sin duda, uno de los dirigentes de mayor influencia en el balompié nacional.
En el curso de los últimos años hizo su aparición en el fútbol el empresario paceño Marcelo Claure, quien fue en su momento dirigente de la asociación y federación de judo.
El millonario empresario, cuya fortuna se menciona está alrededor de los mil doscientos millones de dólares, no tiene una vinculación directa con el fútbol boliviano, pero sus decisiones llegan mediante el Club Bolívar.
Alberto Lozada es economista de profesión y está vinculado al más popular de los deportes desde su cargo inicial de gerente de la Federación Boliviana de Fútbol. Este año pasó a ser Secretario Ejecutivo.
Lozada considera que los hombres más influyentes del fútbol boliviano son los dirigentes de la Liga y de las asociaciones.
“Ellos son los que toman las determinaciones en el fútbol. Son quienes arriesgan su patrimonio y por lo general no reciben nada”, mencionó Lozada al referirse al tema.
El fútbol es un poder en sí mismo, eso está a claro para todos y en algunos casos sirve para hacer negocios, política o volverse popular.
El poder en el fútbol mundial
Dos años después de la realización del campeonato del mundo cumplido en Francia en 1998, David Yallop, periodista e investigador inglés, sacó a la luz el libro “¿Cómo se robaron la Copa?”, que tuvo una enorme repercusión en el planeta y estuvo prohibido por la FIFA.
En dicho libro, el también autor de “En Nombre de Dios, el asesinato de Juan Pablo I”, mencionaba que el fútbol es un poder transnacional, que para dar un ejemplo, es de los pocos que pueden darse el lujo de hacer esperar en la línea telefónica al presidente de los Estados Unidos.
El motivo de tanto poder es el dinero que maneja y así lo expresó el ex titular de la FIFA, el brasileño Joao Havelange, quien al dejar el cargo dijo: “Yo vendo un producto llamado fútbol, que factura 250. 000.000 dólares al año y está detrás de la General Motors en ganancias”.
Se ha mencionado que la FIFA es una especie de “Súper Estado” ya que sus decisiones no pueden ser objetadas ni siquiera por los gobiernos, “so pena de quedar al margen del negocio”.
Por lo tanto, ser dirigente del futbol es contar con poder e influencia en casi todos los aspectos relacionados con la vida cotidiana.
