Lech Walesa: Los gays del Parlamento polaco deberían sentarse "detrás de un muro"
Varsovia, EP
El premio Nobel de la Paz de 1983 y antiguo presidente de Polonia, Lech Walesa, ha provocado este domingo la indignación de los liberales de su país al sugerir en una entrevista que los homosexuales presentes en el Parlamento deberían sentarse detrás de un muro.
Al preguntarle ayer en una entrevista para la cadena TVN 24 sobre si los homosexuales deberían sentarse en el Parlamento, Walesa contestó que "ninguna minoría debería pasar por encima de la mayoría". "Los homosexuales deberían sentarse incluso detrás un muro y no en la primera fila" del Parlamento. "Deberían saber que son una minoría y adaptarse a cosas más pequeñas", añadió.
El antiguo parlamentario conservador Ryzsard Nowak ha denunciado al antiguo presidente polaco ante la oficina del fiscal por promocionar el odio por las minorías sexuales. "La denuncia fue presentada el sábado cuando la oficina estaba cerrada", ha señalado la portavoz del fiscal, Barbara Sworobowicz. "A partir del lunes examinaremos si cumple con la definición legal de un crimen", ha asegurado.
El primer diputado polaco en declararse abiertamente gay, Rober Biedron, ha solicitado a Walesa que hable con él sobre los derechos de los homosexuales. "Walesa era una héroe. Sueño con reunirme con él y hablar sobre ello", ha reconocido Biedron en otra entrevista en la misma cadena. "Creo que Walesa no se da cuenta en qué tipo de sociedad vivimos ahora. Walesa se extravió en algún lugar", ha afirmado.
"Hasta ahora, Lech Walesa era conocido por romper muros, no por crearlos", ha constatado Janusz Palikot, líder del grupo anticlerical y defensor de los derechos de los homosexuales, el Movimiento Palikot, al que también pertenece Biedron. "Las palabras de Walesa contradicen a la democracia ya que esa forma de gobierno esta basada en la protección de las minorías", ha subrayado Palikot.
El Nobel de la Paz, que se hizo mundialmente conocido al hacer campaña en defensa de los Derechos Humanos y de la libertad en Polonia durante la era comunista, expresó estos puntos de vista semanas después de que el Parlamento rechazara un proyecto de ley que habría otorgado unos derechos legales limitados a las parejas homosexuales.
El premio Nobel de la Paz de 1983 y antiguo presidente de Polonia, Lech Walesa, ha provocado este domingo la indignación de los liberales de su país al sugerir en una entrevista que los homosexuales presentes en el Parlamento deberían sentarse detrás de un muro.
Al preguntarle ayer en una entrevista para la cadena TVN 24 sobre si los homosexuales deberían sentarse en el Parlamento, Walesa contestó que "ninguna minoría debería pasar por encima de la mayoría". "Los homosexuales deberían sentarse incluso detrás un muro y no en la primera fila" del Parlamento. "Deberían saber que son una minoría y adaptarse a cosas más pequeñas", añadió.
El antiguo parlamentario conservador Ryzsard Nowak ha denunciado al antiguo presidente polaco ante la oficina del fiscal por promocionar el odio por las minorías sexuales. "La denuncia fue presentada el sábado cuando la oficina estaba cerrada", ha señalado la portavoz del fiscal, Barbara Sworobowicz. "A partir del lunes examinaremos si cumple con la definición legal de un crimen", ha asegurado.
El primer diputado polaco en declararse abiertamente gay, Rober Biedron, ha solicitado a Walesa que hable con él sobre los derechos de los homosexuales. "Walesa era una héroe. Sueño con reunirme con él y hablar sobre ello", ha reconocido Biedron en otra entrevista en la misma cadena. "Creo que Walesa no se da cuenta en qué tipo de sociedad vivimos ahora. Walesa se extravió en algún lugar", ha afirmado.
"Hasta ahora, Lech Walesa era conocido por romper muros, no por crearlos", ha constatado Janusz Palikot, líder del grupo anticlerical y defensor de los derechos de los homosexuales, el Movimiento Palikot, al que también pertenece Biedron. "Las palabras de Walesa contradicen a la democracia ya que esa forma de gobierno esta basada en la protección de las minorías", ha subrayado Palikot.
El Nobel de la Paz, que se hizo mundialmente conocido al hacer campaña en defensa de los Derechos Humanos y de la libertad en Polonia durante la era comunista, expresó estos puntos de vista semanas después de que el Parlamento rechazara un proyecto de ley que habría otorgado unos derechos legales limitados a las parejas homosexuales.