Karzai: "Nunca he usado la palabra 'conspiración' entre los talibán y EEUU"
Kabul, EP
El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, ha acusado este lunes a los medios de comunicación de tergiversar las declaraciones en las que supuestamente denunció que Estados Unidos y los talibán conspiran por intereses comunes y ha optado por la cordialidad en su reunión con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry.
El jefe de la diplomacia estadounidense ha realizado este lunes una breve visita a Kabul, después de semanas de tensión entre los dos países. En la agenda, han figurado la estabilización de Afganistán antes de que el grueso de las tropas internacionales lo abandonen para finales de 2014, el traspaso de las competencias de seguridad a las fuerzas afganas y las próximas elecciones.
Kerry y Karzai han mantenido un encuentro privado y han comparecido posteriormente en una rueda de prensa en la que los periodistas han vuelto a preguntar al mandatario afgano por sus acusaciones. Según las declaraciones iniciales atribuidas a Karzai, el presidente de Afganistán acusó a los talibán de perpetrar ataques "al servicio de Estados Unidos" y denunció una supuesta conspiración entre ambas partes.
"Nunca he usado la palabra 'conspiración' entre los talibán y Estados Unidos. No son mis palabras", ha dicho Karzai, que ha acusado a los medios de comunicación de utilizar de forma sesgada sus declaraciones.
Kerry también se ha referido a esta polémica para restarle importancia: "Estoy seguro de que el presidente no cree de ninguna manera que Estados Unidos tenga otro interés en Afganistán que no sea ver a los talibán sentados a la mesa para negociar la paz".
SIN PRESOS
La visita de Kerry, la primera que éste realiza desde su llegada en febrero a la Secretaría de Estado, ha coincidido con el traspaso del control de la prisión de Parwan, en la base militar de Bagram, al Ministerio de Defensa afgano.
Esta cesión marca un hito en la posguerra afgana. "Desde hoy, ya no tenemos presos" en Afganistán, ha subrayado el jefe de la diplomacia norteamericana, que acto seguido ha advertido de que todo está ya "bajo control del pueblo afgano".
Sin embargo, el comandante afgano de las instalaciones de Bagram, Gulam Farooq Barakzai, ha aclarado que algunos presos todavía seguirán unos días más bajo custodia de las autoridades estadounidenses. Serán entregados a las autoridades del país asiático "a finales de la próxima semana", según esta fuente.
Matices aparte, en lo que sí coinciden Washington y Kabul es en la necesidad de colaborar para evitar que este trasvase de competencias se convierta en un primer paso hacia la excarcelación o fuga de los detenidos. Karzai ha explicado que Estados Unidos facilitará información de Inteligencia para determinar la peligrosidad de cada uno de los presos y ha apuntado que cualquier liberación será consultada antes.
El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, ha acusado este lunes a los medios de comunicación de tergiversar las declaraciones en las que supuestamente denunció que Estados Unidos y los talibán conspiran por intereses comunes y ha optado por la cordialidad en su reunión con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry.
El jefe de la diplomacia estadounidense ha realizado este lunes una breve visita a Kabul, después de semanas de tensión entre los dos países. En la agenda, han figurado la estabilización de Afganistán antes de que el grueso de las tropas internacionales lo abandonen para finales de 2014, el traspaso de las competencias de seguridad a las fuerzas afganas y las próximas elecciones.
Kerry y Karzai han mantenido un encuentro privado y han comparecido posteriormente en una rueda de prensa en la que los periodistas han vuelto a preguntar al mandatario afgano por sus acusaciones. Según las declaraciones iniciales atribuidas a Karzai, el presidente de Afganistán acusó a los talibán de perpetrar ataques "al servicio de Estados Unidos" y denunció una supuesta conspiración entre ambas partes.
"Nunca he usado la palabra 'conspiración' entre los talibán y Estados Unidos. No son mis palabras", ha dicho Karzai, que ha acusado a los medios de comunicación de utilizar de forma sesgada sus declaraciones.
Kerry también se ha referido a esta polémica para restarle importancia: "Estoy seguro de que el presidente no cree de ninguna manera que Estados Unidos tenga otro interés en Afganistán que no sea ver a los talibán sentados a la mesa para negociar la paz".
SIN PRESOS
La visita de Kerry, la primera que éste realiza desde su llegada en febrero a la Secretaría de Estado, ha coincidido con el traspaso del control de la prisión de Parwan, en la base militar de Bagram, al Ministerio de Defensa afgano.
Esta cesión marca un hito en la posguerra afgana. "Desde hoy, ya no tenemos presos" en Afganistán, ha subrayado el jefe de la diplomacia norteamericana, que acto seguido ha advertido de que todo está ya "bajo control del pueblo afgano".
Sin embargo, el comandante afgano de las instalaciones de Bagram, Gulam Farooq Barakzai, ha aclarado que algunos presos todavía seguirán unos días más bajo custodia de las autoridades estadounidenses. Serán entregados a las autoridades del país asiático "a finales de la próxima semana", según esta fuente.
Matices aparte, en lo que sí coinciden Washington y Kabul es en la necesidad de colaborar para evitar que este trasvase de competencias se convierta en un primer paso hacia la excarcelación o fuga de los detenidos. Karzai ha explicado que Estados Unidos facilitará información de Inteligencia para determinar la peligrosidad de cada uno de los presos y ha apuntado que cualquier liberación será consultada antes.