"Ofensiva generalizada" del ejército cerca de Damasco, la oposición se fisura
Damasco, AFP
Los suburbios de Damasco vivieron este miércoles los bombardeos más violentos desde hace meses luego de que el ejército lanzara "una ofensiva generalizada" contra los rebeldes, en momentos en que la oposición está dividida sobre una oferta de diálogo con el régimen lanzada por su jefe.
En Palmira, 19 miembros de la inteligencia siria murieron en un doble ataque suicida con coche bomba contra dos sedes de sus servicios, según una organización no gubernamental siria.
El ejército, que intenta desde hace varios meses poner fin a la rebelión, "lanzó una ofensiva total y coordinada en todos los suburbios de Damasco", según una fuente de seguridad de la capital. "Todos los ingresos a Damasco están cerrados", indicó a la AFP pidiendo el anonimato.
"La provincia es bombardeada muy violentamente, es sin precedentes desde hace meses. Hay también combates muy violentos", afirmó por su parte a la AFP Rami Abdel Rahman, presidente del opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Habitantes de la ciudad informaron que escucharon "bombardeos de una intensidad poco habitual", en momentos en que estallaron "violentos combates" entre rebeldes en los barrios periféricos como Qadam (sur), Jobar y Qabun (este), bastiones de los rebeldes.
En un comunicado, el Consejo Nacional Sirio (CNS, principal componente de la oposición) afirmó que el régimen caerá por las armas y no por la negociación, como lo propone Ahmed Moaz al Jatib, el jefe de la Coalición Nacional Siria del que el CNS forma parte.
"Los revolucionarios y los héroes del Ejército Sirio Libre (ESL) llevan a cabo ataques contra las posiciones estratégicas en nuestra capital (...) y en otras regiones. Están logrando victorias importantes en el camino de la revolución siria", dice el comunicado.
En paralelo al interminable ciclo de violencia que este miércoles dejó 122 muertos, de los cuales 32 civiles, según un balance provisorio del OSDH, aparecen fisuras en la oposición, luego de la oferta de diálogo con el régimen lanzada por Jatib.
La propuesta del jefe de la Coalición opositora fue respaldada por Washington y la Liga Árabe, pero sobre todo por los dos principales aliados de Damasco, Rusia e Irán. El mediador internacional Lajdar Brahimi la juzgó "positiva".
Pero el CNS se opuso a esta propuesta y rechazó que la "revolución" siria se convierta en "rehén de un compromiso internacional".
El CNS expresó asimismo su indignación tras los inéditos contactos entre Jatib y el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Ali Akbar Salehi, que se entrevistaron el domingo. El CNS afirmó que "rechaza" estos contactos "mientras Irán apoye al régimen" sirio.
Jatib había anticipado las críticas, rehusando "que los que hablan de negociaciones sean acusados de traición".
El jefe de la oposición siria también exigió este miércoles que todas las mujeres encarceladas sean liberadas de aquí al domingo, o el régimen de Bashar al Asad perderá su oportunidad de diálogo, en una entrevista con la BBC en árabe
"Estas cosas no pueden esperar al día del juicio final. El pedido de que las mujeres sean liberadas significa que si el domingo todavía hay una sola mujer en prisión en Siria, entonces consideraré que el régimen rechazó mi iniciativa" de diálogo, dijo el jefe de la Coalición Nacional Siria.
Damasco no reaccionó aún públicamente a esta oferta. Un periódico cercano al poder la juzgó "insuficiente" y llamó a Jatib indirectamente a que desautorizara la rebelión armada.
La críticas siembran confusión dentro de la Coalición, que nació apenas en noviembre a duras penas luego de varios y vanos intentos para unificar a los grupos de la oposición.
En la apertura el miércoles en El Cairo de la 12ª cumbre de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) el presidente egipcio Mohamed Mursi llamó a las diferentes facciones de la oposición siria a unirse "para instaurar una democracia" en Siria, en donde según la ONU más de 60.000 personas murieron en casi dos años.
Los suburbios de Damasco vivieron este miércoles los bombardeos más violentos desde hace meses luego de que el ejército lanzara "una ofensiva generalizada" contra los rebeldes, en momentos en que la oposición está dividida sobre una oferta de diálogo con el régimen lanzada por su jefe.
En Palmira, 19 miembros de la inteligencia siria murieron en un doble ataque suicida con coche bomba contra dos sedes de sus servicios, según una organización no gubernamental siria.
El ejército, que intenta desde hace varios meses poner fin a la rebelión, "lanzó una ofensiva total y coordinada en todos los suburbios de Damasco", según una fuente de seguridad de la capital. "Todos los ingresos a Damasco están cerrados", indicó a la AFP pidiendo el anonimato.
"La provincia es bombardeada muy violentamente, es sin precedentes desde hace meses. Hay también combates muy violentos", afirmó por su parte a la AFP Rami Abdel Rahman, presidente del opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Habitantes de la ciudad informaron que escucharon "bombardeos de una intensidad poco habitual", en momentos en que estallaron "violentos combates" entre rebeldes en los barrios periféricos como Qadam (sur), Jobar y Qabun (este), bastiones de los rebeldes.
En un comunicado, el Consejo Nacional Sirio (CNS, principal componente de la oposición) afirmó que el régimen caerá por las armas y no por la negociación, como lo propone Ahmed Moaz al Jatib, el jefe de la Coalición Nacional Siria del que el CNS forma parte.
"Los revolucionarios y los héroes del Ejército Sirio Libre (ESL) llevan a cabo ataques contra las posiciones estratégicas en nuestra capital (...) y en otras regiones. Están logrando victorias importantes en el camino de la revolución siria", dice el comunicado.
En paralelo al interminable ciclo de violencia que este miércoles dejó 122 muertos, de los cuales 32 civiles, según un balance provisorio del OSDH, aparecen fisuras en la oposición, luego de la oferta de diálogo con el régimen lanzada por Jatib.
La propuesta del jefe de la Coalición opositora fue respaldada por Washington y la Liga Árabe, pero sobre todo por los dos principales aliados de Damasco, Rusia e Irán. El mediador internacional Lajdar Brahimi la juzgó "positiva".
Pero el CNS se opuso a esta propuesta y rechazó que la "revolución" siria se convierta en "rehén de un compromiso internacional".
El CNS expresó asimismo su indignación tras los inéditos contactos entre Jatib y el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Ali Akbar Salehi, que se entrevistaron el domingo. El CNS afirmó que "rechaza" estos contactos "mientras Irán apoye al régimen" sirio.
Jatib había anticipado las críticas, rehusando "que los que hablan de negociaciones sean acusados de traición".
El jefe de la oposición siria también exigió este miércoles que todas las mujeres encarceladas sean liberadas de aquí al domingo, o el régimen de Bashar al Asad perderá su oportunidad de diálogo, en una entrevista con la BBC en árabe
"Estas cosas no pueden esperar al día del juicio final. El pedido de que las mujeres sean liberadas significa que si el domingo todavía hay una sola mujer en prisión en Siria, entonces consideraré que el régimen rechazó mi iniciativa" de diálogo, dijo el jefe de la Coalición Nacional Siria.
Damasco no reaccionó aún públicamente a esta oferta. Un periódico cercano al poder la juzgó "insuficiente" y llamó a Jatib indirectamente a que desautorizara la rebelión armada.
La críticas siembran confusión dentro de la Coalición, que nació apenas en noviembre a duras penas luego de varios y vanos intentos para unificar a los grupos de la oposición.
En la apertura el miércoles en El Cairo de la 12ª cumbre de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) el presidente egipcio Mohamed Mursi llamó a las diferentes facciones de la oposición siria a unirse "para instaurar una democracia" en Siria, en donde según la ONU más de 60.000 personas murieron en casi dos años.