El dinero ilícito que se fuga de Latinoamérica
Alejandro Rebossio, El País
No solo el crimen organizado, como el tráfico de drogas, armas y personas, moviliza grandes sumas ilegales de dinero por todo el mundo. También la corrupción y el fraude tributario son canales voluminosos de escape. Por eso la organización no gubernamental Global Financial Integrity difundió en diciembre pasado un informe que calcula cuántos millones se fugaron por todas esas vías ilegales de los países en desarrollo entre 2001 y 2010, años precisamente de bonanza en estos mercados emergentes. Los investigadores de la ONG, Sarah Freitas y Dev Kar, un ex economista del Fondo Monetario Internacional (FMI), calcularon que solo en 2010 los países en vías de desarrollo vieron salir de sus territorios unos 858.800 millones de dólares en flujos ilícitos. Es dinero que acabó en países ricos o en paraísos fiscales y que no incluye lo mucho que se mueve en efectivo en negocios como las drogas y la trata.
La mayoría del dinero ilegal que se le ha escapado a los mercados emergentes en la primera década del siglo proviene de Asia (61,2%). Le sigue en importancia América Latina, con el 15,6% y con México a la cabeza. Sirve de poco consuelo que esta región presente el menor ritmo de crecimiento anual de estos flujos, el 2,7%, frente a Oriente Medio, África, Asia y Europa oriental.
"Está claro: las economías en vías de desarrollo están perdiendo cada vez más dinero en un momento en que las naciones ricas y pobres están luchando por igual para impulsar el crecimiento económico", declaró el director de GFI, Raymond Baker, al presentar el informe. Freitas opinó que el dinero se desvía por corrupción y fraude tributario "podría haberse invertido en salud, educación e infraestructuras; en sacar a la gente de la pobreza y salvar vidas".
El principal medio para la salida de capitales ilegales en Latinoamérica es la falsificación de la facturación comercial. Esta herramienta es usada en el 84% de los casos.
Entre 2001 y 2010 se escapó dinero ilícito de la región por 869.900 millones de dólares. En 2001 la cifra ascendía a 67.200 millones y nueve años más tarde alcanzó los 109.300 millones. En 2008, el año en que llegó al máximo nivel la actividad económica y después estalló la burbuja financiera internacional, salieron 121.100 millones. En 2010, con la recuperación económica, el flujo creció 6,5% respecto de 2009. A principios de los 2000, la cantidad de salida de dinero legal y la del ilegal eran similares en el mundo en desarrollo, pero el flujo ilícito se ha ido incrementando a lo largo de la década pasada al compás de la relajación de los controles de capitales que han aplicado grandes economías emergentes, como Brasil, México, China, India y Rusia, según Global Financial Integrity.
En la clasificación del mundo emergente sobre fuga de dinero ilícito entre 2001 y 2010, China figura a la cabeza, con 274.170 millones de dólares de media anual, seguido por México, con 47.561 millones, y Malasia, con 28.524 millones. Costa Rica aparece segunda en Latinoamérica y 14° en el mundo en desarrollo, con 6.370 millones anuales. Detrás en la región figura Panamá, con 3.987 millones y el puesto 18° de la tabla general; Venezuela, con 3.791 millones (19°), y Brasil, con 3.510 millones (21°).
En la clasificación del informe, Honduras está 24°, con 3.081 millones; Chile, 28°, con 2.417 millones; República Dominicana, 34°, con 1.695 millones; Argentina, 36°, con 1.670 millones; Guatemala, 37°, con 1.622 millones; Colombia, 46°, con 1.254 millones; Ecuador, 47°, con 1.135 millones; Nicaragua, 48°, con 1.093 millones; Perú, 53°, con 952 millones; El Salvador, 56°, con 867 millones; Paraguay, 59°, con 754 millones y Uruguay, 61°, con 736 millones. En estos resultados queda a la vista que esta estadística de Global Financial Integrity excluye datos de flujos de efectivo omnipresentes en el narcotráfico, seguramente difíciles de mensurar. De ahí quizás que países más afectados por la producción de estupefacientes, como Colombia, aparezcan relegados en la lista.
Global Financial Integrity calcula en qué países el egreso de dinero ilícito provoca un peor impacto social, dado los niveles de pobreza existentes. Es así que ha elaborado una lista de los diez más perjudicados, incluidos China, México y Rusia a la cabeza y con Venezuela en el octavo lugar.
No solo el crimen organizado, como el tráfico de drogas, armas y personas, moviliza grandes sumas ilegales de dinero por todo el mundo. También la corrupción y el fraude tributario son canales voluminosos de escape. Por eso la organización no gubernamental Global Financial Integrity difundió en diciembre pasado un informe que calcula cuántos millones se fugaron por todas esas vías ilegales de los países en desarrollo entre 2001 y 2010, años precisamente de bonanza en estos mercados emergentes. Los investigadores de la ONG, Sarah Freitas y Dev Kar, un ex economista del Fondo Monetario Internacional (FMI), calcularon que solo en 2010 los países en vías de desarrollo vieron salir de sus territorios unos 858.800 millones de dólares en flujos ilícitos. Es dinero que acabó en países ricos o en paraísos fiscales y que no incluye lo mucho que se mueve en efectivo en negocios como las drogas y la trata.
La mayoría del dinero ilegal que se le ha escapado a los mercados emergentes en la primera década del siglo proviene de Asia (61,2%). Le sigue en importancia América Latina, con el 15,6% y con México a la cabeza. Sirve de poco consuelo que esta región presente el menor ritmo de crecimiento anual de estos flujos, el 2,7%, frente a Oriente Medio, África, Asia y Europa oriental.
"Está claro: las economías en vías de desarrollo están perdiendo cada vez más dinero en un momento en que las naciones ricas y pobres están luchando por igual para impulsar el crecimiento económico", declaró el director de GFI, Raymond Baker, al presentar el informe. Freitas opinó que el dinero se desvía por corrupción y fraude tributario "podría haberse invertido en salud, educación e infraestructuras; en sacar a la gente de la pobreza y salvar vidas".
El principal medio para la salida de capitales ilegales en Latinoamérica es la falsificación de la facturación comercial. Esta herramienta es usada en el 84% de los casos.
Entre 2001 y 2010 se escapó dinero ilícito de la región por 869.900 millones de dólares. En 2001 la cifra ascendía a 67.200 millones y nueve años más tarde alcanzó los 109.300 millones. En 2008, el año en que llegó al máximo nivel la actividad económica y después estalló la burbuja financiera internacional, salieron 121.100 millones. En 2010, con la recuperación económica, el flujo creció 6,5% respecto de 2009. A principios de los 2000, la cantidad de salida de dinero legal y la del ilegal eran similares en el mundo en desarrollo, pero el flujo ilícito se ha ido incrementando a lo largo de la década pasada al compás de la relajación de los controles de capitales que han aplicado grandes economías emergentes, como Brasil, México, China, India y Rusia, según Global Financial Integrity.
En la clasificación del mundo emergente sobre fuga de dinero ilícito entre 2001 y 2010, China figura a la cabeza, con 274.170 millones de dólares de media anual, seguido por México, con 47.561 millones, y Malasia, con 28.524 millones. Costa Rica aparece segunda en Latinoamérica y 14° en el mundo en desarrollo, con 6.370 millones anuales. Detrás en la región figura Panamá, con 3.987 millones y el puesto 18° de la tabla general; Venezuela, con 3.791 millones (19°), y Brasil, con 3.510 millones (21°).
En la clasificación del informe, Honduras está 24°, con 3.081 millones; Chile, 28°, con 2.417 millones; República Dominicana, 34°, con 1.695 millones; Argentina, 36°, con 1.670 millones; Guatemala, 37°, con 1.622 millones; Colombia, 46°, con 1.254 millones; Ecuador, 47°, con 1.135 millones; Nicaragua, 48°, con 1.093 millones; Perú, 53°, con 952 millones; El Salvador, 56°, con 867 millones; Paraguay, 59°, con 754 millones y Uruguay, 61°, con 736 millones. En estos resultados queda a la vista que esta estadística de Global Financial Integrity excluye datos de flujos de efectivo omnipresentes en el narcotráfico, seguramente difíciles de mensurar. De ahí quizás que países más afectados por la producción de estupefacientes, como Colombia, aparezcan relegados en la lista.
Global Financial Integrity calcula en qué países el egreso de dinero ilícito provoca un peor impacto social, dado los niveles de pobreza existentes. Es así que ha elaborado una lista de los diez más perjudicados, incluidos China, México y Rusia a la cabeza y con Venezuela en el octavo lugar.