Los alumnos de la escuela de Newtown vuelven a las clases
Nueva York, EP
Los alumnos de la escuela Sandy Hook de Newtown (Connecticut), donde el pasado 14 de diciembre se produjo una matanza en la que murieron 26 personas, han regresado este jueves a las clases, aunque lo han hecho acudiendo a un centro situado en la cercana localidad de Monroe debido a las investigaciones policiales aún en curso.
La responsable de los colegios públicos de Newtown, Janet Robinson, ha explicado ante la prensa que el nuevo centro, Chalk Hill, ha sido adaptado para acoger a niños de menos edad y cuenta con muebles y alfombras similares a las de Sandy Hook para facilitar la transición. Se ha trasladado incluso a la tortuga mascota de la escuela, según Robinson, que confía en que en los menores vivan un "día normal".
El gestor de los centros públicos de Monroe, Jim Agostine, ha confirmado el refuerzo de las medidas de seguridad, de tal forma que el Chalk Hill cuenta ahora con cámaras de vigilancia y mejores cierres. "Tiene que ser la escuela más segura de Estados Unidos", ha indicado el teniente de Policía Keit White.
La madre de uno de los alumnos, Christine Wilford, ha reconocido en declaraciones a la CNN que es "difícil" volver a despegarse de su hijo, pero considera "bueno" que recupere poco a poco la rutina perdida el 14 de diciembre, cuando el joven Adam Lanza irrumpió en la escuela Sandy Hook y acabó con la vida de 20 niños y seis adultos antes de quitarse la vida.
"Todo está donde debería estar", ha apuntado otro padre, John Eisele, en una entrevista con la CBS. En este sentido, ha felicitado a los responsables de este "buen trabajo" que ha permitido un entorno similar al de la anterior escuela.
Los padres consultados por ambas cadenas de televisión han coincidido en señalar que sus hijos tienen ganas también de volver a ver a sus compañeros, ajenos a la expectación que levantó la matanza.
Los alumnos de la escuela Sandy Hook de Newtown (Connecticut), donde el pasado 14 de diciembre se produjo una matanza en la que murieron 26 personas, han regresado este jueves a las clases, aunque lo han hecho acudiendo a un centro situado en la cercana localidad de Monroe debido a las investigaciones policiales aún en curso.
La responsable de los colegios públicos de Newtown, Janet Robinson, ha explicado ante la prensa que el nuevo centro, Chalk Hill, ha sido adaptado para acoger a niños de menos edad y cuenta con muebles y alfombras similares a las de Sandy Hook para facilitar la transición. Se ha trasladado incluso a la tortuga mascota de la escuela, según Robinson, que confía en que en los menores vivan un "día normal".
El gestor de los centros públicos de Monroe, Jim Agostine, ha confirmado el refuerzo de las medidas de seguridad, de tal forma que el Chalk Hill cuenta ahora con cámaras de vigilancia y mejores cierres. "Tiene que ser la escuela más segura de Estados Unidos", ha indicado el teniente de Policía Keit White.
La madre de uno de los alumnos, Christine Wilford, ha reconocido en declaraciones a la CNN que es "difícil" volver a despegarse de su hijo, pero considera "bueno" que recupere poco a poco la rutina perdida el 14 de diciembre, cuando el joven Adam Lanza irrumpió en la escuela Sandy Hook y acabó con la vida de 20 niños y seis adultos antes de quitarse la vida.
"Todo está donde debería estar", ha apuntado otro padre, John Eisele, en una entrevista con la CBS. En este sentido, ha felicitado a los responsables de este "buen trabajo" que ha permitido un entorno similar al de la anterior escuela.
Los padres consultados por ambas cadenas de televisión han coincidido en señalar que sus hijos tienen ganas también de volver a ver a sus compañeros, ajenos a la expectación que levantó la matanza.