Esterilización masiva de perros en México
México, AFP
Cientos de habitantes de Ciudad de México acuden con sus perros Labradores, Chihuahuas y Poodles a centros de esterilización, luego de que las autoridades decidieron acelerar su campaña permanente para reducir el número de perros callejeros, tras registrarse varias muertes por ataques caninos.
El gobierno de la capital mexicana ha multiplicado los llamados para que sus cerca de nueve millones de habitantes esterilicen de forma gratuita a sus animales de compañía, tras la muerte de al menos cuatro personas en un parque del sur de la ciudad, aparentemente por ataques de jaurías, durante las últimas dos semanas.
El hallazgo macabro de los cuerpos destazados causó conmoción en Ciudad de México, que cuenta 1,2 millones de perros, de los cuales unos 127,000 son callejeros.
Organizaciones protectoras de animales de México, un país sumergido en la violencia criminal, han cuestionado la versión de las autoridades que responsabilizan directamente a los canes de los recientes ataques.
Los agentes especializados en el control de animales capturaron esta semana 54 perros del precario barrio de Iztapalapa, tras descubrirse en una reserva ecológica de esa localidad los cuerpos mutilados de una mujer y su bebé, así como los de una pareja de adolescentes.
Los investigadores sospechan además que una joven de 15 años, cuyo cadáver fue hallado el 16 de diciembre, podría haber sido otra víctima de una manada hambrienta de perros.
Los expertos realizan actualmente pruebas de ADN a los canes capturados para determinar si fueron culpables, y aseguran que posteriormente, entregarán los animales a organizaciones que velan por sus derechos.
Para controlar el desarrollo de la población perruna, el gobierno de Ciudad de México desplegó 25 unidades quirúrgicas móviles en un terreno de fútbol del popular barrio Golondrinas, adonde son llevados perros y gatos para una operación que dura unos 40 minutos.
Un Labrador cachorro aúlla contra un Cocker Spaniel adulto, mientras un Poodle vomita en el césped a causa de la anestesia que se le acaba de administrar. "Todo va a estar bien" para estos animalitos, asegura a los dueños un veterinario que forma parte de esta campaña permanente llamada "Sea dueño responsable".
Maricarmen Zamora, de 23 años, así como Yenifer Moreno, de 17, llevaron a tres de sus cinco perras. "Ya hay muchos perros abandonados y maltratados y no queremos que tengan más", dice Zamora mientras sujeta la correa de Candy, un Labrador de dos meses.
Pero como muchos propietarios de animales domésticos, estas dos mujeres no pueden creer que el mejor amigo del hombre pueda matar personas.
"Un perro no puede hacer heridas de esta magnitud", afirma Moreno, cuyo Poodle, Kimba, acaba de ser operado.
Sin embargo, uno de los veterinarios de la ciudad, Carlos Munguía, asegura que perros hambrientos son capaces de asesinar a una persona.
"Las jaurías siempre trabajan en equipo, como leones o perros salvajes", dijo.
Por su parte, el responsable de Salud de la ciudad, Armando Ahued Ortega, indicó que 11,511 personas sufrieron mordeduras de perro en 2012, y que al menos 70 de esos casos necesitaron una intervención quirúrgica reconstructiva.
Ortega dijo que el operativo se lleva a cabo en las localidades en las que hay más canes. "Hemos encontrado cajas con cuatro, cinco, seis cachorros que lanzan a la calle (...) Y después los perros andan deambulando en la calle, y andan mordiendo gente", comentó.
Cientos de habitantes de Ciudad de México acuden con sus perros Labradores, Chihuahuas y Poodles a centros de esterilización, luego de que las autoridades decidieron acelerar su campaña permanente para reducir el número de perros callejeros, tras registrarse varias muertes por ataques caninos.
El gobierno de la capital mexicana ha multiplicado los llamados para que sus cerca de nueve millones de habitantes esterilicen de forma gratuita a sus animales de compañía, tras la muerte de al menos cuatro personas en un parque del sur de la ciudad, aparentemente por ataques de jaurías, durante las últimas dos semanas.
El hallazgo macabro de los cuerpos destazados causó conmoción en Ciudad de México, que cuenta 1,2 millones de perros, de los cuales unos 127,000 son callejeros.
Organizaciones protectoras de animales de México, un país sumergido en la violencia criminal, han cuestionado la versión de las autoridades que responsabilizan directamente a los canes de los recientes ataques.
Los agentes especializados en el control de animales capturaron esta semana 54 perros del precario barrio de Iztapalapa, tras descubrirse en una reserva ecológica de esa localidad los cuerpos mutilados de una mujer y su bebé, así como los de una pareja de adolescentes.
Los investigadores sospechan además que una joven de 15 años, cuyo cadáver fue hallado el 16 de diciembre, podría haber sido otra víctima de una manada hambrienta de perros.
Los expertos realizan actualmente pruebas de ADN a los canes capturados para determinar si fueron culpables, y aseguran que posteriormente, entregarán los animales a organizaciones que velan por sus derechos.
Para controlar el desarrollo de la población perruna, el gobierno de Ciudad de México desplegó 25 unidades quirúrgicas móviles en un terreno de fútbol del popular barrio Golondrinas, adonde son llevados perros y gatos para una operación que dura unos 40 minutos.
Un Labrador cachorro aúlla contra un Cocker Spaniel adulto, mientras un Poodle vomita en el césped a causa de la anestesia que se le acaba de administrar. "Todo va a estar bien" para estos animalitos, asegura a los dueños un veterinario que forma parte de esta campaña permanente llamada "Sea dueño responsable".
Maricarmen Zamora, de 23 años, así como Yenifer Moreno, de 17, llevaron a tres de sus cinco perras. "Ya hay muchos perros abandonados y maltratados y no queremos que tengan más", dice Zamora mientras sujeta la correa de Candy, un Labrador de dos meses.
Pero como muchos propietarios de animales domésticos, estas dos mujeres no pueden creer que el mejor amigo del hombre pueda matar personas.
"Un perro no puede hacer heridas de esta magnitud", afirma Moreno, cuyo Poodle, Kimba, acaba de ser operado.
Sin embargo, uno de los veterinarios de la ciudad, Carlos Munguía, asegura que perros hambrientos son capaces de asesinar a una persona.
"Las jaurías siempre trabajan en equipo, como leones o perros salvajes", dijo.
Por su parte, el responsable de Salud de la ciudad, Armando Ahued Ortega, indicó que 11,511 personas sufrieron mordeduras de perro en 2012, y que al menos 70 de esos casos necesitaron una intervención quirúrgica reconstructiva.
Ortega dijo que el operativo se lleva a cabo en las localidades en las que hay más canes. "Hemos encontrado cajas con cuatro, cinco, seis cachorros que lanzan a la calle (...) Y después los perros andan deambulando en la calle, y andan mordiendo gente", comentó.