El líder supremo de Irán advierte contra las críticas al desarrollo de las elecciones
Dubai, EP
El líder supremo de Irán, ayatolá Alí Jamenei, ha advertido este martes a la población de que quienes critiquen las elecciones presidenciales previstas para junio pueden estar sirviendo indirectamente a los intereses del "enemigo".
Los iraníes volverán a acudir a las urnas el próximo junio para elegir quién sucederá a Mahmud Ahmadineyad como presidente. Los anteriores comicios, celebrados en 2009, derivaron en una ola de protestas sin precedentes y terminaron con los dos principales candidatos opositores, Mirhossein Mousavi y Mehdi Karoubi, detenidos.
Jamenei ha subrayado que "todos", incluidos aquellos que plantean "recomendaciones generales" expresando algunas "preocupaciones" sobre el desarrollo de las elecciones, "deberían tener cuidado para no servir a los intereses del enemigo", según un comunicado publicado en la página oficial del líder supremo.
Las declaraciones de Jamenei son un aparente respuesta al debate surgido en la República Islámica sobre si debería permitirse a los candidatos reformistas aspirar a la presidencia. Algunos analistas prevén que solo podrán participar si se distancian de Mousavi y Karoubi, quienes se encuentran desde hace dos años bajo arresto domiciliario.
Los dos líderes opositores denunciaron fraude en las elecciones de 2009 y se convirtieron en símbolo de las movilizaciones sociales contra Ahmadineyad, las mayores desde la revolución de 1979. El Gobierno negó que se produjesen irregularidades y vinculó las manifestaciones con un complot orquestado desde el extranjero.
Los grupos reformistas debaten ahora si participar en las elecciones o boicotearlas por la detención de Mousavi y Karoubi. Esta previsto que estas facciones debatan su postura este mismo mes, durante un encuentro que reunirá a distintos grupos.
El líder supremo de Irán, ayatolá Alí Jamenei, ha advertido este martes a la población de que quienes critiquen las elecciones presidenciales previstas para junio pueden estar sirviendo indirectamente a los intereses del "enemigo".
Los iraníes volverán a acudir a las urnas el próximo junio para elegir quién sucederá a Mahmud Ahmadineyad como presidente. Los anteriores comicios, celebrados en 2009, derivaron en una ola de protestas sin precedentes y terminaron con los dos principales candidatos opositores, Mirhossein Mousavi y Mehdi Karoubi, detenidos.
Jamenei ha subrayado que "todos", incluidos aquellos que plantean "recomendaciones generales" expresando algunas "preocupaciones" sobre el desarrollo de las elecciones, "deberían tener cuidado para no servir a los intereses del enemigo", según un comunicado publicado en la página oficial del líder supremo.
Las declaraciones de Jamenei son un aparente respuesta al debate surgido en la República Islámica sobre si debería permitirse a los candidatos reformistas aspirar a la presidencia. Algunos analistas prevén que solo podrán participar si se distancian de Mousavi y Karoubi, quienes se encuentran desde hace dos años bajo arresto domiciliario.
Los dos líderes opositores denunciaron fraude en las elecciones de 2009 y se convirtieron en símbolo de las movilizaciones sociales contra Ahmadineyad, las mayores desde la revolución de 1979. El Gobierno negó que se produjesen irregularidades y vinculó las manifestaciones con un complot orquestado desde el extranjero.
Los grupos reformistas debaten ahora si participar en las elecciones o boicotearlas por la detención de Mousavi y Karoubi. Esta previsto que estas facciones debatan su postura este mismo mes, durante un encuentro que reunirá a distintos grupos.