Merkel celebra el acuerdo bancario como un éxito alemán
La canciller explica ante el Bundestag que su Gobierno ha conseguido imponer sus “principales condiciones”
Juan Gómez
Berlín, El País
La canciller de Alemania, Angela Merkel, quiere que los socios europeos estrechen la coordinación de sus políticas económicas para que “aumente la competitividad” en el continente. En este sentido, Merkel habló de crear “estímulos financieros definidos, limitados y temporales” para que Europa recupere su capacidad de competir en los mercados. Una propuesta que “no debe malinterpretarse”, porque “con Alemania no va a ser posible negociar nuevas fuentes financieras” que incluyan fondos públicos. Ante el pleno de la Cámara baja alemana (Bundestag), la democristiana describió en términos entusiastas el acuerdo alcanzado de madrugada por los ministros de Hacienda de la Unión Europea para instaurar un organismo de supervisión bancaria común dentro del Banco Central Europeo (BCE).
Según explicó Merkel a los diputados alemanes, su ministro de Hacienda Wolfgang Schäuble ha conseguido imponer las “principales condiciones” que Alemania llevó a las negociaciones. Entre ellas, que el BCE separe de forma estricta su política monetaria de la supervisión bancaria. El del jueves fue la vigesimosexta declaración de Gobierno de Merkel previa a una cumbre europea desde que comenzó la crisis.
Merkel consideró un éxito alemán que el BCE no controle las cajas de ahorros ni las cooperativas de ahorro. Sí quedarán bajo el control del BCE el Deutsche Bank, el Commerzbank y un buen número de los maltrechos Landesbanken. Además de esto, la canciller se mostró confiada en que Europa pueda acordar pronto el impuesto a las transacciones financieras. Esta tasa ha pasado el filtro del Parlamento Europeo para que once socios europeos la apliquen próximamente.
Merkel tuvo palabras de aliento para los países más afectados por la crisis y los recortes: “el esfuerzo no será baldío”, dijo antes de referirse a los “primeros éxitos” de las políticas de austeridad propugnadas por su Gobierno para Europa. También se felicitó por el éxito de las compras de bonos griegos por parte del propio Gobierno de Atenas. En su réplica posterior, el presidente del Partido Socialdemócrata de Alemania, Sigmar Gabriel (SPD), acusó a Merkel de estar agravando los problemas de sus socios con políticas de recortes que está ahogando sus economías.
Merkel defendió en su declaración un “nuevo proceso escalonado y estructurado” para que los Estados europeos alcancen acuerdos vinculantes con la Unión, “siempre con el visto bueno de sus respectivos parlamentos” para garantizar la legitimación democrática.
La canciller Merkel volvió a celebrar públicamente la concesión del Premio Nobel de la Paz a la Unión Europea, días después de asistir a la concesión del galardón. Aclaró que, si bien es probable que Croacia se convierta a mediados de 2013 en el 28 socio de la UE, Europa no está en situación de abrir nuevos procesos de admisión: “creemos que ahora no es el momento”. Además, llamó a aplicar criterios económicos de admisión más estrictos.
Juan Gómez
Berlín, El País
La canciller de Alemania, Angela Merkel, quiere que los socios europeos estrechen la coordinación de sus políticas económicas para que “aumente la competitividad” en el continente. En este sentido, Merkel habló de crear “estímulos financieros definidos, limitados y temporales” para que Europa recupere su capacidad de competir en los mercados. Una propuesta que “no debe malinterpretarse”, porque “con Alemania no va a ser posible negociar nuevas fuentes financieras” que incluyan fondos públicos. Ante el pleno de la Cámara baja alemana (Bundestag), la democristiana describió en términos entusiastas el acuerdo alcanzado de madrugada por los ministros de Hacienda de la Unión Europea para instaurar un organismo de supervisión bancaria común dentro del Banco Central Europeo (BCE).
Según explicó Merkel a los diputados alemanes, su ministro de Hacienda Wolfgang Schäuble ha conseguido imponer las “principales condiciones” que Alemania llevó a las negociaciones. Entre ellas, que el BCE separe de forma estricta su política monetaria de la supervisión bancaria. El del jueves fue la vigesimosexta declaración de Gobierno de Merkel previa a una cumbre europea desde que comenzó la crisis.
Merkel consideró un éxito alemán que el BCE no controle las cajas de ahorros ni las cooperativas de ahorro. Sí quedarán bajo el control del BCE el Deutsche Bank, el Commerzbank y un buen número de los maltrechos Landesbanken. Además de esto, la canciller se mostró confiada en que Europa pueda acordar pronto el impuesto a las transacciones financieras. Esta tasa ha pasado el filtro del Parlamento Europeo para que once socios europeos la apliquen próximamente.
Merkel tuvo palabras de aliento para los países más afectados por la crisis y los recortes: “el esfuerzo no será baldío”, dijo antes de referirse a los “primeros éxitos” de las políticas de austeridad propugnadas por su Gobierno para Europa. También se felicitó por el éxito de las compras de bonos griegos por parte del propio Gobierno de Atenas. En su réplica posterior, el presidente del Partido Socialdemócrata de Alemania, Sigmar Gabriel (SPD), acusó a Merkel de estar agravando los problemas de sus socios con políticas de recortes que está ahogando sus economías.
Merkel defendió en su declaración un “nuevo proceso escalonado y estructurado” para que los Estados europeos alcancen acuerdos vinculantes con la Unión, “siempre con el visto bueno de sus respectivos parlamentos” para garantizar la legitimación democrática.
La canciller Merkel volvió a celebrar públicamente la concesión del Premio Nobel de la Paz a la Unión Europea, días después de asistir a la concesión del galardón. Aclaró que, si bien es probable que Croacia se convierta a mediados de 2013 en el 28 socio de la UE, Europa no está en situación de abrir nuevos procesos de admisión: “creemos que ahora no es el momento”. Además, llamó a aplicar criterios económicos de admisión más estrictos.