Button: "La falta de ritmo nos costó el título, no la fiabilidad"
Londres, EFE
A un campeón del mundo como Jenson Button no le gusta nada quedarse fuera de la pelea por el título. En los últimos coletazos de este 2012, el inglés alza la voz de nuevo para dejar claro que si en McLaren no pudieron optar a la lucha por el campeonato con Vettel y Alonso “no fue sólo por problemas de fiabilidad”, sino por “falta de ritmo” en momentos determinados.
“La parte del Mundial más difícil para nosotros fue antes de las vacaciones de verano porque no teníamos ritmo. En ese período de tiempo el coche no era lo suficientemente bueno en comparación con el de nuestros competidores”, concreta el británico en 'Autosport', señalando a las citas de Gran Bretaña, Alemania y Hungría. Aunque, curiosamente, de esos tres grandes premios, el único en el que McLaren no obtuvo los resultados que se esperan de él fue en el de su país (Hamilton quedó octavo y Button décimo). En las otras dos no les fue tan mal, en Hockenheim Jenson fue segundo tras Alonso y en Hungaroring Lewis consiguió la victoria.
Pero, a pesar de que el campeón de 2009 habla de esas deficiencias del MP4-28, un monoplaza que, por otro lado, terminó siendo el mejor de la parilla en las últimas carreras, no quiere obviar los problemas de fiabilidad que han tenido en la escudería de Woking. “Hemos tenido problemas de fiabilidad, pero cuando realmente lo miras, los problemas han llegado siempre los fines de semana”, señala Jenson, que lo que realmente le molesta es que esos percances sólo han aparecido en los momentos decisivos: “Hicimos 1.400 kilómetros en pruebas con jóvenes pilotos y no había ningún problema, por lo que, en ese sentido, creo que hemos tenido un poco de mala suerte”.
Otro momento difícil para el que será el líder del equipo británico en 2013 fue cuando no era capaz de comprender el rendimiento de los Pirelli, allá por los meses de mayo y junio: “Probamos cosas nuevas, porque yo luchaba por conseguir temperatura en los neumáticos más que la mayoría de los pilotos, y no funcionó, porque terminaba por destruirlos como en el GP de Mónaco y el de Canadá (acabó 16º en ambas)”.
A pesar de la diferencia de rendimiento con su compañero en esa parte de la temporada, Button es capaz de sacar algo positivo de ello: “Lewis tuvo una buena carrera en Canadá (ganó) y yo la tuve mala, y eso era bueno para el resto del año de alguna manera porque teníamos los dos extremos para que pudiéramos mirar los datos, entrar en el simulador, cambiar el balance del monoplaza y averiguar por qué yo tenía tanta degradación y Lewis no”. “Fue un hecho muy útil para saber lo que puedes y no puedes hacer con los neumáticos, porque es diferente a lo que normalmente sueles pensar”, concluye Jenson, que en 2013 tendrá ante sí uno de los mayores retos de su carrera al quedarse como líder de uno de los equipos que optarán a todo.
A un campeón del mundo como Jenson Button no le gusta nada quedarse fuera de la pelea por el título. En los últimos coletazos de este 2012, el inglés alza la voz de nuevo para dejar claro que si en McLaren no pudieron optar a la lucha por el campeonato con Vettel y Alonso “no fue sólo por problemas de fiabilidad”, sino por “falta de ritmo” en momentos determinados.
“La parte del Mundial más difícil para nosotros fue antes de las vacaciones de verano porque no teníamos ritmo. En ese período de tiempo el coche no era lo suficientemente bueno en comparación con el de nuestros competidores”, concreta el británico en 'Autosport', señalando a las citas de Gran Bretaña, Alemania y Hungría. Aunque, curiosamente, de esos tres grandes premios, el único en el que McLaren no obtuvo los resultados que se esperan de él fue en el de su país (Hamilton quedó octavo y Button décimo). En las otras dos no les fue tan mal, en Hockenheim Jenson fue segundo tras Alonso y en Hungaroring Lewis consiguió la victoria.
Pero, a pesar de que el campeón de 2009 habla de esas deficiencias del MP4-28, un monoplaza que, por otro lado, terminó siendo el mejor de la parilla en las últimas carreras, no quiere obviar los problemas de fiabilidad que han tenido en la escudería de Woking. “Hemos tenido problemas de fiabilidad, pero cuando realmente lo miras, los problemas han llegado siempre los fines de semana”, señala Jenson, que lo que realmente le molesta es que esos percances sólo han aparecido en los momentos decisivos: “Hicimos 1.400 kilómetros en pruebas con jóvenes pilotos y no había ningún problema, por lo que, en ese sentido, creo que hemos tenido un poco de mala suerte”.
Otro momento difícil para el que será el líder del equipo británico en 2013 fue cuando no era capaz de comprender el rendimiento de los Pirelli, allá por los meses de mayo y junio: “Probamos cosas nuevas, porque yo luchaba por conseguir temperatura en los neumáticos más que la mayoría de los pilotos, y no funcionó, porque terminaba por destruirlos como en el GP de Mónaco y el de Canadá (acabó 16º en ambas)”.
A pesar de la diferencia de rendimiento con su compañero en esa parte de la temporada, Button es capaz de sacar algo positivo de ello: “Lewis tuvo una buena carrera en Canadá (ganó) y yo la tuve mala, y eso era bueno para el resto del año de alguna manera porque teníamos los dos extremos para que pudiéramos mirar los datos, entrar en el simulador, cambiar el balance del monoplaza y averiguar por qué yo tenía tanta degradación y Lewis no”. “Fue un hecho muy útil para saber lo que puedes y no puedes hacer con los neumáticos, porque es diferente a lo que normalmente sueles pensar”, concluye Jenson, que en 2013 tendrá ante sí uno de los mayores retos de su carrera al quedarse como líder de uno de los equipos que optarán a todo.