Alcohol aumenta riesgo de cáncer hepático en pacientes con cirrosis y VHB
Reuters
Un estudio de Taiwán revela que el consumo excesivo de alcohol aumenta significativamente el riesgo de desarrollar hepatoma en pacientes con cirrosis infectados por el virus de la hepatitis B (VHB).
Pero uno de los coautores, el doctor Sien-Sing Yang, dijo por correo electrónico que el tratamiento con antivirales análogos de los nucleótidos disminuye ese riesgo significativamente.
En Journal of Hepatology, el equipo de Yang, del Hospital General de Catay, Taipei, escribe que ya se conoce la interacción entre la infección por el VHB, el alcohol y los resultados clínicos, no así cómo el alcohol influye en la aparición del carcinoma hepatocelular (CHC).
El equipo siguió a 966 pacientes con cirrosis, incluidos 202 con enfermedad hepática de origen alcohólico, 132 con enfermedad hepática alcohólica e infección por VHB, y 632 infectados con VHB únicamente.
Todos los pacientes con enfermedad hepática alcohólica eran "alcohólicos" (habían bebido más de 80 gr de etanol diario durante por lo menos cinco años, según definieron los autores).
El resultado primario (aparición del CHC en los seis meses de seguimiento) se registró en el 28,8 por ciento de los alcohólicos con VHB, el 5,8 por ciento del grupo con VHB únicamente y el 10,4 por ciento del grupo alcohólico, sin VHB.
Las incidencias anuales respectivas fueron del 9,9 por ciento, 4,1 por ciento y 2,1 por ciento, y las tasas acumuladas a 10 años fueron 52,8 por ciento, 39,8 por ciento y 25,6 por ciento.
Los pacientes alcohólicos con VHB desarrollaron CHC antes que en los otros dos grupos (43,9 versus 47,8 y 49,3 años). La incidencia acumulada de CHC fue más alta en los pacientes con una mayor carga inicial de ADN del VHB en sangre.
La terapia con análogos de los nucleótidos redujo la incidencia del CHC en los pacientes con cirrosis, infectados por el VHB y alcohólicos. La incidencia acumulada del CHC a nueve años fue el doble en los pacientes con alta carga de ADN del VHB que no recibieron ese tratamiento, comparado con los que recibieron el tratamiento (80 versus 40 por ciento).
"La sinergia entre el alcoholismo y la infección por el VHB agrava la enfermedad hepática y adelanta la aparición del CHC. Por lo tanto, a los pacientes alcohólicos con cirrosis que están infectados por el VHB se les debería realizar la pesquisa del CHC", además de alentarlos a abandonar el alcohol.
Los autores agregan que "habría que considerar la terapia antiviral agresiva con análogos de nucleótidos".
Un estudio de Taiwán revela que el consumo excesivo de alcohol aumenta significativamente el riesgo de desarrollar hepatoma en pacientes con cirrosis infectados por el virus de la hepatitis B (VHB).
Pero uno de los coautores, el doctor Sien-Sing Yang, dijo por correo electrónico que el tratamiento con antivirales análogos de los nucleótidos disminuye ese riesgo significativamente.
En Journal of Hepatology, el equipo de Yang, del Hospital General de Catay, Taipei, escribe que ya se conoce la interacción entre la infección por el VHB, el alcohol y los resultados clínicos, no así cómo el alcohol influye en la aparición del carcinoma hepatocelular (CHC).
El equipo siguió a 966 pacientes con cirrosis, incluidos 202 con enfermedad hepática de origen alcohólico, 132 con enfermedad hepática alcohólica e infección por VHB, y 632 infectados con VHB únicamente.
Todos los pacientes con enfermedad hepática alcohólica eran "alcohólicos" (habían bebido más de 80 gr de etanol diario durante por lo menos cinco años, según definieron los autores).
El resultado primario (aparición del CHC en los seis meses de seguimiento) se registró en el 28,8 por ciento de los alcohólicos con VHB, el 5,8 por ciento del grupo con VHB únicamente y el 10,4 por ciento del grupo alcohólico, sin VHB.
Las incidencias anuales respectivas fueron del 9,9 por ciento, 4,1 por ciento y 2,1 por ciento, y las tasas acumuladas a 10 años fueron 52,8 por ciento, 39,8 por ciento y 25,6 por ciento.
Los pacientes alcohólicos con VHB desarrollaron CHC antes que en los otros dos grupos (43,9 versus 47,8 y 49,3 años). La incidencia acumulada de CHC fue más alta en los pacientes con una mayor carga inicial de ADN del VHB en sangre.
La terapia con análogos de los nucleótidos redujo la incidencia del CHC en los pacientes con cirrosis, infectados por el VHB y alcohólicos. La incidencia acumulada del CHC a nueve años fue el doble en los pacientes con alta carga de ADN del VHB que no recibieron ese tratamiento, comparado con los que recibieron el tratamiento (80 versus 40 por ciento).
"La sinergia entre el alcoholismo y la infección por el VHB agrava la enfermedad hepática y adelanta la aparición del CHC. Por lo tanto, a los pacientes alcohólicos con cirrosis que están infectados por el VHB se les debería realizar la pesquisa del CHC", además de alentarlos a abandonar el alcohol.
Los autores agregan que "habría que considerar la terapia antiviral agresiva con análogos de nucleótidos".