Israel dice prefiere diplomacia, pero está listo para invadir Gaza
Gaza, Reuters
Israel bombardeó el lunes decenas de blancos en Gaza y dijo que aunque estaba preparado para escalar su ofensiva mediante el envío de tropas, prefería una solución diplomática que pusiera fin al lanzamiento de cohetes palestinos desde el enclave.
El mediador Egipto dijo que un acuerdo para acabar con los enfrentamientos podría estar cerca. El líder de Hamas afirmó que depende de Israel poner fin al nuevo conflicto que comenzó, pero el Estado judío ha indicado que sus ataques tienen como objetivo detener los lanzamientos.
Los ataques israelíes durante el sexto día de enfrentamientos elevó el número de palestinos muertos a 101, dijo el Ministerio de Salud palestino, controlado por Hamas, entre los que figuran 24 niños.
Funcionarios de hospitales en Gaza dijeron que más de la mitad de los muertos no eran combatientes. Tres civiles israelíes fallecieron el jueves en un ataque con cohetes.
Militantes en la Franja de Gaza dispararon 110 cohetes contra el sur de Israel el lunes, sin dejar lesionados, declaró la policía.
Por segundo día consecutivo, misiles israelíes impactaron un edificio en la ciudad de Gaza que albergaba a medios de comunicación internacionales. Dos personas murieron allí, una de ellas un militante de la Jihad Islámica.
El líder de Hamas en el exilio, Khaled Meshaal, dijo que era posible una tregua, pero que el grupo islamista -que controla la Franja de Gaza desde el 2007- no aceptaría las exigencias israelíes y que quería que Israel detuviera sus ataques primero y levantara su bloqueo del enclave.
"Quien haya comenzado la guerra debe terminarla", manifestó Meshaal en una conferencia de prensa en El Cairo, y agregó que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu -que enfrentará una elección en enero- había pedido una tregua, afirmación que fue negada por un funcionario judío de alto rango.
Meshaal dijo que Netanyahu temía las consecuencias domésticas de una "guerra terrestre" como la que lanzó Israel hace cuatro años: "Puede hacerlo, pero sabe que no será un picnic y que podría ser su muerte política y costarle las elecciones".
Por el lado israelí, el viceprimer ministro Moshe Yaalon dijo que "si hay tranquilidad en el sur y los cohetes y los misiles no se disparan a los ciudadanos de Israel, ni se producen ataques terroristas dirigidos desde la Franja de Gaza, no vamos a atacar".
Yaalon también dijo que Israel quería poner fin a la actividad guerrillera de Gaza en la vecina península del Sinaí.
Aunque un 84 por ciento de los israelíes respaldan el actual ataque contra Gaza, según un sondeo del periódico israelí Haaretz, sólo un 30 por ciento desea una invasión terrestre y un 19 por ciento desea que su Gobierno trabaje para asegurar un tregua pronto.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, viajará a Jerusalén y a la ciudad de Ramallah esta semana para dialogar con Netanyahu y con el presidente palestino Mahmoud Abbas, dijo su portavoz Martin Nesirky, quien agregó que no existen planes de una visita a Gaza.
DIPLOMACIA "PREFERIDA"
"Israel está preparado, ha tomado medidas y está listo para una incursión terrestre que enfrente severamente la maquinaria militar de Hamas", comentó a Reuters un alto funcionario cercano a Netanyahu.
"Preferiríamos ver una solución diplomática que garantice la paz para la población israelí en el sur. Si eso es posible, entonces ya no se necesitaría una operación terrestre. Si la diplomacia falla, podríamos no tener otra alternativa que enviar fuerzas terrestres", agregó.
Egipto, donde el recientemente electo presidente Mohamed Mursi tiene sus raíces en los Hermanos Musulmanes, vistos como mentores de Hamas, está actuando como mediador en la mayor prueba hasta al momento al tratado de paz de 1979 entre El Cairo e Israel desde la caída de Hosni Mubarak.
"Creo que estamos cerca, pero la naturaleza de este tipo de negociación (significa) que es muy difícil de predecir", declaró el primer ministro egipcio, Hisham Kandil -quien visitó Gaza el viernes en una muestra de apoyo a su gente- en una entrevista en El Cairo en la Cumbre de Inversión de Reuters en Oriente Medio.
Egipto ha dado asilo a líderes tanto de Hamas como de la Jihad Islámica, una facción armada más pequeña.
Medios israelíes dijeron que una delegación de ese país también se encontraba en El Cairo para las conversaciones sobre una tregua. Un portavoz del Gobierno Netanyahu declinó a comentar sobre el tema.
Ban arribó a El Cairo para conocer los esfuerzos de cese al fuego. Se espera que el ministro de Relaciones Exteriores de Egipto visite Gaza el martes con una delegación de ministros árabes.
MILES LLORAN A FAMILIA
Miles de personas salieron a las calles de Gaza para llorar a cuatro niños y cinco mujeres, nueve de las 11 víctimas que murieron debido a un ataque israelí que destruyó una casa de tres pisos el día anterior.
El hecho dio pie a más llamados internacionales para poner fin a seis días de hostilidades y podría poner a prueba el respaldo de Occidente a una ofensiva que Israel ha calificado como autodefensa tras años de ataques transfronterizos con cohetes.
Israel dijo que está investigando su ataque aéreo que provocó el derrumbe de la casa de la familia al-Dalu, donde los fallecidos abarcaban cuatro generaciones. Algunos medios israelíes publicaron que pudieron haber atacado la vivienda equivocada.
En escenas que recuerdan la ofensiva del invierno boreal del 2008-2009 en Gaza, tanques, artillería e infantería fueron desplegados en campamentos junto a la barrera fronteriza con el enclave palestino. Israel también ha autorizado el llamado a 75.000 reservistas militares.
El objetivo declarado de Israel es acabar con los arsenales de Gaza y forzar a Hamas a detener los lanzamientos de cohetes que han plagado las ciudades fronterizas israelíes durante años.
Hamas y otros grupos en Gaza son enemigos jurados del Estado judío, al que se niegan a reconocer y al que buscan erradicar, afirmando que todo el territorio israelí es de los palestinos por derecho.
Hamas ganó elecciones legislativas en los territorios palestinos en el 2006 pero un año más tarde, tras el colapso de un Gobierno de unidad dirigido por el presidente Mahmoud Abbas, el grupo islamista tomó el control de Gaza en una breve y sangrienta guerra civil con fuerzas leales a Abbas.
Israel bombardeó el lunes decenas de blancos en Gaza y dijo que aunque estaba preparado para escalar su ofensiva mediante el envío de tropas, prefería una solución diplomática que pusiera fin al lanzamiento de cohetes palestinos desde el enclave.
El mediador Egipto dijo que un acuerdo para acabar con los enfrentamientos podría estar cerca. El líder de Hamas afirmó que depende de Israel poner fin al nuevo conflicto que comenzó, pero el Estado judío ha indicado que sus ataques tienen como objetivo detener los lanzamientos.
Los ataques israelíes durante el sexto día de enfrentamientos elevó el número de palestinos muertos a 101, dijo el Ministerio de Salud palestino, controlado por Hamas, entre los que figuran 24 niños.
Funcionarios de hospitales en Gaza dijeron que más de la mitad de los muertos no eran combatientes. Tres civiles israelíes fallecieron el jueves en un ataque con cohetes.
Militantes en la Franja de Gaza dispararon 110 cohetes contra el sur de Israel el lunes, sin dejar lesionados, declaró la policía.
Por segundo día consecutivo, misiles israelíes impactaron un edificio en la ciudad de Gaza que albergaba a medios de comunicación internacionales. Dos personas murieron allí, una de ellas un militante de la Jihad Islámica.
El líder de Hamas en el exilio, Khaled Meshaal, dijo que era posible una tregua, pero que el grupo islamista -que controla la Franja de Gaza desde el 2007- no aceptaría las exigencias israelíes y que quería que Israel detuviera sus ataques primero y levantara su bloqueo del enclave.
"Quien haya comenzado la guerra debe terminarla", manifestó Meshaal en una conferencia de prensa en El Cairo, y agregó que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu -que enfrentará una elección en enero- había pedido una tregua, afirmación que fue negada por un funcionario judío de alto rango.
Meshaal dijo que Netanyahu temía las consecuencias domésticas de una "guerra terrestre" como la que lanzó Israel hace cuatro años: "Puede hacerlo, pero sabe que no será un picnic y que podría ser su muerte política y costarle las elecciones".
Por el lado israelí, el viceprimer ministro Moshe Yaalon dijo que "si hay tranquilidad en el sur y los cohetes y los misiles no se disparan a los ciudadanos de Israel, ni se producen ataques terroristas dirigidos desde la Franja de Gaza, no vamos a atacar".
Yaalon también dijo que Israel quería poner fin a la actividad guerrillera de Gaza en la vecina península del Sinaí.
Aunque un 84 por ciento de los israelíes respaldan el actual ataque contra Gaza, según un sondeo del periódico israelí Haaretz, sólo un 30 por ciento desea una invasión terrestre y un 19 por ciento desea que su Gobierno trabaje para asegurar un tregua pronto.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, viajará a Jerusalén y a la ciudad de Ramallah esta semana para dialogar con Netanyahu y con el presidente palestino Mahmoud Abbas, dijo su portavoz Martin Nesirky, quien agregó que no existen planes de una visita a Gaza.
DIPLOMACIA "PREFERIDA"
"Israel está preparado, ha tomado medidas y está listo para una incursión terrestre que enfrente severamente la maquinaria militar de Hamas", comentó a Reuters un alto funcionario cercano a Netanyahu.
"Preferiríamos ver una solución diplomática que garantice la paz para la población israelí en el sur. Si eso es posible, entonces ya no se necesitaría una operación terrestre. Si la diplomacia falla, podríamos no tener otra alternativa que enviar fuerzas terrestres", agregó.
Egipto, donde el recientemente electo presidente Mohamed Mursi tiene sus raíces en los Hermanos Musulmanes, vistos como mentores de Hamas, está actuando como mediador en la mayor prueba hasta al momento al tratado de paz de 1979 entre El Cairo e Israel desde la caída de Hosni Mubarak.
"Creo que estamos cerca, pero la naturaleza de este tipo de negociación (significa) que es muy difícil de predecir", declaró el primer ministro egipcio, Hisham Kandil -quien visitó Gaza el viernes en una muestra de apoyo a su gente- en una entrevista en El Cairo en la Cumbre de Inversión de Reuters en Oriente Medio.
Egipto ha dado asilo a líderes tanto de Hamas como de la Jihad Islámica, una facción armada más pequeña.
Medios israelíes dijeron que una delegación de ese país también se encontraba en El Cairo para las conversaciones sobre una tregua. Un portavoz del Gobierno Netanyahu declinó a comentar sobre el tema.
Ban arribó a El Cairo para conocer los esfuerzos de cese al fuego. Se espera que el ministro de Relaciones Exteriores de Egipto visite Gaza el martes con una delegación de ministros árabes.
MILES LLORAN A FAMILIA
Miles de personas salieron a las calles de Gaza para llorar a cuatro niños y cinco mujeres, nueve de las 11 víctimas que murieron debido a un ataque israelí que destruyó una casa de tres pisos el día anterior.
El hecho dio pie a más llamados internacionales para poner fin a seis días de hostilidades y podría poner a prueba el respaldo de Occidente a una ofensiva que Israel ha calificado como autodefensa tras años de ataques transfronterizos con cohetes.
Israel dijo que está investigando su ataque aéreo que provocó el derrumbe de la casa de la familia al-Dalu, donde los fallecidos abarcaban cuatro generaciones. Algunos medios israelíes publicaron que pudieron haber atacado la vivienda equivocada.
En escenas que recuerdan la ofensiva del invierno boreal del 2008-2009 en Gaza, tanques, artillería e infantería fueron desplegados en campamentos junto a la barrera fronteriza con el enclave palestino. Israel también ha autorizado el llamado a 75.000 reservistas militares.
El objetivo declarado de Israel es acabar con los arsenales de Gaza y forzar a Hamas a detener los lanzamientos de cohetes que han plagado las ciudades fronterizas israelíes durante años.
Hamas y otros grupos en Gaza son enemigos jurados del Estado judío, al que se niegan a reconocer y al que buscan erradicar, afirmando que todo el territorio israelí es de los palestinos por derecho.
Hamas ganó elecciones legislativas en los territorios palestinos en el 2006 pero un año más tarde, tras el colapso de un Gobierno de unidad dirigido por el presidente Mahmoud Abbas, el grupo islamista tomó el control de Gaza en una breve y sangrienta guerra civil con fuerzas leales a Abbas.