China denuncia que el Dalai Lama "glorifica" las inmolaciones en el Tíbet
Madrid, EP
El Gobierno de China ha asegurado este lunes que el líder espiritual del Tíbet, el Dalai Lama, "glorifica" las inmolaciones de manifestantes tibetanos después de que el dirigente en el exilio denunciase que Pekín no se preocupa por las causas de este tipo de protestas.
Desde principios de 2011, al menos 70 personas se han prendido fuego en Tíbet y en otras regiones de China con amplia presencia de tibetanos en protesta por la falta de libertades en la región autónoma. Pekín asegura que defiende la libertad de culto y que, gracias a las inversiones, la zona ha conseguido un desarrollo del que nunca había disfrutado.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hong Lei, ha señalado que "el Dalai no solo no los condena, sino que glorifica estos actos, que van en contra de la ley y de los principios religiosos", según la agencia Xinhua.
El portavoz ha denunciado que el Dalai Lama se ha aliado con el ala derecha de Japón para poder explotar las últimas disputas territoriales entre Pekín y Tokio en el mar de China Oriental, alrededor de las islas Senkaku, como se conocen en Japón, o Diayou, en China.
Hong ha criticado que el líder espiritual tibetano ha utilizado en su visita de este lunes a Japón la palabra Senkaku para referirse al contencioso que mantienen ambos países.
El Dalai Lama había pedido anteriormente que el Gobierno chino investigue las causas de las inmolaciones. "China no los está investigando e intenta acabar con los incidentes criticándolos", ha asegurado, según la agencia Kiodo.
China invadió en 1950 el Tíbet tras el triunfo el año anterior de la Revolución de Mao Zedong. El Dalai Lama huyó de la región en 1959 tras el fracaso de un alzamiento popular contra Pekín.
El Gobierno de China ha asegurado este lunes que el líder espiritual del Tíbet, el Dalai Lama, "glorifica" las inmolaciones de manifestantes tibetanos después de que el dirigente en el exilio denunciase que Pekín no se preocupa por las causas de este tipo de protestas.
Desde principios de 2011, al menos 70 personas se han prendido fuego en Tíbet y en otras regiones de China con amplia presencia de tibetanos en protesta por la falta de libertades en la región autónoma. Pekín asegura que defiende la libertad de culto y que, gracias a las inversiones, la zona ha conseguido un desarrollo del que nunca había disfrutado.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hong Lei, ha señalado que "el Dalai no solo no los condena, sino que glorifica estos actos, que van en contra de la ley y de los principios religiosos", según la agencia Xinhua.
El portavoz ha denunciado que el Dalai Lama se ha aliado con el ala derecha de Japón para poder explotar las últimas disputas territoriales entre Pekín y Tokio en el mar de China Oriental, alrededor de las islas Senkaku, como se conocen en Japón, o Diayou, en China.
Hong ha criticado que el líder espiritual tibetano ha utilizado en su visita de este lunes a Japón la palabra Senkaku para referirse al contencioso que mantienen ambos países.
El Dalai Lama había pedido anteriormente que el Gobierno chino investigue las causas de las inmolaciones. "China no los está investigando e intenta acabar con los incidentes criticándolos", ha asegurado, según la agencia Kiodo.
China invadió en 1950 el Tíbet tras el triunfo el año anterior de la Revolución de Mao Zedong. El Dalai Lama huyó de la región en 1959 tras el fracaso de un alzamiento popular contra Pekín.