Zona euro lanza fondo rescate, España no necesita ayuda
Luxemburgo, Reuters
Los ministros de Finanzas de la zona euro lanzaron su fondo de rescate permanente de 500.000 millones de euros el lunes pero dijeron que España, que se espera sea el primer país en utilizarlo, está dando pasos para poner a punto su economía y que al menos por ahora no necesita un rescate.
En la llegada a una reunión en Luxemburgo también pactada para discutir sobre la situación de Grecia y diferencias sobre cómo recapitalizar los tambaleantes bancos europeos, el ministro de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schaeuble, dijo que Madrid había dejado en claro que no quería asistencia.
"España no necesita un programa de ayuda (...) está haciendo todo lo necesario en política fiscal y reformas estructurales", expresó Schaeuble, reiterando un argumento que ha planteado repetidamente en las últimas semanas.
"España tiene un problema con sus bancos como consecuencia de la burbuja inmobiliaria de los últimos años. Es por eso que España tiene ayuda (de la UE) con la recapitalización bancaria", agregó.
El ministro de Finanzas de Luxemburgo, Luc Frieden, siguió la misma línea que su colega alemán pero añadió que si España pidiera un rescate por encima de los hasta 100.000 millones de euros ya destinados a la recapitalización bancaria, sería examinado.
Además de las necesidades financieras de España, la reunión del lunes también sería destinada a discutir las metas de presupuesto presentadas por Madrid el mes pasado, los cuales aún deben ser refrendadas por la Comisión Europea.
La comisión publicará su pronóstico económico semestral el 7 de noviembre y algunas autoridades han dicho que puede concluir que España no cumplirá los objetivos de su presupuesto, que se basa en una contracción de la economía de solo un 0,5 por ciento para el año próximo.
El pronóstico del FMI de una contracción de la economía española del 1,2 por ciento podría ser revisado todavía más a la baja el martes.
La evidencia de que España no cumplirá sus metas seguramente perjudicará la confianza de los mercados y aumentarán los costos crediticios de Madrid, que actualmente rondan un manejable 5,75 por ciento. Rendimientos a 10 años por sobre el 6 por ciento en un período sostenido podría forzar un pedido de ayuda.
"Creo que debemos hacer frente a la solicitud cuando se produzca, pero por ahora el Gobierno español está emprendiendo reformas que van por el camino correcto", dijo Frieden.
Los ministros de Finanzas de la zona euro acordaron en junio otorgar a los bancos españoles un rescate de hasta 100.000 millones de euros.
Una auditoría independiente ha mostrado que los bancos españoles necesitan unos 40.000 millones de euros, menos que lo previsto originalmente, un resultado que la ministra de Finanzas austriaca, Maria Fekter, dijo que era positivo.
En los mercados financieros, muchos están convencidos de que España no será capaz de cubrir sus necesidades soberanas de financiación a un costo razonable sin el apoyo de la eurozona y el Banco Central Europeo, especialmente tras conocerse que varias regiones españolas ya han solicitado ayuda a Madrid.
SIN CAMBIOS SOBRE GRECIA
Al igual que sobre España, los ministros también tratarán la situación de Grecia, donde continúan las intensas negociaciones entre el Gobierno y la troika conformada por la UE, el FMI y el BCE sobre los recortes presupuestarios para el 2013 y el 2014.
Sin embargo, el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, dijo que los avances sobre Grecia, retrasada en su segundo programa de rescate, no se producirían hasta que la troika termine un informe sobre la situación de la deuda del país.
Ese informe estaría listo para comienzos de noviembre.
"No creo que tengamos alguna decisión importante sobre Grecia", dijo Juncker. Al preguntársele si se podría esperar pronto una decisión sobre Grecia, Juncker respondió: "La esperanza es lo último que se pierde"
La reunión del lunes también servirá para discutir los planes para que al BCE se le otorgue la responsabilidad de supervisar a todos los bancos de la zona euro y la idea de crear un presupuesto único para todos los países del bloque monetario, cuestiones que se abordarán en la cumbre europea del 18 y 19 de octubre en Bruselas.
Sin embargo, es probable que quede de lado uno de los asuntos más complicados: si el mecanismo de rescate permanente MEDE debería poder recapitalizar directamente a los bancos y cómo funcionaría en la práctica.
En una cumbre el 29 de junio líderes europeos acordaron que el MEDE debería poder inyectar capital en los bancos directamente una vez que un mecanismo de supervisión bajo el mando del BCE esté en funcionamiento, posiblemente a partir de enero del año que viene.
Pero Holanda, Finlandia y Alemania no coinciden con la manera de interpretar el acuerdo del 29 de junio al alegar que esa recapitalización bancaria directa solo debería aplicarse ante problemas futuros y no al "legado" de deudas bancarias como las que hay en Irlanda y España.
Bajo tales circunstancias, la recapitalización directa no ayudaría a Madrid ni a Dublín, ya que no podría romper el vínculo entre Gobiernos y bancos endeudados.
Líderes de la UE tendrán que volver a evaluar el acuerdo del 29 de junio cuando se reúnan en octubre. La mayoría de los diplomáticos esperan que se mantenga la interpretación original.
Con los países de la zona euro involucrados en un largo proceso de tratar de definir la mejor manera de poner a punto la unión monetaria que los liga, las reuniones de los ministros de finanzas incluyen discusiones cada vez más amplias en lugar de toma de decisiones específicas.
No obstante, la única acción efectiva que se llevará a cabo el lunes consiste en la puesta en marcha del MEDE, dotado de 500.000 millones de euros y que servirá como mecanismo de rescate para los 17 países del bloque monetario.
El MEDE, que sustituye al temporal Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), será usado para prestar fondos a los países con problemas financieros, a cambio de estrictas reformas fiscales y estructurales que buscan encarrilar nuevamente a las economías que perdieron la confianza de los inversores.
La capacidad de préstamo del fondo se basará en un capital aportado de 80.000 millones de euros y un capital accesible de 620.000 millones de euros, contra el cual el MEDE se endeudará en el mercado para prestar a los gobiernos que no pueden financiarse en los mercados como antes.
El fondo alcanzará gradualmente su capacidad plena hacia el 2014.
Los ministros de Finanzas de la zona euro lanzaron su fondo de rescate permanente de 500.000 millones de euros el lunes pero dijeron que España, que se espera sea el primer país en utilizarlo, está dando pasos para poner a punto su economía y que al menos por ahora no necesita un rescate.
En la llegada a una reunión en Luxemburgo también pactada para discutir sobre la situación de Grecia y diferencias sobre cómo recapitalizar los tambaleantes bancos europeos, el ministro de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schaeuble, dijo que Madrid había dejado en claro que no quería asistencia.
"España no necesita un programa de ayuda (...) está haciendo todo lo necesario en política fiscal y reformas estructurales", expresó Schaeuble, reiterando un argumento que ha planteado repetidamente en las últimas semanas.
"España tiene un problema con sus bancos como consecuencia de la burbuja inmobiliaria de los últimos años. Es por eso que España tiene ayuda (de la UE) con la recapitalización bancaria", agregó.
El ministro de Finanzas de Luxemburgo, Luc Frieden, siguió la misma línea que su colega alemán pero añadió que si España pidiera un rescate por encima de los hasta 100.000 millones de euros ya destinados a la recapitalización bancaria, sería examinado.
Además de las necesidades financieras de España, la reunión del lunes también sería destinada a discutir las metas de presupuesto presentadas por Madrid el mes pasado, los cuales aún deben ser refrendadas por la Comisión Europea.
La comisión publicará su pronóstico económico semestral el 7 de noviembre y algunas autoridades han dicho que puede concluir que España no cumplirá los objetivos de su presupuesto, que se basa en una contracción de la economía de solo un 0,5 por ciento para el año próximo.
El pronóstico del FMI de una contracción de la economía española del 1,2 por ciento podría ser revisado todavía más a la baja el martes.
La evidencia de que España no cumplirá sus metas seguramente perjudicará la confianza de los mercados y aumentarán los costos crediticios de Madrid, que actualmente rondan un manejable 5,75 por ciento. Rendimientos a 10 años por sobre el 6 por ciento en un período sostenido podría forzar un pedido de ayuda.
"Creo que debemos hacer frente a la solicitud cuando se produzca, pero por ahora el Gobierno español está emprendiendo reformas que van por el camino correcto", dijo Frieden.
Los ministros de Finanzas de la zona euro acordaron en junio otorgar a los bancos españoles un rescate de hasta 100.000 millones de euros.
Una auditoría independiente ha mostrado que los bancos españoles necesitan unos 40.000 millones de euros, menos que lo previsto originalmente, un resultado que la ministra de Finanzas austriaca, Maria Fekter, dijo que era positivo.
En los mercados financieros, muchos están convencidos de que España no será capaz de cubrir sus necesidades soberanas de financiación a un costo razonable sin el apoyo de la eurozona y el Banco Central Europeo, especialmente tras conocerse que varias regiones españolas ya han solicitado ayuda a Madrid.
SIN CAMBIOS SOBRE GRECIA
Al igual que sobre España, los ministros también tratarán la situación de Grecia, donde continúan las intensas negociaciones entre el Gobierno y la troika conformada por la UE, el FMI y el BCE sobre los recortes presupuestarios para el 2013 y el 2014.
Sin embargo, el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, dijo que los avances sobre Grecia, retrasada en su segundo programa de rescate, no se producirían hasta que la troika termine un informe sobre la situación de la deuda del país.
Ese informe estaría listo para comienzos de noviembre.
"No creo que tengamos alguna decisión importante sobre Grecia", dijo Juncker. Al preguntársele si se podría esperar pronto una decisión sobre Grecia, Juncker respondió: "La esperanza es lo último que se pierde"
La reunión del lunes también servirá para discutir los planes para que al BCE se le otorgue la responsabilidad de supervisar a todos los bancos de la zona euro y la idea de crear un presupuesto único para todos los países del bloque monetario, cuestiones que se abordarán en la cumbre europea del 18 y 19 de octubre en Bruselas.
Sin embargo, es probable que quede de lado uno de los asuntos más complicados: si el mecanismo de rescate permanente MEDE debería poder recapitalizar directamente a los bancos y cómo funcionaría en la práctica.
En una cumbre el 29 de junio líderes europeos acordaron que el MEDE debería poder inyectar capital en los bancos directamente una vez que un mecanismo de supervisión bajo el mando del BCE esté en funcionamiento, posiblemente a partir de enero del año que viene.
Pero Holanda, Finlandia y Alemania no coinciden con la manera de interpretar el acuerdo del 29 de junio al alegar que esa recapitalización bancaria directa solo debería aplicarse ante problemas futuros y no al "legado" de deudas bancarias como las que hay en Irlanda y España.
Bajo tales circunstancias, la recapitalización directa no ayudaría a Madrid ni a Dublín, ya que no podría romper el vínculo entre Gobiernos y bancos endeudados.
Líderes de la UE tendrán que volver a evaluar el acuerdo del 29 de junio cuando se reúnan en octubre. La mayoría de los diplomáticos esperan que se mantenga la interpretación original.
Con los países de la zona euro involucrados en un largo proceso de tratar de definir la mejor manera de poner a punto la unión monetaria que los liga, las reuniones de los ministros de finanzas incluyen discusiones cada vez más amplias en lugar de toma de decisiones específicas.
No obstante, la única acción efectiva que se llevará a cabo el lunes consiste en la puesta en marcha del MEDE, dotado de 500.000 millones de euros y que servirá como mecanismo de rescate para los 17 países del bloque monetario.
El MEDE, que sustituye al temporal Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), será usado para prestar fondos a los países con problemas financieros, a cambio de estrictas reformas fiscales y estructurales que buscan encarrilar nuevamente a las economías que perdieron la confianza de los inversores.
La capacidad de préstamo del fondo se basará en un capital aportado de 80.000 millones de euros y un capital accesible de 620.000 millones de euros, contra el cual el MEDE se endeudará en el mercado para prestar a los gobiernos que no pueden financiarse en los mercados como antes.
El fondo alcanzará gradualmente su capacidad plena hacia el 2014.