Los islandeses dan el 'sí' a la reforma constitucional
Madrid, EP
Los resultados definitivos del referéndum han confirmado el 'sí' de los islandeses al proyecto de constitución elaborado por el Consejo Constitucional y a otras seis cuestiones, incluidas algunas de relevancia como la nacionalización de los recursos naturales o que en lo sucesivo haya una única circunscripción electoral para elecciones nacionales.
Tras la quiebra del Estado islandés de 2008 se creó este Consejo Constitucional, integrado por 25 ciudadanos comunes de distintas partes del país, que ha elaborado una nueva constitución que supone la renovación completa del sistema político islandés. El nuevo texto ha sido elaborado a partir de las sugerencias realizadas por la propia ciudadanía a través de una página web.
En el referéndum del sábado, el 66,3 por ciento de los islandeses respondió 'sí' a la pregunta "¿Quiere que las propuestas del Consejo Constitucional sean la base para un nuevo proyecto de Constitución?", frente al 33,7 por ciento que lo rechazó, informa la cadena pública de televisión RUV. Ahora el Consejo Constitucional remitirá el proyecto al Althingi o Parlamento islandés para su aprobación.
"Estoy muy orgullosa de que la gente haya enviado un mensaje tan claro al Parlamento", ha afirmado la primera ministra, Jóhanna Sigurdardóttir. "Así se han sometido a votación cuestiones importantes que estaban en el debate público desde hace mucho tiempo", ha añadido.
La participación fue de 115.814 votantes, es decir, el 48,9 por ciento del censo total de 236.941 islandeses con derecho a voto, lo que ha propiciado que los detractores de las reformas hayan intentado restar legitimidad a la votación.
"La participación ha sido baja, lo que pone en duda que la gente quiera realmente una nueva constitución", ha declarado la diputada del Partido de la Independencia Birgir Ármansson, contraria a las reformas.
En el referéndum se preguntaba en segundo lugar por la nacionalización de los recursos naturales. En este caso, el 82,5 por ciento apoyó la propuesta y el 17,5 la rechazó.
La tercera pregunta era la relativa a la institucionalización a nivel de la Carta Magna de la relación entre el Estado y la Iglesia Luterana Evangélica, religión oficial según la vigente Constitución. Ante la pregunta "¿Quiere que en la Constitución se establezca una iglesia (nacional) en Islandia?" el 57,5 por ciento respondió que sí, y el 42,5 por ciento, que no.
Esta ha sido la única de las seis preguntas en las que se ha impuesto la legislación actualmente vigente frente a las reformas propuestas por el Consejo Constitucional.
En cuarto lugar se preguntaba por la posibilidad de incluir listas abiertas en las elecciones, es decir, que se pueda optar en los comicios por votar a individuos, ya vayan en listas de partidos o sean independientes, en lugar de a candidaturas cerradas. El 77,9 por ciento apoyó las listas abiertas y el 22,1 por ciento las rechazó.
La siguiente pregunta interrogaba a los islandeses sobre si se debe incluir en la Constitución que "los votos de todas las partes del país valgan lo mismo", es decir, que se establezca una circunscripción única. El 65,5 por ciento dijo 'sí' y el 34,5, 'no'.
La sexta y última pregunta trata sobre la iniciativa legislativa popular, aunque no se concreta el porcentaje de firmas necesario. El 72,8 respaldó la propuesta y el 27,2 por ciento la rechazó.
Los resultados definitivos del referéndum han confirmado el 'sí' de los islandeses al proyecto de constitución elaborado por el Consejo Constitucional y a otras seis cuestiones, incluidas algunas de relevancia como la nacionalización de los recursos naturales o que en lo sucesivo haya una única circunscripción electoral para elecciones nacionales.
Tras la quiebra del Estado islandés de 2008 se creó este Consejo Constitucional, integrado por 25 ciudadanos comunes de distintas partes del país, que ha elaborado una nueva constitución que supone la renovación completa del sistema político islandés. El nuevo texto ha sido elaborado a partir de las sugerencias realizadas por la propia ciudadanía a través de una página web.
En el referéndum del sábado, el 66,3 por ciento de los islandeses respondió 'sí' a la pregunta "¿Quiere que las propuestas del Consejo Constitucional sean la base para un nuevo proyecto de Constitución?", frente al 33,7 por ciento que lo rechazó, informa la cadena pública de televisión RUV. Ahora el Consejo Constitucional remitirá el proyecto al Althingi o Parlamento islandés para su aprobación.
"Estoy muy orgullosa de que la gente haya enviado un mensaje tan claro al Parlamento", ha afirmado la primera ministra, Jóhanna Sigurdardóttir. "Así se han sometido a votación cuestiones importantes que estaban en el debate público desde hace mucho tiempo", ha añadido.
La participación fue de 115.814 votantes, es decir, el 48,9 por ciento del censo total de 236.941 islandeses con derecho a voto, lo que ha propiciado que los detractores de las reformas hayan intentado restar legitimidad a la votación.
"La participación ha sido baja, lo que pone en duda que la gente quiera realmente una nueva constitución", ha declarado la diputada del Partido de la Independencia Birgir Ármansson, contraria a las reformas.
En el referéndum se preguntaba en segundo lugar por la nacionalización de los recursos naturales. En este caso, el 82,5 por ciento apoyó la propuesta y el 17,5 la rechazó.
La tercera pregunta era la relativa a la institucionalización a nivel de la Carta Magna de la relación entre el Estado y la Iglesia Luterana Evangélica, religión oficial según la vigente Constitución. Ante la pregunta "¿Quiere que en la Constitución se establezca una iglesia (nacional) en Islandia?" el 57,5 por ciento respondió que sí, y el 42,5 por ciento, que no.
Esta ha sido la única de las seis preguntas en las que se ha impuesto la legislación actualmente vigente frente a las reformas propuestas por el Consejo Constitucional.
En cuarto lugar se preguntaba por la posibilidad de incluir listas abiertas en las elecciones, es decir, que se pueda optar en los comicios por votar a individuos, ya vayan en listas de partidos o sean independientes, en lugar de a candidaturas cerradas. El 77,9 por ciento apoyó las listas abiertas y el 22,1 por ciento las rechazó.
La siguiente pregunta interrogaba a los islandeses sobre si se debe incluir en la Constitución que "los votos de todas las partes del país valgan lo mismo", es decir, que se establezca una circunscripción única. El 65,5 por ciento dijo 'sí' y el 34,5, 'no'.
La sexta y última pregunta trata sobre la iniciativa legislativa popular, aunque no se concreta el porcentaje de firmas necesario. El 72,8 respaldó la propuesta y el 27,2 por ciento la rechazó.
