La crisis del rial desata protestas y escaramuzas con la policía en Teherán
Teherán, AFP
La policía iraní intervino este miércoles en Teherán, según testigos, para detener a revendedores ilegales de divisas acusados de haber fomentado la caída vertiginosa de la cotización del rial.
Cientos de policías antidisturbios se desplegaron en el barrio de Ferdosi, en el centro de la capital, para detener a revendedores ilegales de divisas y ordenaron el cierre de todos los comercios del barrio.
El rial iraní registró el martes una caída histórica frente al dólar. El miércoles a media jornada la moneda nacional parecía estable en torno a los 34.000 riales por un dólar en comparación con los 36.000 del martes por la tarde y los 22.000 de hace ocho días. Pero las operaciones eran prácticamente inexistentes.
El martes por la noche, el ministro de Economía, Shamsedin Hoseini, había anunciado que las autoridades iban a intervenir para "detener" el mercado negro reforzando el centro de cambio oficial.
El miércoles, en el barrio de Ferdosi, varias personas fueron detenidas y algunos contenedores de basura, incendiados.
Unos hombres lanzaron piedras hacia las fuerzas de seguridad y contra un vehículo policial antes de darse a la fuga, contaron testigos.
Un agente de cambio oficial admitió ante la AFP haber cerrado "debido a la redada de la policía para arrestar a los revendedores ilegales".
Además, la mayoría de las tiendas del gran bazar de Teherán estaban cerradas debido a la incertidumbre que se cierne sobre la moneda. "Hemos cerrado porque no sabemos lo que va a pasar" con el dólar, afirmó un comerciante.
Irán está sometido, a causa de su polémico programa nuclear, a una serie de sanciones de la ONU, inclusive contra petroleras y bancos, impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea (UE). El objetivo es privar al país de recursos petroleros para obligarlo a poner fin a algunas de sus actividades nucleares.
El guía supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, afirmó este miércoles que Irán no cederá ante las presiones económicas.
"El objetivo de las presiones contra el pueblo iraní es que ceda (sobre su proyecto nuclear), pero no cederá nunca. Por eso el enemigo está furioso", declaró Jamenei durante un discurso, informó la agencia ISNA.
La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, estimó este miércoles que el gobierno iraní era responsable de sus actos.
"Creo que el gobierno de Irán es responsable de lo que pasa dentro de Irán y es quien debe rendir cuentas", dijo Clinton.
El martes, el jefe de la policía iraní, general Esmail Ahmadi Moghadam, anunció la creación de un grupo para impedir el derrumbe de la moneda y luchar contra "aquellos que perturban el mercado de divisas".
"Según la evaluación del Banco Central, la gente guarda en sus casas una gran cantidad de divisas y de oro, lo que tiene un efecto negativo sobre la economía", añadió.
"Desgraciadamente, una parte de las personas piensa que su capital se va a desplomar (debido a la caída de la moneda) y se abalanza sobre los mercados de divisas y de oro, lo que aumenta la demanda y los precios", añadió.
Para el presidente Mahmud Ahmadinejad la caída de la moneda no se debe a la situación económica dado que el país dispone de suficientes divisas.
"No hay ningún motivo económico para estas fluctuaciones", declaró el martes.
"Es una guerra psicológica (...) Todo el mundo debe ayudar al gobierno. Las sanciones van dirigidas contra el pueblo. Ellos (los occidentales) mienten cuando dicen que constituyen una presión sobre el gobierno", sostuvo.
Policías antidisturbios iraníes junto a un contenedor de basura incendiado por manifestantes cerca del principal bazar de Teherán, este miércoles, cuando la crisis del rial desató las protestas y los enfrentamientos contra la policía de los enfadados ciudadanos.
El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, habla durante una rueda de prensa que ofreció el martes 2 de octubre en Teherán, donde este miércoles hubo protestas y disturbios con la policía en la zona céntrica de la ciudad donde se hallan las casas de cambio de divisas.
La policía iraní intervino este miércoles en Teherán, según testigos, para detener a revendedores ilegales de divisas acusados de haber fomentado la caída vertiginosa de la cotización del rial.
Cientos de policías antidisturbios se desplegaron en el barrio de Ferdosi, en el centro de la capital, para detener a revendedores ilegales de divisas y ordenaron el cierre de todos los comercios del barrio.
El rial iraní registró el martes una caída histórica frente al dólar. El miércoles a media jornada la moneda nacional parecía estable en torno a los 34.000 riales por un dólar en comparación con los 36.000 del martes por la tarde y los 22.000 de hace ocho días. Pero las operaciones eran prácticamente inexistentes.
El martes por la noche, el ministro de Economía, Shamsedin Hoseini, había anunciado que las autoridades iban a intervenir para "detener" el mercado negro reforzando el centro de cambio oficial.
El miércoles, en el barrio de Ferdosi, varias personas fueron detenidas y algunos contenedores de basura, incendiados.
Unos hombres lanzaron piedras hacia las fuerzas de seguridad y contra un vehículo policial antes de darse a la fuga, contaron testigos.
Un agente de cambio oficial admitió ante la AFP haber cerrado "debido a la redada de la policía para arrestar a los revendedores ilegales".
Además, la mayoría de las tiendas del gran bazar de Teherán estaban cerradas debido a la incertidumbre que se cierne sobre la moneda. "Hemos cerrado porque no sabemos lo que va a pasar" con el dólar, afirmó un comerciante.
Irán está sometido, a causa de su polémico programa nuclear, a una serie de sanciones de la ONU, inclusive contra petroleras y bancos, impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea (UE). El objetivo es privar al país de recursos petroleros para obligarlo a poner fin a algunas de sus actividades nucleares.
El guía supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, afirmó este miércoles que Irán no cederá ante las presiones económicas.
"El objetivo de las presiones contra el pueblo iraní es que ceda (sobre su proyecto nuclear), pero no cederá nunca. Por eso el enemigo está furioso", declaró Jamenei durante un discurso, informó la agencia ISNA.
La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, estimó este miércoles que el gobierno iraní era responsable de sus actos.
"Creo que el gobierno de Irán es responsable de lo que pasa dentro de Irán y es quien debe rendir cuentas", dijo Clinton.
El martes, el jefe de la policía iraní, general Esmail Ahmadi Moghadam, anunció la creación de un grupo para impedir el derrumbe de la moneda y luchar contra "aquellos que perturban el mercado de divisas".
"Según la evaluación del Banco Central, la gente guarda en sus casas una gran cantidad de divisas y de oro, lo que tiene un efecto negativo sobre la economía", añadió.
"Desgraciadamente, una parte de las personas piensa que su capital se va a desplomar (debido a la caída de la moneda) y se abalanza sobre los mercados de divisas y de oro, lo que aumenta la demanda y los precios", añadió.
Para el presidente Mahmud Ahmadinejad la caída de la moneda no se debe a la situación económica dado que el país dispone de suficientes divisas.
"No hay ningún motivo económico para estas fluctuaciones", declaró el martes.
"Es una guerra psicológica (...) Todo el mundo debe ayudar al gobierno. Las sanciones van dirigidas contra el pueblo. Ellos (los occidentales) mienten cuando dicen que constituyen una presión sobre el gobierno", sostuvo.
Policías antidisturbios iraníes junto a un contenedor de basura incendiado por manifestantes cerca del principal bazar de Teherán, este miércoles, cuando la crisis del rial desató las protestas y los enfrentamientos contra la policía de los enfadados ciudadanos.
El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, habla durante una rueda de prensa que ofreció el martes 2 de octubre en Teherán, donde este miércoles hubo protestas y disturbios con la policía en la zona céntrica de la ciudad donde se hallan las casas de cambio de divisas.