El Pentágono pone a punto sus reglas de actuación en caso de ciberataques
Washington, AFP
El Pentágono estadounidense finaliza sus reglas de actuación para responder a los ciberataques susceptibles de provocar daños materiales importantes, anunció esta semana el jefe del Pentágono, Leon Panetta.
"Las nuevas reglas precisan que el Departamento de Defensa tendría la responsabilidad no solamente de defender su red, sino también de estar dispuesto a defender el país y los intereses nacionales contra un ataque", declaró Panetta en Nueva York, ante una asamblea de hombres de negocio, según el texto de su discurso comunicado a la AFP.
"No triunfaremos en impedir un ciberataque simplemente con defensas mejoradas. Si detectamos una amenaza inminente de ataque que provoque importantes destrucciones físicas o la muerte de ciudadanos estadounidenses, debemos tener la posibilidad de reaccionar para defender el país si el presidente así lo ordena", dijo Panetta.
El Pentágono ha desarrollado la "capacidad de realizar operaciones eficaces para contrarrestar las amenazas contra nuestros intereses nacionales en el ciberespacio", añadió, sin utilizar jamás la palabra "capacidad ofensiva".
Sin embargo un alto responsable de Defensa estadounidense precisó a periodistas que "todos aquellos que quieran atacarnos deben saber que el Departamento de Defensa tomará todas las medidas necesarias".
Al apuntar a una "importante intensificación" del número de ataques, el secretario de Defensa afirmó que el Pentágono "sabe" que "actores extranjeros prueban la red de infraestructura crucial de Estados Unidos", es decir, los sistemas de control de centrales eléctricas y las redes de distribución de agua y transporte.
Según un alto responsable de Defensa, que se pronunció bajo condición de anonimato, Estados Unidos está "particularmente preocupado por Rusia y China" y por "Irán que tiene capacidades en crecimiento".
Para defender infraestructuras esenciales, Leon Panetta estima que sería necesario que el gobierno y el sector privado pudieran intercambiar más fácilmente información sobre las amenazas del ciberespacio.
Con un presupuesto anual de 3.400 millones de dólares, el CyberCommand, el comando estadounidense a cargo de estas cuestiones es capaz de identificar el origen y los autores de un ataque, lo que refuerza según el secretario la capacidad disuasiva del dispositivo estadounidense: el Pentágono sabrá a quien debe de dirigirse si se produce un ataque de gran magnitud.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Leon Panetta (I), durante una conferencia en el Pentágono, junto a su par de Canadá, Peter MacKay, el 28 de setiembre de 2012.
El Pentágono estadounidense finaliza sus reglas de actuación para responder a los ciberataques susceptibles de provocar daños materiales importantes, anunció esta semana el jefe del Pentágono, Leon Panetta.
"Las nuevas reglas precisan que el Departamento de Defensa tendría la responsabilidad no solamente de defender su red, sino también de estar dispuesto a defender el país y los intereses nacionales contra un ataque", declaró Panetta en Nueva York, ante una asamblea de hombres de negocio, según el texto de su discurso comunicado a la AFP.
"No triunfaremos en impedir un ciberataque simplemente con defensas mejoradas. Si detectamos una amenaza inminente de ataque que provoque importantes destrucciones físicas o la muerte de ciudadanos estadounidenses, debemos tener la posibilidad de reaccionar para defender el país si el presidente así lo ordena", dijo Panetta.
El Pentágono ha desarrollado la "capacidad de realizar operaciones eficaces para contrarrestar las amenazas contra nuestros intereses nacionales en el ciberespacio", añadió, sin utilizar jamás la palabra "capacidad ofensiva".
Sin embargo un alto responsable de Defensa estadounidense precisó a periodistas que "todos aquellos que quieran atacarnos deben saber que el Departamento de Defensa tomará todas las medidas necesarias".
Al apuntar a una "importante intensificación" del número de ataques, el secretario de Defensa afirmó que el Pentágono "sabe" que "actores extranjeros prueban la red de infraestructura crucial de Estados Unidos", es decir, los sistemas de control de centrales eléctricas y las redes de distribución de agua y transporte.
Según un alto responsable de Defensa, que se pronunció bajo condición de anonimato, Estados Unidos está "particularmente preocupado por Rusia y China" y por "Irán que tiene capacidades en crecimiento".
Para defender infraestructuras esenciales, Leon Panetta estima que sería necesario que el gobierno y el sector privado pudieran intercambiar más fácilmente información sobre las amenazas del ciberespacio.
Con un presupuesto anual de 3.400 millones de dólares, el CyberCommand, el comando estadounidense a cargo de estas cuestiones es capaz de identificar el origen y los autores de un ataque, lo que refuerza según el secretario la capacidad disuasiva del dispositivo estadounidense: el Pentágono sabrá a quien debe de dirigirse si se produce un ataque de gran magnitud.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Leon Panetta (I), durante una conferencia en el Pentágono, junto a su par de Canadá, Peter MacKay, el 28 de setiembre de 2012.