El Ejército sirio niega haber empleado bombas de racimo contra los rebeldes
El Ejército de Siria ha negado que haya utilizado bombas de racimo, como ha denunciado la ONG Human Rights Watch, en la represión contra los movimientos antigubernamentales que mantiene desde mediados de marzo de 2011, cuando comenzaron las manifestaciones contra el presidente sirio, Bashar al Assad.
HRW denunció el domingo que tiene pruebas de que la Fuerza Aérea siria ha estado empleando bombas de racimo en sus ataques en los últimos días en el conflicto interno.
"El Ejército Sirio Árabe no pose este tipo de armas y afirma que esta información es completamente falsa", ha indicado la fuerza militar en un comunicado. Las bombas de racimo explotan en el aire desplegando artefactos más pequeños que pueden afectar a zonas tan grandes como un campo de fútbol. Siria no firmó en 2010 el acuerdo internacional que prohibía su uso.
Las bombas de racimo habrían sido lanzadas sobre la principal carretera que va por Marat al Numan, una localidad que está registrando en los últimos días intensos combates entre fuerzas de Al Assad y opositores armados. La ONG ha confirmado el empleo de bombas de racimo por medio de entrevistas a activistas sirios.
La represión del régimen de Bashar al Assad ha causado más de 30.000 muertos desde que comenzó a mediados de marzo de 2011 la revuelta, según las estimaciones del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una ONG con sede en Reino Unido y con activistas y colaboradores desplegados sobre el terreno.
