Protestas contra filme antiislámico sacuden el mundo musulmán
Doha, AFP
Decenas de miles de musulmanes se manifestaron este viernes en diversos países contra una película realizada en Estados Unidos que denigra el islam, y protagonizaron incidentes violentos que dejaron cinco muertos.
El filme, que presenta a los musulmanes y a su profeta Mahoma como seres inmorales y brutales, desencadenó el martes iracundas reacciones en Egipto y Libia que se extendieron luego a otros países de África y Asia y llegaron hasta Indonesia.
Ante la escalada, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, calificó el filme de "repugnante" y llamó a "la calma y la razón". El papa Benedicto XVI, de visita en Líbano, pidió a judíos, musulmanes y cristianos que erradiquen el fundamentalismo religioso.
"Resistiremos ante la violencia en nuestras misiones diplomáticas", prometió el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en la ceremonia de llegada de los cuerpos de cuatro estadounidenses muertos en el asalto al consulado de Bengasi (Libia) el pasado martes.
A su lado, la secretaria de Estado, Hillary Clinton, dijo que los pueblos de Egipto, Libia, Yemen y Túnez "no cambiaron la tiranía de un dictador por la de las masas".
En Túnez, dos personas murieron y 40 resultaron heridas este viernes en enfrentamientos violentos junto a la embajada de Estados Unidos.
Al menos un millar de islamistas asaltó la legación diplomática y entró hasta el patio. En los mástiles de la embajada podían verse una bandera negra y otra blanca, los colores del movimiento salafista. Muy cerca de allí, los manifestantes incendiaron dependencias de la escuela norteamericana.
El presidente Moncef Marzuki consideró que el ataque era un acto "inaceptable" contra "un país amigo". A su vez, el primer ministro Ahmadi Jebali, un islamista, dijo que estaba "profundamente inquieto" y su gobierno llamó a la calma.
En Jartum, las fuerzas de seguridad sudanesas dispersaron con gases lacrimógenos a unas 10.000 personas que se dirigían hacia la embajada de Estados Unidos tras haber atacado la de Gran Bretaña e incendiado la de Alemania, informó un corresponsal de la AFP.
Un manifestante murió al ser arrollado por un vehículo de la policía que embistió a un grupo que lanzaba piedras contra la fuerza antimotines, agregó el reportero. Luego se descubrió otro cadáver cerca de la embajada, sin que de momento se establecieran las causas de la muerte.
En Líbano, un manifestante murió y 25 resultaron heridos en enfrentamientos en la ciudad de Trípoli (norte) entre policías y centenares de islamistas que poco antes habían incendiado un restaurante norteamericano de comida rápida, indicó un responsable de los servicios de seguridad.
Los incidentes coinciden con la llegada del papa Benedicto XVI a Beirut, donde inició una visita de tres días a Líbano.
En la vecina Siria, escenario de un conflicto entre el gobierno y opositores, los partidarios de unos y otros se manifestaron por separado contra la película.
En Libia, decenas de islamistas radicales se manifestaron en Bengasi a gritos de "Obama, Obama, todos somos Osama", refiriéndose a Osama bin Laden, el exjefe de Al Qaida.
En Saná, donde los incidentes dejaron cuatro muertos el jueves, la policía yemení disparó al aire y usó cañones de agua para repeler a cientos de manifestantes que se aproximaban a la embajada estadounidense, según un corresponsal de la AFP.
En El Cairo se registraron nuevas reyertas esporádicas frente a la embajada estadounidense.
El poderoso movimiento de los Hermanos Musulmanes egipcio, del que procede el presidente Mohamed Mursi, retiró el llamamiento a manifestarse en todo el país, para protagonizar en su lugar una concentración "simbólica" en la plaza Tahrir de El Cairo.
Y en la península del Sinaí, unos beduinos atacaron el campamento de la fuerza multinacional, causando tres heridos, dos de ellos colombianos.
Miles de personas se manifestaron igualmente en Irak, en la franja de Gaza, controlada por el movimiento islamista palestino Hamas, y en Jerusalén oriental, ocupado y anexionado por Israel. También hubo concentraciones en Irán.
En Pakistán, varias concentraciones en las principales ciudades reclamaron la muerte del director de la polémica película y la expulsión de los diplomáticos estadounidenses.
En Indonesia, el país con más musulmanes del mundo, 350 islamistas se manifestaron en Yakarta contra la "declaración de guerra" que para ellos representa la película "La inocencia de los musulmanes".
Las reacciones desencadenadas por "La inocencia de los musulmanes", varios de cuyos extractos se difundieron por internet, recuerdan la ira provocada por la publicación en 2006 de caricaturas del profeta Mahoma por un diario danés.
El filme fue realizado por un cineasta que se presenta como israelo-estadounidense y que, según los medios estadounidenses, sería un cristiano copto.
Un individuo que aseguró ser el productor de la película dijo no tener nada de que arrepentirse, aunque lamentó que los incidentes costaran la vida al embajador norteamericano en Libia.
"Me entristece la muerte del embajador pero no lamento haber hecho (la película)", dijo Nakula Basseley Nakula, un copto que reside en California, en declaraciones a la emisora estadounidense en lengua árabe Radio Sawa.
Hillary Clinton aseguró que el gobierno estadounidense no tenía "absolutamente nada que ver" con este "video repugnante y condenable" y exhortó a los dirigentes políticos y religiosos a condenar la violencia.
El presidente egipcio Mursi juzgó este viernes que la película constituía una "agresión" que "desvía la atención de los verdaderos problemas en Oriente Medio" y condenó la violencia que desencadenó en la región.
La canciller alemana, Angela Merkel, condenó el ataque contra la embajada de su país en Jartum, y expresó su "gran inquietud" por la ola de violencia.
Estados Unidos está trabajando con los gobiernos de Medio Oriente y el norte de África para aumentar la seguridad de sus misiones diplomáticas, según aseguró un alto funcionario del Departamento de Estado este viernes.
Unas manifestantes tunecinas sostienen banderas islámicas mientras pisan una bandera estadounidense, durante una protesta contra la película 'La inocencia de los musulmanes' frente a la embajada de Estados Unidos en Túnez, el pasado 12 de septiembre.
En el Cairo, donde se han registrado frente a la embajada estadounidense manifestaciones desde el martes, enfrentamientos esporádicos continuaron a lo largo de la mañana con las fuerzas del orden desplegadas en los alrededores de la misión diplomática.
Decenas de miles de musulmanes se manifestaron este viernes en diferentes países del mundo árabe y Asia, para denunciar una película producida en Estados Unidos que denigra el islam, lo que desencadenó nuevos actos de violencia, que en Líbano causaron un muerto y en Sudán el incendio de la embajada alemana.
Decenas de miles de musulmanes se manifestaron este viernes en diversos países contra una película realizada en Estados Unidos que denigra el islam, y protagonizaron incidentes violentos que dejaron cinco muertos.
El filme, que presenta a los musulmanes y a su profeta Mahoma como seres inmorales y brutales, desencadenó el martes iracundas reacciones en Egipto y Libia que se extendieron luego a otros países de África y Asia y llegaron hasta Indonesia.
Ante la escalada, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, calificó el filme de "repugnante" y llamó a "la calma y la razón". El papa Benedicto XVI, de visita en Líbano, pidió a judíos, musulmanes y cristianos que erradiquen el fundamentalismo religioso.
"Resistiremos ante la violencia en nuestras misiones diplomáticas", prometió el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en la ceremonia de llegada de los cuerpos de cuatro estadounidenses muertos en el asalto al consulado de Bengasi (Libia) el pasado martes.
A su lado, la secretaria de Estado, Hillary Clinton, dijo que los pueblos de Egipto, Libia, Yemen y Túnez "no cambiaron la tiranía de un dictador por la de las masas".
En Túnez, dos personas murieron y 40 resultaron heridas este viernes en enfrentamientos violentos junto a la embajada de Estados Unidos.
Al menos un millar de islamistas asaltó la legación diplomática y entró hasta el patio. En los mástiles de la embajada podían verse una bandera negra y otra blanca, los colores del movimiento salafista. Muy cerca de allí, los manifestantes incendiaron dependencias de la escuela norteamericana.
El presidente Moncef Marzuki consideró que el ataque era un acto "inaceptable" contra "un país amigo". A su vez, el primer ministro Ahmadi Jebali, un islamista, dijo que estaba "profundamente inquieto" y su gobierno llamó a la calma.
En Jartum, las fuerzas de seguridad sudanesas dispersaron con gases lacrimógenos a unas 10.000 personas que se dirigían hacia la embajada de Estados Unidos tras haber atacado la de Gran Bretaña e incendiado la de Alemania, informó un corresponsal de la AFP.
Un manifestante murió al ser arrollado por un vehículo de la policía que embistió a un grupo que lanzaba piedras contra la fuerza antimotines, agregó el reportero. Luego se descubrió otro cadáver cerca de la embajada, sin que de momento se establecieran las causas de la muerte.
En Líbano, un manifestante murió y 25 resultaron heridos en enfrentamientos en la ciudad de Trípoli (norte) entre policías y centenares de islamistas que poco antes habían incendiado un restaurante norteamericano de comida rápida, indicó un responsable de los servicios de seguridad.
Los incidentes coinciden con la llegada del papa Benedicto XVI a Beirut, donde inició una visita de tres días a Líbano.
En la vecina Siria, escenario de un conflicto entre el gobierno y opositores, los partidarios de unos y otros se manifestaron por separado contra la película.
En Libia, decenas de islamistas radicales se manifestaron en Bengasi a gritos de "Obama, Obama, todos somos Osama", refiriéndose a Osama bin Laden, el exjefe de Al Qaida.
En Saná, donde los incidentes dejaron cuatro muertos el jueves, la policía yemení disparó al aire y usó cañones de agua para repeler a cientos de manifestantes que se aproximaban a la embajada estadounidense, según un corresponsal de la AFP.
En El Cairo se registraron nuevas reyertas esporádicas frente a la embajada estadounidense.
El poderoso movimiento de los Hermanos Musulmanes egipcio, del que procede el presidente Mohamed Mursi, retiró el llamamiento a manifestarse en todo el país, para protagonizar en su lugar una concentración "simbólica" en la plaza Tahrir de El Cairo.
Y en la península del Sinaí, unos beduinos atacaron el campamento de la fuerza multinacional, causando tres heridos, dos de ellos colombianos.
Miles de personas se manifestaron igualmente en Irak, en la franja de Gaza, controlada por el movimiento islamista palestino Hamas, y en Jerusalén oriental, ocupado y anexionado por Israel. También hubo concentraciones en Irán.
En Pakistán, varias concentraciones en las principales ciudades reclamaron la muerte del director de la polémica película y la expulsión de los diplomáticos estadounidenses.
En Indonesia, el país con más musulmanes del mundo, 350 islamistas se manifestaron en Yakarta contra la "declaración de guerra" que para ellos representa la película "La inocencia de los musulmanes".
Las reacciones desencadenadas por "La inocencia de los musulmanes", varios de cuyos extractos se difundieron por internet, recuerdan la ira provocada por la publicación en 2006 de caricaturas del profeta Mahoma por un diario danés.
El filme fue realizado por un cineasta que se presenta como israelo-estadounidense y que, según los medios estadounidenses, sería un cristiano copto.
Un individuo que aseguró ser el productor de la película dijo no tener nada de que arrepentirse, aunque lamentó que los incidentes costaran la vida al embajador norteamericano en Libia.
"Me entristece la muerte del embajador pero no lamento haber hecho (la película)", dijo Nakula Basseley Nakula, un copto que reside en California, en declaraciones a la emisora estadounidense en lengua árabe Radio Sawa.
Hillary Clinton aseguró que el gobierno estadounidense no tenía "absolutamente nada que ver" con este "video repugnante y condenable" y exhortó a los dirigentes políticos y religiosos a condenar la violencia.
El presidente egipcio Mursi juzgó este viernes que la película constituía una "agresión" que "desvía la atención de los verdaderos problemas en Oriente Medio" y condenó la violencia que desencadenó en la región.
La canciller alemana, Angela Merkel, condenó el ataque contra la embajada de su país en Jartum, y expresó su "gran inquietud" por la ola de violencia.
Estados Unidos está trabajando con los gobiernos de Medio Oriente y el norte de África para aumentar la seguridad de sus misiones diplomáticas, según aseguró un alto funcionario del Departamento de Estado este viernes.
Unas manifestantes tunecinas sostienen banderas islámicas mientras pisan una bandera estadounidense, durante una protesta contra la película 'La inocencia de los musulmanes' frente a la embajada de Estados Unidos en Túnez, el pasado 12 de septiembre.
En el Cairo, donde se han registrado frente a la embajada estadounidense manifestaciones desde el martes, enfrentamientos esporádicos continuaron a lo largo de la mañana con las fuerzas del orden desplegadas en los alrededores de la misión diplomática.
Decenas de miles de musulmanes se manifestaron este viernes en diferentes países del mundo árabe y Asia, para denunciar una película producida en Estados Unidos que denigra el islam, lo que desencadenó nuevos actos de violencia, que en Líbano causaron un muerto y en Sudán el incendio de la embajada alemana.