Las iraníes tienen nuevas restricciones en la universidad, denuncia ONG
Teherán, AFP
Las estudiantes iraníes tendrán mayores restricciones en la universidad para la obtención de algunos diplomas en este nuevo curso que se inicia, denunció este sábado la organización no gubernamental Human Rights Watch.
La organización de defensa de derechos humanos con sede en Nueva York afirma en un comunicado que estas restricciones se suman a una islamización rampante de las universidades, impuesta desde la llegada al poder del presidente Mahmud Ahmadinejad.
La ONG recuerda un informe difundido en agosto por la agencia Mehr, que señala que en varias universidades las mujeres ya no pueden asistir a 77 cursos, en particular informática, química, administración de empresas y ciencias.
En cambio, en el caso de los hombres, el número de cursos prohibidos, como historia, lingüística, literatura, sociología o filosofía, es mucho menor en algunas universidades.
"Con motivo del inicio de un nuevo curso universitario (...) las mujeres no podrán seguir los estudios y la carrera de su elección", denuncia Liesl Gerntholtz, directora de derechos de la mujer en HRW.
Este tipo de restricciones son vistas por muchos tanto en Irán como en el extranjero como un intento de reducir el número de mujeres que desea acceder a la enseñanza superior y reforzar el dominio patriarcal.
Actualmente cerca del 60% de los estudiantes son mujeres.
Los medios de comunicación estatales apenas han hablado de estas nuevas medidas pero otros medios han informado de otras restricciones en las universidades, como la creación de clases separadas entre mujeres y hombres.
Citado la semana pasada por la agencia Mehr, el ministro de Ciencias, Investigación y Tecnología, Kamran Daneshjou, se felicitó de la creación de universidades o escuelas reservadas a mujeres o a hombres.
Es lo que "contempla nuestra religión para nosotros", aseguró.
Las estudiantes iraníes tendrán mayores restricciones en la universidad para la obtención de algunos diplomas en este nuevo curso que se inicia, denunció este sábado la organización no gubernamental Human Rights Watch.
Las estudiantes iraníes tendrán mayores restricciones en la universidad para la obtención de algunos diplomas en este nuevo curso que se inicia, denunció este sábado la organización no gubernamental Human Rights Watch.
La organización de defensa de derechos humanos con sede en Nueva York afirma en un comunicado que estas restricciones se suman a una islamización rampante de las universidades, impuesta desde la llegada al poder del presidente Mahmud Ahmadinejad.
La ONG recuerda un informe difundido en agosto por la agencia Mehr, que señala que en varias universidades las mujeres ya no pueden asistir a 77 cursos, en particular informática, química, administración de empresas y ciencias.
En cambio, en el caso de los hombres, el número de cursos prohibidos, como historia, lingüística, literatura, sociología o filosofía, es mucho menor en algunas universidades.
"Con motivo del inicio de un nuevo curso universitario (...) las mujeres no podrán seguir los estudios y la carrera de su elección", denuncia Liesl Gerntholtz, directora de derechos de la mujer en HRW.
Este tipo de restricciones son vistas por muchos tanto en Irán como en el extranjero como un intento de reducir el número de mujeres que desea acceder a la enseñanza superior y reforzar el dominio patriarcal.
Actualmente cerca del 60% de los estudiantes son mujeres.
Los medios de comunicación estatales apenas han hablado de estas nuevas medidas pero otros medios han informado de otras restricciones en las universidades, como la creación de clases separadas entre mujeres y hombres.
Citado la semana pasada por la agencia Mehr, el ministro de Ciencias, Investigación y Tecnología, Kamran Daneshjou, se felicitó de la creación de universidades o escuelas reservadas a mujeres o a hombres.
Es lo que "contempla nuestra religión para nosotros", aseguró.
Las estudiantes iraníes tendrán mayores restricciones en la universidad para la obtención de algunos diplomas en este nuevo curso que se inicia, denunció este sábado la organización no gubernamental Human Rights Watch.