Cerca de medio centenar de policías heridos en los disturbios del domingo en Belfast
Belfast, EP
Al menos 47 policías resultaron heridos mientras intentaban separar a católicos y protestantes que se estaban enfrentando en Belfast este domingo, cuando estalló la violencia durante una marcha de un grupo católico, ha informado este lunes la Policía de Irlanda del Norte.
Los agentes emplearon cañones de agua para defenderse de cócteles molotov, petardos, piedras y botellas lanzadas en su contra por ambos bandos en las batallas callejeras que se prolongaron por espacio de doce horas, según la Policía.
La violencia fue provocada por grupos lealistas que se manifestaron contra la marcha republicana, ha precisado la Policía. La zona permanecía en tensión desde hace una semana, cuando estalló la violencia y siete agentes resultaron heridos, después de que un grupo protestante desfilara por delante de una iglesia católica, haciendo sonar música y desafiando una prohibición de la comisión de marchas, que regula los desfiles en la provincia británica.
Según el superintendente jefe, George Clark, los agentes fueron atacados con cientos de petardos y 34 cócteles molotov por las facciones rivales. El responsable policial ha manifestado su tristeza y enfado por los disturbios de este domingo, que ha calificado de "salvajes, terribles y reprensibles". En un momento dado, los agentes amenazaron con emplear balas recubiertas de goma.
El miembro del Sinn Fein Gerry Kelly ha denunciado que la violencia contra el bando protestante ha sido orquestada por la Ulster Volunteer Force y la Ulster Defence Association, dos grupos lealistas que supuestamente acatan el alto el fuego.
Al menos 47 policías resultaron heridos mientras intentaban separar a católicos y protestantes que se estaban enfrentando en Belfast este domingo, cuando estalló la violencia durante una marcha de un grupo católico, ha informado este lunes la Policía de Irlanda del Norte.
Los agentes emplearon cañones de agua para defenderse de cócteles molotov, petardos, piedras y botellas lanzadas en su contra por ambos bandos en las batallas callejeras que se prolongaron por espacio de doce horas, según la Policía.
La violencia fue provocada por grupos lealistas que se manifestaron contra la marcha republicana, ha precisado la Policía. La zona permanecía en tensión desde hace una semana, cuando estalló la violencia y siete agentes resultaron heridos, después de que un grupo protestante desfilara por delante de una iglesia católica, haciendo sonar música y desafiando una prohibición de la comisión de marchas, que regula los desfiles en la provincia británica.
Según el superintendente jefe, George Clark, los agentes fueron atacados con cientos de petardos y 34 cócteles molotov por las facciones rivales. El responsable policial ha manifestado su tristeza y enfado por los disturbios de este domingo, que ha calificado de "salvajes, terribles y reprensibles". En un momento dado, los agentes amenazaron con emplear balas recubiertas de goma.
El miembro del Sinn Fein Gerry Kelly ha denunciado que la violencia contra el bando protestante ha sido orquestada por la Ulster Volunteer Force y la Ulster Defence Association, dos grupos lealistas que supuestamente acatan el alto el fuego.