Mayordomo del Papa probablemente sea juzgado
Ciudad del Vaticano, AFP
El mayordomo del Papa Benedicto XVI, Paolo Gabriele, acusado de haber transmitido a personas exteriores al Vaticano documentos reservados, probablemente sea juzgado por un tribunal de este pequeño país, indicó el lunes su abogado a medios italianos.
Entre el jueves y el sábado se sabrá si se juzga a Gabriele, acusado de la filtración de documentos confidenciales de Benedicto XVI.
Gabriele salió de la cárcel el pasado 21 de julio, pero se encuentra desde entonces bajo arresto domiciliario. Si no se lo remite a la justicia, se lo absolverá.
"Pensamos que se decidirá remitirlo a la justicia", declaró uno de sus abogados, Carlo Fusco.
Gabriele es la única persona que aún permanece acusada en este caso. Se lo acusa de "robo agravado".
"No hay elementos nuevos en el plano judicial", agregó Fusco, quien negó "terminantemente" que Gabriele pudiese haber sido usado como chivo expiatorio en este caso.
De ser juzgado, el mayordomo podría ser condenado a una pena de uno a seis años de cárcel, pero el Papa puede optar por indultarlo cuando quiera, si así lo decide.
Casado y padre de dos hijos, Paolo Gabriele era uno de los pocos laicos con acceso a los apartamentos del Papa.
Está acusado de "robo agravado" por haber sustraído del escritorio de su superior jerárquico, Monseñor Georg Gänswein, secretario particular del Papa, numerosos mensajes, cartas y correos electrónicos altamente confidenciales, algunos dirigidos al mismísimo Joseph Ratzinger, y de fotocopiarlos para transmitirlos al exterior del Vaticano.
Desde la detención de Paolo Gabriele, las investigaciones se han realizado a dos niveles: la comisión de tres cardenales, que cuenta con amplios poderes y rinde cuentas directamente al Papa, y la instrucción judicial que debe decidir si abre un juicio al mayordomo.
El mayordomo del Papa, Paolo Gabriele, sentado en el papamóvil tras su llegada para una audiencia general semanal el 25 de abril de 2012 a la plaza San Pedro en El Vaticano.
El mayordomo del Papa Benedicto XVI, Paolo Gabriele, acusado de haber transmitido a personas exteriores al Vaticano documentos reservados, probablemente sea juzgado por un tribunal de este pequeño país, indicó el lunes su abogado a medios italianos.
Entre el jueves y el sábado se sabrá si se juzga a Gabriele, acusado de la filtración de documentos confidenciales de Benedicto XVI.
Gabriele salió de la cárcel el pasado 21 de julio, pero se encuentra desde entonces bajo arresto domiciliario. Si no se lo remite a la justicia, se lo absolverá.
"Pensamos que se decidirá remitirlo a la justicia", declaró uno de sus abogados, Carlo Fusco.
Gabriele es la única persona que aún permanece acusada en este caso. Se lo acusa de "robo agravado".
"No hay elementos nuevos en el plano judicial", agregó Fusco, quien negó "terminantemente" que Gabriele pudiese haber sido usado como chivo expiatorio en este caso.
De ser juzgado, el mayordomo podría ser condenado a una pena de uno a seis años de cárcel, pero el Papa puede optar por indultarlo cuando quiera, si así lo decide.
Casado y padre de dos hijos, Paolo Gabriele era uno de los pocos laicos con acceso a los apartamentos del Papa.
Está acusado de "robo agravado" por haber sustraído del escritorio de su superior jerárquico, Monseñor Georg Gänswein, secretario particular del Papa, numerosos mensajes, cartas y correos electrónicos altamente confidenciales, algunos dirigidos al mismísimo Joseph Ratzinger, y de fotocopiarlos para transmitirlos al exterior del Vaticano.
Desde la detención de Paolo Gabriele, las investigaciones se han realizado a dos niveles: la comisión de tres cardenales, que cuenta con amplios poderes y rinde cuentas directamente al Papa, y la instrucción judicial que debe decidir si abre un juicio al mayordomo.
El mayordomo del Papa, Paolo Gabriele, sentado en el papamóvil tras su llegada para una audiencia general semanal el 25 de abril de 2012 a la plaza San Pedro en El Vaticano.