Los ministros del nuevo Gobierno de Egipto juran sus cargos
El Cairo, EP
Los ministros del nuevo Ejecutivo egipcio, encabezado por el primer ministro, Hisham Kandil, ha jurado su cargo este jueves ante el presidente, Mohamed Mursi, en el palacio presidencial, ubicado en Heliópolis, según han recogido varios medios egipcios.
Tras el acto, Mursi se ha reunido con todos ellos en el mismo palacio, donde ha solicitado a Kandil que continúe con la implementación del programa presidencial, destinado a solucionar los que han sido definidos por el mandatario egipcio como los principales problemas del país: el vacío de seguridad tras la revolución, la escasez de pan y combustible, la congestión del tráfico y el inadecuado nivel de sanidad pública.
Asimismo, el plan pretende aumentar los servicios públicos, revivir la economía nacional, aumentar las exportaciones y animar la inversión, tanto local como internacional. En principio, Mursi ha dado un plazo de cien días para que se noten los efectos del programa.
Por otra parte, Mursi ha subrayado durante la reunión la necesidad de combatir el aumento del paro a través de la concesión de oportunidades de trabajo a los diplomados, animando al pequeño comercio y apoyando a la industria turística del país.
Por último, el presidente egipcio ha recalcado la necesidad de mejorar las relaciones diplomáticas con los países extranjeros, especialmente con las naciones africanas, y de lanzar un mercado de valores árabe unificado. Para poner fin a la reunión, los presentes han compartido el 'iftar', acto público de ruptura del ayuno durante el mes sagrado del Ramadán.
Los ministros del nuevo Ejecutivo egipcio, encabezado por el primer ministro, Hisham Kandil, ha jurado su cargo este jueves ante el presidente, Mohamed Mursi, en el palacio presidencial, ubicado en Heliópolis, según han recogido varios medios egipcios.
Tras el acto, Mursi se ha reunido con todos ellos en el mismo palacio, donde ha solicitado a Kandil que continúe con la implementación del programa presidencial, destinado a solucionar los que han sido definidos por el mandatario egipcio como los principales problemas del país: el vacío de seguridad tras la revolución, la escasez de pan y combustible, la congestión del tráfico y el inadecuado nivel de sanidad pública.
Asimismo, el plan pretende aumentar los servicios públicos, revivir la economía nacional, aumentar las exportaciones y animar la inversión, tanto local como internacional. En principio, Mursi ha dado un plazo de cien días para que se noten los efectos del programa.
Por otra parte, Mursi ha subrayado durante la reunión la necesidad de combatir el aumento del paro a través de la concesión de oportunidades de trabajo a los diplomados, animando al pequeño comercio y apoyando a la industria turística del país.
Por último, el presidente egipcio ha recalcado la necesidad de mejorar las relaciones diplomáticas con los países extranjeros, especialmente con las naciones africanas, y de lanzar un mercado de valores árabe unificado. Para poner fin a la reunión, los presentes han compartido el 'iftar', acto público de ruptura del ayuno durante el mes sagrado del Ramadán.