Kabul e Islamabad acuerdan retomar las conversaciones con los talibán
Kabul, EP
Pakistán y Afganistán han acordado este jueves retomar las conversaciones para intentar alcanzar un acuerdo de paz en Kabul con los talibán afganos, tras la toma de posesión del nuevo primer ministro paquistaní, Raja Pervez Ashraf, que se ha comprometido a contribuir para que el proceso avance.
Tras un día de conversaciones en Kabul con autoridades afganas y con el primer ministro británico, David Cameron, que se encuentra de visita oficial en el país centroasiático, Ashraf y el presidente afgano, Hamid Karzai, han llegado a un acuerdo para reiniciar el diálogo en el marco de la denominada Comisión de Paz, que incluye a representantes de los talibán.
Este órgano reúne a líderes políticos y militares de ambos países y suspendió sus actividades en 2011 cuando su principal responsable, el ex primer ministro Burhanuddin Rabbani, murió en un atentado terrorista. Las autoridades de Kabul acusaron entonces al Gobierno paquistaní de estar detrás de ese ataque.
Pakistán es considerado por la comunidad internacional como un actor esencial para el mantenimiento de la paz en Afganistán a partir de 2014, cuando las fuerzas internacionales abandonarán el país, por sus relaciones con los santuarios de milicianos islamistas situados en la zona fronteriza.
Las autoridades afganas han acusado en reiteradas ocasiones a sus vecinos de Islamabad de no actuar con la suficiente contundencia contra los campos de milicianos y líderes islamistas asentados en su territorio, algo que el Gobierno paquistaní rechaza de plano, hasta el punto de llegar a negar la presencia de combatientes integristas en su país.
"Pakistán tiene un papel de mediador. Si Pakistán puede ayudar en modo alguno, lo haremos", ha subrayado Ashraf, en declaraciones a la prensa, tras reunirse con Karzai en el palacio presidencial afgano. Ashraf, que fue ministro de Energía y Agua, fue elegido como primer ministro hace un mes y esta primera visita al país vecino tiene especial importancia en las relaciones bilaterales, tras las diferencias entre ambos países en los últimos meses.
"Dejénme asegurarles que Pakistán no apoya a terroristas. No va con nuestros intereses y no podemos permitírnoslo", ha aseverado. Tanto Karzai como Ashraf han explicado que el nuevo responsable del Alto Consejo para la Paz, Salahuddin Rabbani, hijo del asesinado Rabbani, viajará próximamente a Pakistán para iniciar las primeras conversaciones, en el que será su primer desplazamiento al país vecino desde su designación en abril de 2012.
"El proceso de paz es el objetivo más importante para Afganistán. Continúa siendo la mayor prioridad", ha subrayado, por su parte, Karzai.
El 'premier' británico, David Cameron, que ha firmado un acuerdo con el presidente afgano para financiar la construcción de un centro de formación castrense que se llamará Sandhurst in the Sand (Sandhurst es la principal academia militar británica), ha asegurado que los talibán podrían implicarse en las negociaciones de paz antes de que las fuerzas de la OTAN inicien su repliegue.
Cameron ha emplazado a Pakistán y Afganistán a sumar sus fuerzas para luchar contra la insurgencia sin tener en cuenta sus respectivas fronteras porque ambos deben estar "unidos" en una "única lucha" contra los combatientes integristas. "Los terroristas que están intentando hacer descarrilar Afganistán son los mismos terroristas que están intentando derrocar a Pakistán. Esta es una misma batalla en la que todos debemos participar", ha subrayado.
Pakistán y Afganistán han acordado este jueves retomar las conversaciones para intentar alcanzar un acuerdo de paz en Kabul con los talibán afganos, tras la toma de posesión del nuevo primer ministro paquistaní, Raja Pervez Ashraf, que se ha comprometido a contribuir para que el proceso avance.
Tras un día de conversaciones en Kabul con autoridades afganas y con el primer ministro británico, David Cameron, que se encuentra de visita oficial en el país centroasiático, Ashraf y el presidente afgano, Hamid Karzai, han llegado a un acuerdo para reiniciar el diálogo en el marco de la denominada Comisión de Paz, que incluye a representantes de los talibán.
Este órgano reúne a líderes políticos y militares de ambos países y suspendió sus actividades en 2011 cuando su principal responsable, el ex primer ministro Burhanuddin Rabbani, murió en un atentado terrorista. Las autoridades de Kabul acusaron entonces al Gobierno paquistaní de estar detrás de ese ataque.
Pakistán es considerado por la comunidad internacional como un actor esencial para el mantenimiento de la paz en Afganistán a partir de 2014, cuando las fuerzas internacionales abandonarán el país, por sus relaciones con los santuarios de milicianos islamistas situados en la zona fronteriza.
Las autoridades afganas han acusado en reiteradas ocasiones a sus vecinos de Islamabad de no actuar con la suficiente contundencia contra los campos de milicianos y líderes islamistas asentados en su territorio, algo que el Gobierno paquistaní rechaza de plano, hasta el punto de llegar a negar la presencia de combatientes integristas en su país.
"Pakistán tiene un papel de mediador. Si Pakistán puede ayudar en modo alguno, lo haremos", ha subrayado Ashraf, en declaraciones a la prensa, tras reunirse con Karzai en el palacio presidencial afgano. Ashraf, que fue ministro de Energía y Agua, fue elegido como primer ministro hace un mes y esta primera visita al país vecino tiene especial importancia en las relaciones bilaterales, tras las diferencias entre ambos países en los últimos meses.
"Dejénme asegurarles que Pakistán no apoya a terroristas. No va con nuestros intereses y no podemos permitírnoslo", ha aseverado. Tanto Karzai como Ashraf han explicado que el nuevo responsable del Alto Consejo para la Paz, Salahuddin Rabbani, hijo del asesinado Rabbani, viajará próximamente a Pakistán para iniciar las primeras conversaciones, en el que será su primer desplazamiento al país vecino desde su designación en abril de 2012.
"El proceso de paz es el objetivo más importante para Afganistán. Continúa siendo la mayor prioridad", ha subrayado, por su parte, Karzai.
El 'premier' británico, David Cameron, que ha firmado un acuerdo con el presidente afgano para financiar la construcción de un centro de formación castrense que se llamará Sandhurst in the Sand (Sandhurst es la principal academia militar británica), ha asegurado que los talibán podrían implicarse en las negociaciones de paz antes de que las fuerzas de la OTAN inicien su repliegue.
Cameron ha emplazado a Pakistán y Afganistán a sumar sus fuerzas para luchar contra la insurgencia sin tener en cuenta sus respectivas fronteras porque ambos deben estar "unidos" en una "única lucha" contra los combatientes integristas. "Los terroristas que están intentando hacer descarrilar Afganistán son los mismos terroristas que están intentando derrocar a Pakistán. Esta es una misma batalla en la que todos debemos participar", ha subrayado.