Dick Cheney da su apoyo a Romney con una cena de recaudación de fondos
En la cena, los comensales pagarán 24.600 euros por cubierto
Cheney ha sido uno de los mayores críticos con la Administración de Barack Obama
David Alandete
Washington, El País
Si el candidato republicano Mitt Romney tenía que reunirse con el exvivepresidente Dick Cheney, el arquitecto de las guerras Irak y Afganistán y el mayor valedor de las técnicas de tortura y encarcelamiento indefinido de la Administración de George W. Bush, debía hacerlo lejos, bien lejos, de Washington y de las cámaras que le siguen en todas las paradas de su gira electoral. El encuentro, una cena para recaudar fondos, tendrá lugar hoy a puerta cerrada en el rancho que Cheney tiene en el remoto Estado de Wyoming, al que representó en el Congreso federal durante una década, de 1979 a 1989.
Cheney, muy respetado entre los republicanos, es una figura polémica entre los demócratas y divisiva entre los independientes. Desde que Barack Obama ganara las elecciones, en 2008, ha sido el único miembro del anterior Gobierno que ha criticado, con notable dureza, las reformas del actual presidente. En abril le calificó de “desastre absoluto”, en una reunión del Partido Republicano de Wyoming. Habían pasado entonces sólo unas semanas desde que se sometiera a un trasplante de corazón, después de un largo historial de dolencias coronarias.
Ya entonces, Cheney alabó a Romney, cuando aun no se había asegurado definitivamente la nominación de su partido. “Hará un trabajo tremendo”, dijo el exvicepresidente. Aquel gesto le ha ofrecido ahora la oportunidad de reunirse con el candidato, y de presidir en su honor un acto de recaudación de fondos en su residencia de Jackson Hole, una ciudad de 9.000 habitantes afamada por sus impresionantes vistas de las montañas Teton y Gros Ventre.
No hubo momentos de gloria -y demostración de influencia- para Cheney en las pasadas elecciones. Entonces, el senador candidato John McCain trataba de distanciarse como podía de Bush y de todo su equipo, cuyas cotas de popularidad se hallaban en mínimos históricos. Una vez ganó Obama,Cheney se dedicó a defender con fiereza el legado del Gobierno en el que pasó ocho años. Uno de sus argumentos que más empleo fue que las gestiones de Bush habían evitado un nuevo ataque terrorista en suelo norteamericano desde los del 11 de septiembre de 2001.
Romney y el Partido Republicano recaudaron en junio 106 millones de dólares (87 millones de euros al cambio actual), superando cómodamente a Obama y los demócratas, que recaudaron 71 millones de dólares (58,3 millones de euros). Los que acudan al rancho de Cheney esta noche habrán pagado 30.000 dólares (24.600 euros) por cubierto. Según la cadena de televisión ABC News, acudirán al encuentro unas 230 parejas. Previamente habrá una recepción en el Club de Campo Teton Pines, cuya entrada costará 2.500 dólares. Aquellos que quieran una foto con Romney y Cheney deberán pagar el doble.
Cheney es uno de los políticos más veteranos del Partido Republicano. Entró en política, como asesor en la Casa Blanca, en 1969. Llegó a ser jefe de gabinete de Gerald Ford en 1975, para luego ganar una elecciones legislativas en Wyoming, ocupando un escaño en la Cámara de Representantes entre 1979 y 1989. Sirvió luego con los dos presidentes Bush, padre e hijo, como ministro de Defensa y vicepresidente. A pesar de su conservadurismo en materia de seguridad nacional es un prominente defensor del matrimonio gay. Su hija, Lynn, es lesbiana, y se casó con su pareja, Heather Poe.
Cheney ha sido uno de los mayores críticos con la Administración de Barack Obama
David Alandete
Washington, El País
Si el candidato republicano Mitt Romney tenía que reunirse con el exvivepresidente Dick Cheney, el arquitecto de las guerras Irak y Afganistán y el mayor valedor de las técnicas de tortura y encarcelamiento indefinido de la Administración de George W. Bush, debía hacerlo lejos, bien lejos, de Washington y de las cámaras que le siguen en todas las paradas de su gira electoral. El encuentro, una cena para recaudar fondos, tendrá lugar hoy a puerta cerrada en el rancho que Cheney tiene en el remoto Estado de Wyoming, al que representó en el Congreso federal durante una década, de 1979 a 1989.
Cheney, muy respetado entre los republicanos, es una figura polémica entre los demócratas y divisiva entre los independientes. Desde que Barack Obama ganara las elecciones, en 2008, ha sido el único miembro del anterior Gobierno que ha criticado, con notable dureza, las reformas del actual presidente. En abril le calificó de “desastre absoluto”, en una reunión del Partido Republicano de Wyoming. Habían pasado entonces sólo unas semanas desde que se sometiera a un trasplante de corazón, después de un largo historial de dolencias coronarias.
Ya entonces, Cheney alabó a Romney, cuando aun no se había asegurado definitivamente la nominación de su partido. “Hará un trabajo tremendo”, dijo el exvicepresidente. Aquel gesto le ha ofrecido ahora la oportunidad de reunirse con el candidato, y de presidir en su honor un acto de recaudación de fondos en su residencia de Jackson Hole, una ciudad de 9.000 habitantes afamada por sus impresionantes vistas de las montañas Teton y Gros Ventre.
No hubo momentos de gloria -y demostración de influencia- para Cheney en las pasadas elecciones. Entonces, el senador candidato John McCain trataba de distanciarse como podía de Bush y de todo su equipo, cuyas cotas de popularidad se hallaban en mínimos históricos. Una vez ganó Obama,Cheney se dedicó a defender con fiereza el legado del Gobierno en el que pasó ocho años. Uno de sus argumentos que más empleo fue que las gestiones de Bush habían evitado un nuevo ataque terrorista en suelo norteamericano desde los del 11 de septiembre de 2001.
Romney y el Partido Republicano recaudaron en junio 106 millones de dólares (87 millones de euros al cambio actual), superando cómodamente a Obama y los demócratas, que recaudaron 71 millones de dólares (58,3 millones de euros). Los que acudan al rancho de Cheney esta noche habrán pagado 30.000 dólares (24.600 euros) por cubierto. Según la cadena de televisión ABC News, acudirán al encuentro unas 230 parejas. Previamente habrá una recepción en el Club de Campo Teton Pines, cuya entrada costará 2.500 dólares. Aquellos que quieran una foto con Romney y Cheney deberán pagar el doble.
Cheney es uno de los políticos más veteranos del Partido Republicano. Entró en política, como asesor en la Casa Blanca, en 1969. Llegó a ser jefe de gabinete de Gerald Ford en 1975, para luego ganar una elecciones legislativas en Wyoming, ocupando un escaño en la Cámara de Representantes entre 1979 y 1989. Sirvió luego con los dos presidentes Bush, padre e hijo, como ministro de Defensa y vicepresidente. A pesar de su conservadurismo en materia de seguridad nacional es un prominente defensor del matrimonio gay. Su hija, Lynn, es lesbiana, y se casó con su pareja, Heather Poe.