Mursi asegura que los militares volverán a sus cuarteles
Madrid, EP
El primer presidente civil de Egipto, el islamista Mohamed Mursi, ha anunciado durante su tercer discurso de investidura que los militares "volverán a sus cuarteles" y se ha comprometido a honrar la memoria y los ideales de los "mártires" fallecidos durante la revolución contra el antiguo régimen.
"Los organismos electos reanudarán sus funciones y el Ejército volverá a sus cuarteles, a su función primigenia de protección de las fronteras", ha afirmado Mursi durante su discurso de esta tarde en un acto al que han asistido las máximas autoridades del país, según recogen los medios egipcios.
Con estas palabras, Mursi parece respaldar al Parlamento, disuelto por orden del Tribunal Constitucional, y se planta ante el poder del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que ha tutelado la transición desde la dimisión forzada por las protestas del anterior presidente, Hosni Mubarak.
Mursi fue recibido en el Salón de Baile de la Universidad de El Cairo con un estruendoso aplauso. El nuevo presidente comenzó su intervención pidiendo disculpas a los estudiantes por el retraso en los exámenes que ha implicado esta ceremonia y ha recordado sus años de estudiante en esta institución.
De inmediato pasó a rememorar a los fallecidos durante las revueltas contra Mubarak, algunos de cuyos familiares estaban presentes portando fotografías de las víctimas de la represión. "Todo esto es gracias al sacrificio de vuestros hijos", ha asegurado, al tiempo que ha prometido justicia para los heridos y las familias de los muertos.
Sin embargo, Mursi se ha evitado atacar la institucionalidad heredada y ha destacado la importante función desempeñada por jueces, militares y policías en la supevisión de las recientes elecciones. En ese momento un espontáneo interrumpió el discurso con gritos de apoyo al Ejército y al Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas.
"Egipto no romperá con la nación árabe e islámica", ha proseguido Mursi, y ha advertido que el país no tolerará ataque alguno contra ningún país árabe. "Es obligado el fin del derramamiento de sangre siria y no pararemos hasta que los palestinos recuperen sus derechos y sus tierras", ha afirmado. En cualquier caso, ha prometido que respetará "los acuerdos y tratados internacionales", una referencia velada al tratado de paz firmado con Israel en 1979.
En línea con sus intervenciones anteriores, Mursi ha rechazado ingerencias en los asuntos internos egipcios y ha hecho un nuevo llamamiento a la unidad de musulmanes y cristianos "esbozando un futuro mejor para Egipto y cumpliendo los objetivos de la revolución: libertad, justicia social y dignidad". "Ha llegado el momento de mirar hacia adelante, hacia un futuro próspero de Egipto", ha concluido Mursi.
En el acto han estado presentes los miembros del Consejo Surpemo de las Fuerzas Armadas, incluido su jefe, el general Husein Tantawi, así como destacados políticos, sindicalistas y representantes diplomáticos.
COMUNICADO DEL EJÉRCITO
Más tarde, el general Tantawi ha hecho público un comunicado en nombre del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas en el que ha destacado que han cumplido con su compromiso de entregar el poder a un presidente electo.
"El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas anunció el 11 de febrero de 2011 que no era una alternativa a la legitimidad a la que aspiraba el pueblo, que no tenía aspiraciones por el poder y que entregaría el poder a un presidente electo por la voluntad popular", señala Tantawi en el comunicado, al que ha tenido acceso la agencia Reuters antes de su publicación.
"Hoy es el día en el que se cumple ese compromiso, el día en el que nuestro gran Ejército y sus comandantes demuestran que son los guardianes conforme a los designios de Dios", prosigue.
El primer presidente civil de Egipto, el islamista Mohamed Mursi, ha anunciado durante su tercer discurso de investidura que los militares "volverán a sus cuarteles" y se ha comprometido a honrar la memoria y los ideales de los "mártires" fallecidos durante la revolución contra el antiguo régimen.
"Los organismos electos reanudarán sus funciones y el Ejército volverá a sus cuarteles, a su función primigenia de protección de las fronteras", ha afirmado Mursi durante su discurso de esta tarde en un acto al que han asistido las máximas autoridades del país, según recogen los medios egipcios.
Con estas palabras, Mursi parece respaldar al Parlamento, disuelto por orden del Tribunal Constitucional, y se planta ante el poder del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que ha tutelado la transición desde la dimisión forzada por las protestas del anterior presidente, Hosni Mubarak.
Mursi fue recibido en el Salón de Baile de la Universidad de El Cairo con un estruendoso aplauso. El nuevo presidente comenzó su intervención pidiendo disculpas a los estudiantes por el retraso en los exámenes que ha implicado esta ceremonia y ha recordado sus años de estudiante en esta institución.
De inmediato pasó a rememorar a los fallecidos durante las revueltas contra Mubarak, algunos de cuyos familiares estaban presentes portando fotografías de las víctimas de la represión. "Todo esto es gracias al sacrificio de vuestros hijos", ha asegurado, al tiempo que ha prometido justicia para los heridos y las familias de los muertos.
Sin embargo, Mursi se ha evitado atacar la institucionalidad heredada y ha destacado la importante función desempeñada por jueces, militares y policías en la supevisión de las recientes elecciones. En ese momento un espontáneo interrumpió el discurso con gritos de apoyo al Ejército y al Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas.
"Egipto no romperá con la nación árabe e islámica", ha proseguido Mursi, y ha advertido que el país no tolerará ataque alguno contra ningún país árabe. "Es obligado el fin del derramamiento de sangre siria y no pararemos hasta que los palestinos recuperen sus derechos y sus tierras", ha afirmado. En cualquier caso, ha prometido que respetará "los acuerdos y tratados internacionales", una referencia velada al tratado de paz firmado con Israel en 1979.
En línea con sus intervenciones anteriores, Mursi ha rechazado ingerencias en los asuntos internos egipcios y ha hecho un nuevo llamamiento a la unidad de musulmanes y cristianos "esbozando un futuro mejor para Egipto y cumpliendo los objetivos de la revolución: libertad, justicia social y dignidad". "Ha llegado el momento de mirar hacia adelante, hacia un futuro próspero de Egipto", ha concluido Mursi.
En el acto han estado presentes los miembros del Consejo Surpemo de las Fuerzas Armadas, incluido su jefe, el general Husein Tantawi, así como destacados políticos, sindicalistas y representantes diplomáticos.
COMUNICADO DEL EJÉRCITO
Más tarde, el general Tantawi ha hecho público un comunicado en nombre del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas en el que ha destacado que han cumplido con su compromiso de entregar el poder a un presidente electo.
"El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas anunció el 11 de febrero de 2011 que no era una alternativa a la legitimidad a la que aspiraba el pueblo, que no tenía aspiraciones por el poder y que entregaría el poder a un presidente electo por la voluntad popular", señala Tantawi en el comunicado, al que ha tenido acceso la agencia Reuters antes de su publicación.
"Hoy es el día en el que se cumple ese compromiso, el día en el que nuestro gran Ejército y sus comandantes demuestran que son los guardianes conforme a los designios de Dios", prosigue.