Suu Kyi pide suspender las sanciones al régimen birmano por violar los DDHH
Washington, EP
La premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi ha instado a la comunidad internacional a suspender, no eliminar, las sanciones impuestas al régimen birmano por violar los Derechos Humanos para mantener la presión sobre el Gobierno y garantizar que continúe con las reformas democráticas.
"Creo que las sanciones han sido muy efectivas a la hora de persuadir al Gobierno de que haga cambios", ha dicho la líder opositora este martes en una videoconferencia con Washington. No obstante, ha advertido de que las reformas democráticas "no son irreversibles".
"La gente es demasiado optimista sobre lo que está sucediendo en Birmania", ha considerando, subrayando que la transición democrática no será una realidad hasta que el Gobierno se comprometa "firme y oficialmente" con la misma.
A modo de ejemplo, ha mencionado que, a pesar de que en el último año el Gobierno ha liberado a cientos de presos políticos, todavía quedan 271 por excarcelar, cifra que las organizaciones humanitarias elevan a 1.200. "Si su objetivo es realmente la democratización, no debería haber presos políticos en Birmania", ha sostenido.
Si bien, la premio Nobel de la Paz ha aclarado que no está en contra de que se suspendan las sanciones contra el régimen birmano, ya que ello ha mandado "un fuerte mensaje de apoyo a las reformas democráticas que está llevando a cabo".
"No estoy en contra de la suspensión de las sanciones, en la medida en que el pueblo estadounidense sienta que es lo correcto en este momento", ha subrayado.
Desde marzo de 2011, cuando la Junta Militar cedió el poder a un Gobierno civil, las autoridades birmanas, además de liberar a cientos de presos políticos, han legalizado los sindicatos, han reducido la censura a los medios de comunicación y han reanudado las conversaciones de paz con las minorías étnicas.
A ello hay que sumar que han permitido la participación de la Liga Nacional para la Democracia (LND) de Suu Kyi en las elecciones legislativas parciales que se celebraron el pasado mes de abril y que han permitido que 45 miembros del partido político, entre ellos su líder, ocupen un escaño.
En respuesta, la Unión Europea, Estados Unidos y Australia han comenzado a levantar paulatinamente las sanciones impuestas a Birmania permitiendo el acceso del país a las instituciones financieras internacionales y abriendo la puerta al intercambio comercial de determinados productos.
La premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi ha instado a la comunidad internacional a suspender, no eliminar, las sanciones impuestas al régimen birmano por violar los Derechos Humanos para mantener la presión sobre el Gobierno y garantizar que continúe con las reformas democráticas.
"Creo que las sanciones han sido muy efectivas a la hora de persuadir al Gobierno de que haga cambios", ha dicho la líder opositora este martes en una videoconferencia con Washington. No obstante, ha advertido de que las reformas democráticas "no son irreversibles".
"La gente es demasiado optimista sobre lo que está sucediendo en Birmania", ha considerando, subrayando que la transición democrática no será una realidad hasta que el Gobierno se comprometa "firme y oficialmente" con la misma.
A modo de ejemplo, ha mencionado que, a pesar de que en el último año el Gobierno ha liberado a cientos de presos políticos, todavía quedan 271 por excarcelar, cifra que las organizaciones humanitarias elevan a 1.200. "Si su objetivo es realmente la democratización, no debería haber presos políticos en Birmania", ha sostenido.
Si bien, la premio Nobel de la Paz ha aclarado que no está en contra de que se suspendan las sanciones contra el régimen birmano, ya que ello ha mandado "un fuerte mensaje de apoyo a las reformas democráticas que está llevando a cabo".
"No estoy en contra de la suspensión de las sanciones, en la medida en que el pueblo estadounidense sienta que es lo correcto en este momento", ha subrayado.
Desde marzo de 2011, cuando la Junta Militar cedió el poder a un Gobierno civil, las autoridades birmanas, además de liberar a cientos de presos políticos, han legalizado los sindicatos, han reducido la censura a los medios de comunicación y han reanudado las conversaciones de paz con las minorías étnicas.
A ello hay que sumar que han permitido la participación de la Liga Nacional para la Democracia (LND) de Suu Kyi en las elecciones legislativas parciales que se celebraron el pasado mes de abril y que han permitido que 45 miembros del partido político, entre ellos su líder, ocupen un escaño.
En respuesta, la Unión Europea, Estados Unidos y Australia han comenzado a levantar paulatinamente las sanciones impuestas a Birmania permitiendo el acceso del país a las instituciones financieras internacionales y abriendo la puerta al intercambio comercial de determinados productos.