Lee Myung Bak compara a Corea del Norte con un "niño malcriado"
Seúl, EP
El presidente de Corea del Sur, Lee Myung Bak, ha aprovechado la celebración del Día del Niño para comparar a su vecina, Corea del Norte, con un niño malcriado por desatender las continuas peticiones de la comunidad internacional para que no lanzara un cohete de largo alcance en violación de las sanciones que pesan sobre Pyongyang.
El presidente criticó además al régimen norcoreano por emprender una iniciativa tan costosa en un momento en el que el país atraviesa una crisis alimenticia, pendiente de una ayuda externa que precisamente ha puesto en peligro por su insistencia en llevar a cabo la prueba.
Lee Myung Bak pidió una vez más a la comunidad internacional que se una
para reconducir la actitud de Corea del Norte, para que algún día el régimen se muestre más receptivo a la hora de atender estas demandas, según declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias surcoreana Yonhap.
Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido, los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, han exigido este pasado jueves al régimen norcoreano que abandone los ensayos nuclares.
Corea del Norte, que realizó ensayos nucleares con plutonio en 2006 y 2009, está ultimando los preparativos de un tercer ensayo nuclear, según explicó a Reuters un veterano responsable que mantiene estrechas relaciones con Pyongyang y Pekín.
"Pedimos a (Corea del Norte) que renuncie a más acciones que pueden causar serias preocupaciones en la región por motivos de seguridad, incluidos los ensayos nucleares", han afirmado los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad en una declaración conjunta en el marco de la reunión sobre cuestiones nucleares mantenida en Viena (Austria).
El régimen, que ahora lidera Kim Jong Un, hijo del fallecido Kim Jong Il y nieto del 'presidente eterno', Kim Il Sung, se había acercado a las posiciones de la comunidad internacional al renunciar al desarrollo de los puntos claves de su programa nuclear pero el pasado 13 de abril volvió a ganarse el rechazo internacional con el lanzamiento de un satélite meteorológico interpretado por el Consejo de Seguridad de la ONU como una nueva prueba nuclear.
Los cinco miembros permanentes del máximo órgano de decisión de la ONU han expresado en su declaración su "grave preocupación" por el lanzamiento del satélite, que finalmente no logró alcanzar su órbita.
Pyongyang ha justificado su programa nuclear por la necesidad de disponer de una defensa efectiva ante la amenaza de Estados Unidos, que tiene medios y fuerzas militares desplegados en bases permanentes en Japón y Corea del Sur.
Las denominadas conversaciones a seis bandas, el foro que reúne a Estados Unidos, Rusia, China, Japón y las dos Coreas, lleva paralizado desde 2008 cuando el régimen decidió abandonarlo. "Reafirmamos nuestro apoyo a la reanudación de las conversciones a ses bandas en el momento apropiado", han indicado los cinco países del Consejo de Seguridad.
El presidente de Corea del Sur, Lee Myung Bak, ha aprovechado la celebración del Día del Niño para comparar a su vecina, Corea del Norte, con un niño malcriado por desatender las continuas peticiones de la comunidad internacional para que no lanzara un cohete de largo alcance en violación de las sanciones que pesan sobre Pyongyang.
El presidente criticó además al régimen norcoreano por emprender una iniciativa tan costosa en un momento en el que el país atraviesa una crisis alimenticia, pendiente de una ayuda externa que precisamente ha puesto en peligro por su insistencia en llevar a cabo la prueba.
Lee Myung Bak pidió una vez más a la comunidad internacional que se una
para reconducir la actitud de Corea del Norte, para que algún día el régimen se muestre más receptivo a la hora de atender estas demandas, según declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias surcoreana Yonhap.
Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido, los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, han exigido este pasado jueves al régimen norcoreano que abandone los ensayos nuclares.
Corea del Norte, que realizó ensayos nucleares con plutonio en 2006 y 2009, está ultimando los preparativos de un tercer ensayo nuclear, según explicó a Reuters un veterano responsable que mantiene estrechas relaciones con Pyongyang y Pekín.
"Pedimos a (Corea del Norte) que renuncie a más acciones que pueden causar serias preocupaciones en la región por motivos de seguridad, incluidos los ensayos nucleares", han afirmado los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad en una declaración conjunta en el marco de la reunión sobre cuestiones nucleares mantenida en Viena (Austria).
El régimen, que ahora lidera Kim Jong Un, hijo del fallecido Kim Jong Il y nieto del 'presidente eterno', Kim Il Sung, se había acercado a las posiciones de la comunidad internacional al renunciar al desarrollo de los puntos claves de su programa nuclear pero el pasado 13 de abril volvió a ganarse el rechazo internacional con el lanzamiento de un satélite meteorológico interpretado por el Consejo de Seguridad de la ONU como una nueva prueba nuclear.
Los cinco miembros permanentes del máximo órgano de decisión de la ONU han expresado en su declaración su "grave preocupación" por el lanzamiento del satélite, que finalmente no logró alcanzar su órbita.
Pyongyang ha justificado su programa nuclear por la necesidad de disponer de una defensa efectiva ante la amenaza de Estados Unidos, que tiene medios y fuerzas militares desplegados en bases permanentes en Japón y Corea del Sur.
Las denominadas conversaciones a seis bandas, el foro que reúne a Estados Unidos, Rusia, China, Japón y las dos Coreas, lleva paralizado desde 2008 cuando el régimen decidió abandonarlo. "Reafirmamos nuestro apoyo a la reanudación de las conversciones a ses bandas en el momento apropiado", han indicado los cinco países del Consejo de Seguridad.